AÑO DE 181h
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AÑO DE 181h


voLIOTEC


D ES.-


QMDE V7.4:1>


MANIFIESTO


DE UN ESPAÑOL AMERICANO A SUS COMPATRIOTAS


DE LA AMÉRICA DEL SUR,


APOYADO EN HECHOS Y OBSERVACIONES PROPIAS.


ESCRITO EN CARACAS


CÁDIZ.


IMPRENTA DE LA JUNTA DE PROVINCIA


EN LA CASA DE MISERICORDIA. AÑO DE 1812.




1.> 13£


C`I


(C.


rORá '
(1.


tal e! t7escírden en el todo , y en cada


ta;te de nuestros intereses en América, que si los ose-
mitos de la Españaembidiosos de vernos en posesion de


una alhaja tan rica , y no pudiendo arrancarnosla por fuer-
za, se juntasen para discurrir el modo de intitilizarnosla,
treo que no pudieran idear un medio mas eficaz , que la
tIntiniocion de un sistema , que ha producido los efectos
due acabamos de reconocer.


Ward.


Troya econ, pág. 2.0 S'ap.


Q uando el fuego de la discordia se dilata por los
confines europeos 1.


guando el interes recíproco de las na-
cione balancéa y cae precipitado en su ruina: quando el es-
pirita de partido hierve excitado por la ambicion, el poder
y la intriga: (piando una convulsion general hace correr
arroyos de sangre : guando la guerra destructora y la


desolacion cubre los campos de la infeliz Europa 5 la
América espatIolaexnta de esta catástrofe por su localidad,
defendida por el Occeano y por el contraste de las fuer-
zas marítimas , vé encenderse en sus pueblos la tea de
la .disension , que la conduce irremisiblemente á su ex-
terminio en la época mas análoga y digna de su pros-
peridad.


Los privilegios exclusivos, otorgados por el antiguo
régimen á los infames favoritos del monarca : los es-
tancos , el monopolio , el desconcierto de la administra-
tion la dilapidacion de las rentas, la relaxacion de los
empleados públicos , su nombramiento ocasionado frecuen•
teniente por el inpulso de los resortes vergonzosos , que se
tocaban , la codicia de uno , la estupidez y altanería de
-otros , el cohecho , la impunidad , las continuas veja.-
dones que partian de su criminal manejo , la indolen-
cia del gobierno, la dificultad, riesgo y costosa di -
lacion de los recursos , el iniquo sistema de sostener los
caprichos del magistrado y otros inimurables excesos que
rabian echado profundas raices , irritaron los ánimos
al paso que la arbitrariedad y vicisitudes de las auto-
ridades succesivas inflamaban aquellos combustibles , cu-
ya explosion era de temerse, atendidas las agitaciones
de la pentnsuia.


Invadida ésta por el exécrable Napoleon , oyó pri-
mero el ruido de las armas que. los preparativos de-la





4guerra. Los pueblos amotinados , vieron salir del cen-
tro de la confusion y del desórden las juntas provin-
ciales y el nombramiento irreflexivo de sus miembros
fuá obra de la consternacion tumultuaria. La jornada de
Bailen disipó el nublado é hizo ver mui pronto la absoluta
necesidad de concentrar el gobierno. Aquellas juntas hijas
del conflicto; y formadas solo para ocurrir al riesgo irninen-
te, al armamento y pronta defensa de cada provincia, tu-
vieron la debilidad , ó por mejor decir incurrieron en el
pernicioso error de creerse autorizadas para enviar sus
diputados á la Central, sin otra consulta ni anuencia
de los pueblos. Los poderes conferidos se contrahian á
la formacion del Congreso en que debió resolverse la
clase de gobierno que convenia constituir , autorizando-
les para el nombramiento de los individuos que lo exercian;
y siendo unos meros compromisarios de las limitadísi-
mas facultades de sus respectivas juntas se arrogaron
la autoridad suprema que nunca obtuvieron legalmen-
te ; y la Espada acostumbrada á sufrir mayores exce-
sos , toleró este , temiendo los estragos de la anarquia,
y sintió alío y medio el mando despótico de la Central,
con la esperanza lisongera de las Córtes que habia anun-
ciado cautelosamente , como el único lenitivo , que po-
rfia templar los ánimos y dilatar su odiosa existencia,
- Por otra parte , la ausencia de Fernando, su cau-
•iverio y el de todas las personas reales que pudie-
ron haberle sucedido en el mando , dexó á la nacion
en plena libertad de constituir su gobierno. La invasion
violenta del enemigo , cortó los antiguos abusos ,


los privilegios y la necesidad imperiosa , restituyó
á cada individuo todo el caracter de ciudadano libre y
todas las facultades para elegir sus caudillos. Reasumió
el pueblo la soberania. Las tareas de los menestrales,
la pluma del literato , los caudales del . rico , las fati-
gas del labrador , los peligrosos trabajos del mari-
nero eran las bases que sostenian los derechos y la in-


dependencia nacional dando tne r giá y direccion á la
espada de los guerreros. La patria angustiada , deman-
daba todos los sacrificios y nadie podia eximirse de vin-
dicar sus agravios y aplicar el bálsamo á sus heridas.
- Veamos que conducta observó la América en tan
calamitosa crisis. La mas noble la mas expresiva , la
mas heróica y la mas digna de perpetuarse en los fas-
tos de la fidelidad.


Aquella sangre ilustre vertida en Madrid el 2 de
mayo, atravesó el Occeano y borró los resentimientos
de las antiguas vejaciones , suponiendolas ya fenecidas.
El anhelo afectuoso , que se traslucia en los semblantes
americanos , y el generoso desprendimiento de sus ar-
mas y caudales , enjugaron los lamentos de la patria.
El odio al tirano consolidó la union y el nombre espa-
ñol, restituyendonos el territorio perdido de la Isla de
Sto. Domingo , hizo en todas coman la causa de su in-
tegridad. La América conoció inmediatamente su primera'
obligacion , el deber sagrado de socorrer la honrosa ne-
cesidad de sus hermanos , y con la franqueza que dis-
tingue su carácter, empezó por remitir á la península
copia de frutos preciosos y considerables sumas de dinero;
al mismo tiempo que la junta Central se detenia seis meses
en exáminar si catorce millones de habitantes civilizados
y la rica extension de nuestras comarcas , podria consi-
derarse como parte integrante de la monarquia españo-
la. Lo declaró asi en 22 de enero de 1809 ; es decir,
despues de su precipitada salida de Aranjuez , y desde
el Alcazar de Sevilla , sujetó á reglamento la eleccion
de los diputados de América , mezclando en ella á los
virreyes « y oidores cuyos empleos debían ser obstáculo
al libre sufragio de los vecinos sujetos á su jurisdiccion.


Derrotadas ea Ocaña nuestras tropas, penetrada la
Sierra é i ntroducidos en Andalueia los exércitos enemigos,
se encaminaron á Sevilla, y los diputados de la Cen-


- tr
al, temiendo al furor del pueblo, Mas que á los fraile.




6
ceses ( que no podían considerarse mui ofendidos con sus
resoluciones ) huyeron de aquella ciudad é insultados por
los caminos , y expuestos al justo enojo de los verdade-
ros patriotas en las poblaciones del tránsito 5 llegaron
por fin á la Isla de Lean. Despojados ya de la auto-
ridad usurpada , sin poder alguno sobre nacion que
los miraba corno instrumentos de su ruina , y hechos
el blanco de la ira y exécracion popular , aspiró su omi-
nosa representacion ; y despues de enterrada y cubierta
de ignominia , salió del sepulcro de la desconfianz a píe
blica para instituir el Consejo de Regencia , que era en
su concepto: "el quadro tan lastimoso como horrible de
P>


la debastacion de la guerra civil , de la depredacion
y de la degradacion humana en la desventurada Cas-


9, tala. (I loe
México, á pesar de esta melancólica perspectiv a y


de la memoria que dexaron en su seno los latrocinios del
infame Brarichiforte , instruida de sus verdaderos inte-
reses, ligada por vínculos indisolubles , á quien la dió
el culto, civilizacion y dignidad , la opulenta México,
que pudo vacilar con las máximas sediciosas que labia
sembrado la ambicion infernal de otro gefe , firme en
los principios de lealtad , que habia manifestado desde
la revolucion de Aranjuez, vió en el establecimiento de
la Regencia una tabla que buena ó mala debla salvar del
naufragio á la triste patria en los momentos mas críticos de
su zozobra.


Mas ¡dolor indecible! la que me dió el ser ostiga-
da con el orgullo y extorsiones de los antiguos manda-


lentos y exasperada , acaso con una suerte , que ni la
calda de Godoi , ni la junta Central supieron mejorar,
rompió á su despecho los lazos que la unían al gobier-
no de la metrópoli , y siguiendo el pestilencial exemplo
de Venezuela se ha transformado en otro teatro de dis-
cordias y de confusion.


Ya la Central animada de su primitivo espíritu ha-


7
bia enviado á Caracas en marzó de t 8o9 al capitan ge-
neral D. Vicente Emparar), sujeto laborioso , franco y
desinteresado por carácter , aunque tenaz , algun tanto
en sus conceptos. Habian por su desgracia arribado an-
teriormente los honores concedidos al desconocido mé-
rito de Manterola y Canibel familiares del ministro Saa-
vedra , y las personas de los Basadres y otras hechue
ras del Alcazar de Sevilla , conocidos unos por su es-
túpidez , otros por su inexperiencia en la administracion
pública , y no pocos ( es preciso confesarlo con dolor )
por su insaciable codicia. La conducta de estos funcio-
narios daba á conocer el temor que les asistía de ser
repelidos corno emanaciones de una junta , que por su
ribalidad á los mas hábiles y fieles generales ( 2 ) 5 por
su inconsiderada aficion al mando, y por su notoria
impericia habla contribuido á detener los progresos é inu-
tilizar la victoria de Talavera , y á preparar la aciaga
accion de Ocatla 5 confirmando su descrédito en los últi-
mos confines de la monarquia.


Pasados tres meses , arribó á estas costas el asesor
del gobierno D. Vicente Anca, guando sus antesesores
habian sentado las bases del mas bárbaro despotismo ;
guando las primeras autoridades excitaban y sostenian
continuas competencias ; guando el intendente Easadre
( creatura de Saavedra ) habla despedido groseramente
al alcalde Hurtado , y rechazado á los menesterosos y
beneméritos criollos , con la absurda , temeraria é irri-
tante política de expresar que :rabia órdenes de Espa-
fía para no emplear americano alguno: acia este tiempo fué
que se presentó en la escena el asesor Anca , (3) nuevo en
la carrera legal y en los negocios públicos , ignorante
por principios , estólido incivil por exemplos codicio-
so por naturaleza y arbitrario por imitacion é impu-
nidad. Sale al teatro disputando las regias facultades dela a


udiencia ; asegura á los escribanos , ( que le yecon-
V ienen ) que recusacion é inivicion es una misma cosa ;




pide autos al primer escrito: no recibe alguno sin un
aumentó caprichoso é injusto de derechos ; altera el ór-
den judicia l y destruye la organizacion de la práctica
forense sujetandola á los errores y preocupaciones que le.
eran familiares.


Puede considerarse le influencia de tal adrninistracion
sobre unos ánimos despertados , resentido s


y ansiosos por


consiguiente de sacudir todo yugo de la metrópoli. Pue-
de tenerse presente que el ensayo de emancipacion trun-
cado en el ario de 97 repetido en SoS , bibrando to-
davía en aquellos corawnes , los preparaba á


no sufrir


vejám
enes de nuevos magistrados. ' Si estos considerando


aquellas premisas, echando una ojeada reflexiva sobre
la importancia de la América para la libertad de la pe-
nínsula y dignidad de la monarquia : discurriendo acerca
de la integridad declarada á estos reinos ultramarinos,
respetando los derechos imprescriptibles de sus habitan-
tes , y conciliando los intereses recíprocos de todos los
paises que forman la nacion , se hubieran cólocado á la
cabeza de los pueblos para favorecer el entusiasmo y
encaminar su energia á favor de la libertad del estado
contra el tirano comun habrían dirigido con acierto
el respeto y veneracion del pueblo acia su cautivo mo-
narca , en beneficio de su lealtad. Esta era la barrera,
que el gobierno de Venezuela , pudo situar oportunamen-
te entre la basa de la justicia y las pretensiones de los
disidentes. Esta era la cadena sagrada , que ligando las
opiniones de una poblacion eterogenea y concordando el
espíritu de los descontentos ó mal intencionad os


, debía


ocasionar el resorte de la fuerza
y el poder de


las instituciones legales ; y era en fin la medida que
presentaba la justicia y ' la política previsoria para so-
focar ea su origen una llama deborador a


de la seguridad


cornun ; cuyos rayos habían de comprehende• inevitable-
mente en el incendio á los primeros ministros del mando.


A tan misteriosas y obstinadas resoluciones debió en


9
mucha parte su fomento la seoaracion de Caracas , tra-
zad. con mucha antelacion y puesta en practica por los
mismos procesados en 808. Las noticias de la fuga y
dispercion de la junta Central y las de la formacion
del Consejo de Regencia llegaron á un tiempo. Los de-
fectos de esta nueva institticion .5 emanaban , como se
ht dicho , de los mismos constituyentes , y si endo públi-
cos los fines de la rcunion, de estos , y maniiiest, la I311-
lid4d con que obtuvieron el gobierno de la nacion .5 el
Consejo de Castilla fn j el primero en impugn Ir su au-
toridad , reclamando la infraccioti .-de la leí y el tras-
torna de la estructura monárquica , y qkywdo -Lis ocur-
rencias con el diputado de estas provincias y el inine-
dito nombramiento de D. Estevan de Leon , no h:ibie-
ran hecho tan frilpable el espíritu de 11 Ccritra.l.•so -
brariao las noticias.de su manejo interior y domas publica-
do por la4orriana Palafox y otros vocales despreocupa-
dos para distinguir eleoncepto que mereja en la penin


.•su/a
No . ?estarle. con . mas claridad el origéb vi-


cioso del-
ConsejO de 11.1gen2ia.;'. .rnas en la premura de


las circuns t
.apela en la, --apróximacion de los enemi-


gos, en el -estupor del pueblo, en el eminente peligro
de la vida y. de la libertad.; en el.riesgo de la anar-
quia., no podía adoptarse un medio legal, previo




á la;
formacion..de-eórtes, para el establediniento del urgente,
preciso é indispensable. poder exeentivo , qual no
hubieran: subsistido , ni 1-as tropas Idisptrsas , ni LIS re -
lociones con los aviados. No podía reunirse en Córtes
una nacion., que se hallaba. separada ,


por la distancia
d.e: los legares


. y tení t interceptadas suS comunicaciones.
Visto es , qué. I.i. América , colocada en situacion mas
remota_, :tenía inlydres diti2uitades;:pira enviar sus di-
pOtactos cosí la celeridad conveniente á las circunstan-
cies e.n: q ue á la sazon se 1-adiaba la península ," sin au-
torid .Jd est g


.blecida.:Las provincias de España no se'enian-
ci Plaron entonces , conio pudo suceder ; ellas observaban la


2 A




ca
ilegalidad del acto ; conocian personalmente á los electores
y elegidos; habían visto, habian sentido, hablan llorado los
males de la anterior administracion ; sus propios caudales,
sus valientes soldados batan sido víctimas de las-disposi7-
dones de aquel gobierno aciago; pero enmedio de estas
dolorosas persepciones, entendian, que la separacion era el
intento de Buonaparte y el mas permanente de sus triun-
fos. Conocian que su nombre, caracter y dignidad de-
pendian de su union. Comunes intereses afianzaban la
opinion pública , y conservandose inextinguible la llama
del patriotismo , se vió de repente otra insurreccion que.
aterrorizaba las águilas imperiales , y llenaba de opro-
bio á los vencedores de Jena y de Dantzik. Se vió tarn-
bien ( fenómeno singular ) la resistencia heróica de los
pueblos asolados, que sin comunicarse conabatian por una
misma causa , y arrollaban al enemigo sin unirse entre
sí, ni poder convinar el impulso de sus operaciones ofen-
sivas. Entonces se conoció que la lealtad y el respeto,
el valor y la entereza , la resolucion y la constancia
en soportar todo género de calamidades eran las sella.-les características de los héroes destinados por el ser Su-premo , para preveer las asechanzas , consolidar despues
su union , abatir el orgullo, y aniquilar la prepotencia
osada del tirano,


Estos impertérritos guerreros , aun mas respetables
en los infortunios que en las victorias conservarán su
nombre ilustre , no en mármoles ni bronces que son subs-
tancias perecederas , materia corruptible , sino en el co-
razon de todos los hombres virtuosos , en las entrañas
de los pueblos libres , en la fiel y constante tradicion
de las generaciones. Los monumentos, del saber y del ge-,
nio , inmortalizarán sus hechos y habrá muchos Tácitos
que transmitiendolos con pureza á posteridad , los li-
brarán de las injurias del tiempo y de la maligna in-


: fluencia de corrompidos y viciosos siglos.
Es manifiesto que ql:indo la península sos-.


tenia en el .-
-campo de Marte el fuego sagrado de nues-


tra i ndependencia , guando en Madrid humeaba toda-
'tija la sangre de las víctimas que la sellaron , mien-
tras los escombros de Zaragoza cubiertos de horror
y de gloria servian de pedestal al edificio augusto de
la libertad ; mientras las brechas de la inmortal Gerona,
descubrian y presentaban otros bduartes de mayor fir-
meza en los heróicos pechos de sus defensores ; y miea_
tras cada pueblo , cada aldea , cada familia , cada
dividuo eran otros tantos testimonios de la impotente
obstinacion del corzo ; Caracas ( si merecen este nom-
bre los pocos y bien conocidos autores de la insurrec -
don ) en un estado pacífico , á una distancia conside-
rable del enemigo comun , sin riesgo ni aun remoto de
un acontecimiento exterior, sin contar con las provin-
cias subalternas á donde envió despues emisarios , unos
con _ noticias falsas , otros con papeles sediciosos , y no
pocos con órdenes opresivas ( 4 ); Caracas , en vez de
estos procedimientos innobles , fraudulentos, mezquinos y
tiránicos, debió mas que nunca manifestar la generosidad
y grandeza de alma de la mayor parte de sus habitantes
dirigiendo sus miras y sus auxilios ácia sus afligidos herma-
nos de Europa. Debió interponer la prudencia para resistir
á la temeridad ó al influxo napoleónico de algunos de sus
gefes caso de ser justamente sospechosos. Debió en este
concepto nombrar provisoriamente funcionarios públicos de
conocida virtud, talento y amor nacional. Debió 'manifestar
al cuerpo representativo de la nacion ( qualquiera que fue-
se ) los motivos de la deposicion de sus arbitrarios guber-
nantes , y protestando sinceramente su concordia y ad -
hesion á la causa del estado , hacerse digna de la con-
fianza general por medio de la


• moderacion y de actos
imparciales de una equitativa y previloria política. De-
bió enviar sus diputados al Congreso Nacional de Cór-
tes , y disimulando por entonces quaiquier defecto en
el número de sus representantes , no exponerse a los




2
horrores de la anarquía y evitar sus funestos resultados
á que aspiraba el tirano. Debió contemporizar con tris
zelos y divisiones de las diversas- castas y clases. • y ja÷
mas vituperar al europeo. ( ). que comunicando su san..
gre , su idioma y su culto al americano - hijo ú herí
manó suyo , debian estar unidos por .vinculos tan sagra., , •
dos por tan preciosas relaciones. Debió por interes pro,
pio sofocar los resentimientos que había fonientado.
arbitrariedad , y unida en lo favorable al gobierno Cen-•
trai de la nacion , rechazar con decoro y circunSpec-
cion lo adverso. Debió en fin por- juiciosas y concilia,
torias medidas conservar la amistad y dependencia de las
provincias subalternas de tos pueblos y de -cada uno de -
los habitantes de Venezuela.


Sometidas copulativamente estas bastas d incultas re-
giones á la representacion general del Congreso de una
nacion , que baxo la figura monárquica vá recibiendó
de pocos meses á esta parte las elementos de una re-
pública bien organizada y estable; se habrían extinguido
las antipatías de las clases , el furor de los partidos
los estragos de la venganza , el encono de los resenti-
mientos „ los proyectos de la ambicion las pretensiones-
de la ineptitud. Se hbbria evitado la dilapidacion .del
erario y los turbulentos efectos. del ciesórden público.
Se habrian corre g ido los vicios de la administracion an-
terior y los errores del . despotismo. Se habrian cortado las
trabas del comercio doméstico , y las restricciones del°
giro exterior. Se habria mejorado la mísera y aflictiva
suerte de! jornalero , é impedido que los caudales del
rico se emplaasen contra la libertad y sosiego de la pa-,
tría. Se habria formado un espíritu público en la uniora
de los vecinos y los descontentos ó mal intencionado
no habrian podido sostener sus relaciones quiméricas:y
ofensivas á los nuevos gobiernos. La Europa hubiera ce-
lebrado gustosa los principios de modeea¿ion que los. di-
rigia. y una separacion de hecho de la antigua y


t 3
nesteroaa metrópoli , no habría causado mayores dados de
los que.se procuraba evitar con la nueva y absoluta reforma.


Estos males sancionados ya por la experiencia y.
que se han escapado á la pluma de un• fanático y ver--;
satil periodista que escribe en Lóndres con tanto da ti


. como insuficiencia sobre este objeto ( 6 ), pueden ser aun
mas sensibles y generales de lo qué conciben nuestras ob-
servaciones práticasa


Yo he sido testigo ocular de la efervesencia de las
pasiones., de los excesos de la ebriedad , de los extra-
víos del libertinage cometidos sin rebozo en las calles,
plazas y lugares públicos de esta capital el dia 19 de
abril del presente aro.


Una sociedad llamada patriótica , cuyos individuos
en el acto de su recepcion prometen concurrir .7on sus
medios y luces al logro de la independencia y libertad
absoluta : una reunían que ya pasa de cien individuos
entre los qua/es. hai varios franceses de nacimiento, dís-
colos por carácter,, revolucionarios por inclinaeion y dei..
testables por sus maxfirris libertinas : p ti enxambre de
vagos conocidos , ó por la obscuridad de su opinion ,
por 1:i corrupcion de sus costumbres , ó por la es-
nSpidez de sus 'ccnocirnientos ó por la superfieiall*
dad de un mal entendido, y ami propalado civis-
mo , 6 .


por la enormidad de sus delitos , ó por la irn-liunidad que los prótexe ó por la deinesurada ambi-
cion que los anima ; este abominable club , se propuso


<
celebrar el aniversario de la ernancipaeion de Venezuela


obra de sus
manos) con todas las detnostraciones de una


enagenaeion escandalosa , y de unos certámenes aun mas
dislocados y vergonzosos.


Terminado el explériclido banquete, presidido por la
disolucion , salieron los socios de la casa dastin.lda parasus funciones ( 7 ) á presentar al público el deficiente es-tado de su rizo


') , y todo el veneno cre abrig,iban sus
sentimientos. Formados ea dos alas y colocado sw van,




14
guardia el pendon amarillo de la libertad , se dirig:eron
al palacio arzobispal , y con denodada licencia penetra-
ron en tropel al retirado aposento del prelado. Le sa-
ludan ciudadano ( como lo acostumbraban por imitar
hasta en esto á los franceses ) y le demandaban con im-
perio el permiso para que los seminaristas los acompa-
ñen en su delirante paseo ; lo que les fué negado por la
criniana resolucion de un pastor zeloso de la educacion
pública, y consternando por no serle posible detener con
un:1 prudente y continuada política el torrente de la
ccorupsion.


Desde este edificio , asilo en otro tiempo' del sosie,
go y de la paz , continuaron la carrera de su insultan-
te y escándatoso debaneo. Las calles, el cielo mismo
resonaba con sus sacrílegas y regicidas voces ( 8 ): Mue-
ra Fernando VII , decian , mueran los godos , ( asi lla-
man á los españoles europeos , y á los criollos que no
siguen y aplauden sus delirios ) viva la igualdad , li-
bertad é independencia absoluta.


Con estas odiosas y abominables imprecaciones cru-
zaban las calles , forzando con sus sables desnudos las
puertas y ventanas de los principales y mas honrados
vecinos de la ciudad ; y no bien satisfechos del escán-
dalo que acababan de causar trataron de conmover y
sublevar el pueblo repitiendo desde las ventanas del club
á donde hablan regresado, las mismas agraviadoras voces
y otras mas infames todavia que no permite trasuntar
la modestia y el decoro.


La plebe, que vela echar por tierra y hollar en la
plaza pública las banderas nacionales que se habian pues-
to por adorno, y que escuchaba atenta los ¿zas no
interrumpidos de la embriaguez, manifestó en todo SU
porte el ningun interés que había tomado en las pasa-
das y presentes convulsiones , y ofreció al observador
sensato el espectáculo mas brillante de su lealtad , cor-
dura y modestia. Al paso que por socorrer sus indigen-


T 5
cias recogía el dinero que desde los balcones se prodi-
gaba , se desentendió absolutamente de la igualdad que
la ofrecían , avergonzada sin duda de nivelarse con aque-
llos entes degradados , que en vano regaban á manos
llenas el producto de sus juegos y rapiñas para comprar
la aprobacion de sus delirios. Asi se desengañaron vien-
do frustrado el designio que habian concebido de ga-
nar y reunir la gente de color para arrojarse tumul-
tuariamente al gobierno y obligarle por la fuerza á que
en aquel mismo dia dexase sancionada la independencia
absoluta de Venezuela.


Despues de seis horas de estos exercicios , guando
sus espíritus embriagados y sus debilitadas fuerzas no
podian sostener el equilibrio de sus cuer pos, concluyó
esta exécrable jornada , no pera sepultarse en el olvi-
do, sino para conservarse en los anales y en los funes-
tos códigos de la anarquia.


A tal grado llegó la audacia desenfrenada de los
modelos del jacobinismo , de los discípulos de Mirabeau,
de los precursores de un otro Danton , y de los pro-
tótipos del sanculotismo. A tal- grado subió la licencia
del vicio y los horrores de la confusion ; y en este estado
t.
' cómo puede concebirse la subordinacion al gobierno MI
la seguridad de la vida privada y la garantía del Orden
público?


No importa que el gobierno se llame conservador
y proteste en los papeles públicos, que nada le es mas
sagrado , que los- derechos rie Fernando No impor-
ta que este nombre augusto se subscriba en los títulos
y nombramientos :de estos


. profanadores. No importa que
baxo este capcioso velo: hayan querido encubrir su in-
saciable anabicion , su


.arraiga da infidelidad y sus desar-
regladas p::siones.No iinnerta que hayan intentado sor-
prender i nútilmente. á la nacion inglesa cou las dolosas
protestas de conservar ilesos estos dominios ádei. No im




- yaporte que Lun


su cautivo
procurado alueicar y some-


,h`




1
ter con estas y otras fraudulentas ideas 'las provincias
subalternas de Venezuela. 'No importa que un buque de.
los antiguos guarda-costas mandado por un tal Mar-
tirena de nacion frances , enarbole el pabelion real , pa-
ra disfrazar sus piraterias , y apresar otro buque nacio-i
nal (i o ). No importa que contra los principios de liber-
tad civil adoptada en el dia de la revolucion del 19
de abril de 18 t o se haya desernbainado la espada có-
mica -dl marqués de Toro ( ), que capitaneaba los
quatro mil hombres de armas, que huyeron despavbri-
dos en la memorable jornada de Coro ( 12 ). No importa
que los soldados asalareadol del monarca baxo el nuevo
gobierno sean destinados con violencia y por gafes ven-
didos á pasar el Orinoco., debastando los fértiles llanos
de Apure con las depredaciones del ganado bacuno y ca-
ballar , ( recurso precario, concebido para ocurrir á los
gastos de tal expedicion ) y pretendiendo conquistar á
los gatayabeses, sometidos fielmente al mismo trono. No
importa 'que los leales súbditos que por reconocerle le-
títimamente. promovieron una conspiracion en octubre pró-
ximo fuesen el blanco de la ira que los condenó á pe
recer en hediondas y mortíferas bóvedas , en lóbregos é
inmundos calabozos , donde están sufriendo todos los hor-
rores. de la. miseria y de la bárbara impiedad - que no
han podido ablandar , ni las lagriMe q de sus afligidas es
posas nacidas en nuestro suelo , ni i a horfandad y de
solacion de sus tiernos hijos , nuestros compatriotas , ni
el influxo .de los diputares de una proviticia de nuestro
continente, que sensibles á la consternacion de estas fa-'


desgraciadas,, han interpuesto inútilmente en s
favor todos sus respetps y e1' de' su provincia „ cuyos
oficios generosos , cuyas súplicas reiteradás' han sido tan
gratas'á lad011ente humanidad 5 corno . edieSas y reprehen
sibles a los ojos de sus encarnizados enemigos' . t 3 -)5 No
importa en fin que el :dia de la instalacion del actual
Congreso „se:jurase ante los altares del ser. Supremo.el


r7
sostenimiento de los derechos de la corona ; era necesa-
rio dar á la América , á la Europa y al mundo ente-.
ro el público testimonio , el completo desengaño de la
falsedad de estos principios tan proclamados ( r4. ), era
preciso hollar con sacrílegas plantas la efigie de FernanT
do VII , qual se vió , asi en las posadas y calles pú-
blicas , como en el mismo palacio del Congreso , pro-
clamando la muerte de su legitimo soberano , y brin-
dando escandalosamente en los convites por el extermi.-
nio de todas las testas coronadas ; y por último: era
indispensable interceptar despóticamente toda la corres-
pondencia ultramarina , ocultar las noticias favorables de
nuestras armas ponderar las adversas , sostenerse con
la ignorancia de los pueblos alucinados abusar del man-
do , proscribir al que detesta la opresion , fomentar el
espionage , castigar al que recibe ó lee un papel público
de la Europa , que no convenga con sus ideas , recluir
al que es sorprendido con alguna gazeta de la penín-
sula y declarase enemigos irreconciliables de la reflexion
y de la verdedera libertad.-


Tal es el doloroso y melancolice resumen- de los he-
chos mas principales y notorios de la revolucion de Ca-
racas ; tal es el sistema opresor- adoptado contra la


,
liber-


tad civil de estos infelices habitantes. Este es el triste
quadro de las operaciones de un pais miserable , que ha
querido figurar en el globo , é imitar las locuras de los
Jacobinos, entonando en el coliseo público los himnos
marselleses , las canciones de la caramañala ( ) que
excitaban el aplauso de unos y las lágrimas de otros


'


-


y estas son las báses en que desatinadamente se pretende
cimentar otra i ndependencia como la norte-americana ,
substituyendo á las luces y virtudes de Franklin y Was-
hington las lecciones del vicio y de la corrup.ion : asi
se pretende fundar otra república de Holanda, no en la
sobriedad , riqueza y virtudes á que dió impulso el prín-
cipe de Orange, sino sobre la disipacion, pobreza sé


3




inmoralidad sostenidas por la inaccion 'y debilidad de
un gobierno sin tino, carácter ni representacion.


Espallo l es arnéricanos : un compatriota es quien os.
habla: un compatriota que se halla ligado por vínculo;
de consanguinidad con los sujetos que representan la;
primeros papelss en la presente convulsion del nuevo mune.
do : un amigo vuestro que por infinitas razones se con-
sidera ex¿I nto de toda sospectra de parcialidad , y un her-
mano que ha de participar con vosotros de la felicidad
ó de la desgracia. Os habla un arnéricano , que sufrió
desaires, injurias, y que fue víctima de la arbitrarie-
dad de uno de los gefes que con mucha razon depulds-
teis del mando ; pero un américano que todo lo olvi e


-da , guando media el sagrado interes de la patria. Le-jos de vosotros toda idea de division , toda señal de anar-quía. Sed justos , si quereis ser libres. No confundais los
vicios del antiguo gobierno , ni la relaxacion de aque-
llos orgullosos mandatarios con las virtudes del pueblo
que los detesta y no condeneis precipitadamente á la
2-utoriciad que nunca os ha injuriado. La rectitud de vues-
tros luidos, la justicia de vuestras demandas, la im-
parcialidad de vuestros procedimientos y el decoro de
vuestras acciones, os atraerán amigos verdaderos , que
reuniendo sus fuerzas os harán invencibles. El mundo ee-


i 'rá con admiracion la entereza con que sosteneis la inte-
gridad de vuestro suelo , y la España misma os res-
petará al consideraros herederos de su amor á la li-
bertad , de su odio á la tiranía , y de su constancia
inalterable en las vicisitudes de los tiempos. Retrogra-
dareis sin remedio á la esclavitud mas ominosa , y los
siglos bárly3ros empezarán de nuevo á correr por estos
deliciosos recintos, si la circunspeccion no brilla en vues-
tras acciones y la justicia no se hace cornpañera inse-
parable de vuestros procedimientos. Las disenciones llo-
verán sobre vuestras familias, y rodeados de zelos , de
enemistades, de mist:ria y de ti..ibulacion l vendreis á ser


9
sin objeto de odio y de desprecio para los mortales. Vol-
ved los ojos ácia esos fecundo; territorios , fijad la con_
sideracion en las dilatadas costas que habeis de con-
servar y defender. Echad una mirada reflexiva por los
desiertos , por los campos incultos , por los ríos y pre-
ciosas montañas, á donde toda via no han llegado. ni
vuestras manos ni la codicia. Notad el interes con que
los extrangeros os alliagan , mirando vuestros tesoros. Pa-
sad á sus posesiones ultramarinas. Observad atentamen-
te su manejo. Indagad con cuidado y exáminad sin par-
cialidad la viciosa é impía educacion, la servidumbre po-
lítica y las severas restricciones con que rigen á sus co-
lonos. Cotejad su industria representacion y riquezas
con las de aquellos europeos que atraviesan los mares
para chupar toda la substancia de Zas colonias que do-
minan , y volver á Europa cargados con el producto
del terreno que esprimen y abandonan. Reparad bien en
los enlaces y conexiones que en él dexan ; y si la cie-
-ga credulidad no ofusca vuestra razon si os mostráis
accesibles al convencimiento de la verdad , sacareis por
resultado de vuestras combinaciones, que la prosperidad
á que dabais aspirar , no consiste precisamente en una
in.iependeucia , qual puede tenerla el solitario habitador
de un desierto abandonado y expuesto á ser presa de
la ambicion , ni en entregaros irreflexivamente á la dis-
creeion de un gobierno que abuse de la autoridad y
os convierta en esclavos , sino en constituirlo sólido , su-
jeto á pactos y convenciones inviolables , estable y •sos-
tenido , no por un fanatismo desconcertado, no por una
imitacion pueril no por un cúmulo de voces pompo-
sas é insignifldativa.s no por una presuncion ignorante,
no por la opresion y el terrorismo , sino por el códi-
go de la equidad y de la sana política.


Los inmensos terrenos que poseis , la escasez de ha-
bitantes que experimentais , la diferencia de clases y cas-
tas que os rodean, la variedad de opiniones que pdg.aa*---.





20
'en perjuicio de vuestra seguridad , los débiles recursos
que pocleis oponer á la invasion violenta del enemigo
'que quiera insultaros , todo 1 todo demanda la union con
quien pueda surtiros de guerreros capaces de coad-
yuvar á la defensa de vuestras propiedades, de vues-
tro . culto de vuestros usos , de vuestras costumbres„
t Y quién podrá afianzar mejor los vínculos de vues-
tra -seguridad , y la garantia de estos sagrados ob-


jetos? ¿ La Francia que se mostró insensible á la des-
venturada suerte de sus propios hijos , de aquellas víc-
timas sacrificadas al furor de los negros del Guarico
y mas todavia á la frenética codicia y brutal ferocidad
'cle las tropas sanguinarias , que bazo el velo de la pro-
teccion tra.xeron de Europa la desolacion y total ex-
t de aquellos desventurados colonos ? i La Fran-
cia, que ocupada por inclinacion y por sistema en con-
tinuos saqueos y depredaciones, envuelta en perfidias,
cubierta de sacrilegios, y vilmente humillada con la ele-
vacion de un extrangero , ha visto apática los estragos
de aquella colonia , y no ha podido ocurrir á la defensa,
que tanto la interesaba , de la Martinica Guadalupe,
y ciernas posesiones ultramarinas arrebatadas de su do-


"Minacion ? ¿ La Francia ( 16 ) que bazo el pesado yugo
de un tirano ha imolado á la ambicion de este , y á
los latrocinios de sus primeros y mas condecorados sa-
télites , su comercio , su agricultura , sus caudales , sus
soldados , su libertad , su existencia, y la heróica san -
gre de vuestros padres , de vuestros hermanos ? ¿ De quien
pues , debereis esperar sinceridad y auxilios sino de la
misma nacion que os ha acompañado en las adversidades,
que ha gemido con vosotros en la opresion que ha sufrido,
con vuestra compañera inseparable en los trabajos , y á
quien la mano del Todopoderoso ha unido con vosotros


" tan estrechamente que seria preciso .cubrilos de tinieblas
• y de luto para romper los lazos de vuestra creencia y


sanguiuidad Quién os mirará con la predileccion que


21
debe hacerlo la madre patria , que os es deudora de
tantos sacrificios ? ¿ Quién con mayor derecho que el pue-
blo español , será por todos títulos acrehedor á vuestra
confianza ? ¿ Y quién podrá compararse con esté pueblo
grande y valeroso


que sin caudillos
sin armas , sin


soldados , sin dinero , fortalezas ., empezó hace
mas de tres años la sangrienta lucha que sigue, y ro
deado de miserias, de calamidades, de enernigos , de
traidores , de intrigas y maquinaciones , es el único de la
Europa , que sostiene su '


-caracter é independencia , sin
baxar la cerviz á la coyunda vergonzosa del tirano 2


Tended la vista por aquel vasto continente , y ha-
llareis por resultado de la alianza y proteccion fran-
cesa la Alemania degradada , la Holanda desierta , la
Polonia esclavizada , la Dinamarca destruida , la Suecia
vilipendiada , la Italia y las .demas naciones continenta-
les sin nombre., dignidad , ni representacio.n, sumergi-
das en el abatimiento , .trasladadas., casi en masa á re-
gar con su sangre las paborosas márgenes del Ebro, las
esforzadas riberas del Tap , y atadas ignominiosamente
al sangriento carro del usurpador .del cetro, que emr.
pu::iron sus monarcas desgraciados ; mientras quo la Es-
parla inexpugnable., trensóla el glorioso estandarte de su
libertad .é independencia sostenido por el magnánimo pe-
cho de unos hijos .que son vuestros hermanos , y os ha-
ceo p articipantes de su renombre inmortal llenandose
de regocijo en vuestra union y fraternidad. Y vosotros


podreis reusarla , tratareis de romp.•rla con los que
enseñan al mundo , que la libertad de los pueblos re-
side en sus virtudes '? ¿ Os desdeñareis de corresponder
al esclarecido linage de aquellos héroes que si fueron
en otro tiempo el terror imperio romano , son aho-
ra el mas subido quilate del pundonor, el asombro de la


- constancia , el modelo del valor , la .envi:iia y oprobio
de las potencias subyugadas , el rayo everminador de
los exércitos foragidos y el baluarte inaccesible de la li-




1


á


2.2
bertad contra el qual se ha estrellado la perfidia


y.


la ambicion del sanguinario opresor de la Europa ?
Américanos del Sur. Yo solo trata de poner á vues


tra vista la verdad desnuda. La serie lastimosa de su-
cesos , que han pasado por mis ojos , y por los vues-
tros y guamos objetos examineis despreocupadamente , se-
rán otros tantos garantes de la exactitud y justija de
mi opinion. Soi vuestro compatriota , y discurriendo por
la extension de los sagrados deberes, que me impone
este honroso título he tomado la pluma , no para
bla ros en el detestable y pernicioso idioma , de una adu-
lacion servil no por conservar las relaciones de fami-
lia y otros objetos gratos que me ligan con intimidad
al pais de mi nacimiento , no por grangearme un lugar
distinguido entre los que hayan podido convenir con mis
ideas , sino para manifestaros sinceramente los errores
y escollos del sistema que habeis adoptado y los fu-
nestos males que ha producido.


En prueba de ellos dirigid vuestras miradas contem-
plativas acia la miserable y degradante situacion de la
ciudad en que escribo rodeado de zozobras , y temeroso
de ser víctima de un frenesí consumado. En Caracas ve-
reis el horroroso semblante del terrorismo ocupar el asien-
to de la libertad procLmada. Aqui vereis los tristes efec-
tos de una ernancipacion pueril , y los continuos y pe-
ligrosos debates de la anarquia. Vereis un pueblo des-
pedazado por el choque de los partidos , y reducido á
la avis espantosa desolacion. Aqui vereis violada la fé
pública „ desconocida la seguridad porsonal , entronizada
la opresion , perseguidos los habit intes útiles y honrados,
introducida la desconfianza entre el indio y el blanco,
el pardo y el negro , el noble y el plebeyo , sembrado
un cisma deborador entre el rico y el pobre , el padre
y el hijo, y oireis bramar la discordia aun en el mis-
mo lecho conyugal. Acpd v-Jreis anatematizado el nom-
bre español , este nombre tan justamente respetado ea


23
lo restante del mundo, y á quien se ha er ;gidó un tro-
no en el corazon de todos los hombres libres y virtitasos,


vereis una gavilla de jóvenes orgullosos , ignoran-
tes y corrompidos, ser el resorte de la suprema auto-
ridr,d de estos titulados representantes del pueblo ,
quit nes esa sometida la confederacion tan blasonado de
Verezuela. Aqui vereis hasta donde llega . el desenfreno
de las pasiones, guando se sostienen por la impunidad,
hasta :donde alcanzan los mas exécrables delitos , guando
se substra.en al rigor de las leyes. Aqui vereis inFrir3-
gidos los ekmentos de la justicia natural ., y trastorna-
dos los primeros principios del derecho público de que
-han abusado tanto los „pseudo políticos .caraqueños. Aqui
vereis el elogio debido al patriotismo abrogarse á aqu.e-
llos que han causado el desórden , que han turbado la
paz, que han dilapidado el erario, que han consumido
dos millones de pesos fuertes (propiedad sagrada de la
patria y .producto de todos los fondos públicos ) en so-
ñar su independencia , e ra sJtisfacer á la desmensurada
codicia de los swores de la revolucion, en sublevar los
pueblos tranq:,:los y hacerles concebir un odio implaca-
ble contra la península y contra todo hombre que -no
aplauda sus ex::.eso,-. Agol, oireis llamarse p-driota el que
mas se ha dist i ng-uicio en los transportes de la prostitu-
don. Aqui v.ereis confundida la virtud con el crimen
la moral con la r.eiaxacion , la esclavitud con la libertad.
Desde aqui descubrireis los dilatados términos de la
ingratitud , y las tortuosas tabernas de la perfidia. En
el mismo Congreso y ba.xo el solio en que :( para alu-
cinar al pulib o) se ha colocado la elige de Fernando
VII óireis á uno de los mas condecorados represen-
tantes -( 17 ) clamar par la expolsion total de los es-
pañoles europeos, funlando sus acalorados absurdo; en
.que el continente anglo américano , nunca pudo fixar
Independencia hasta que arrojó de su suelo á los ingle-
315 europeos (i


8 ). Le oireis alegar como un ru¿tito re-




24
comendable para obtener el aura popular á que aspiraba,
y le veréis probar con documentos auténticos el haber
abusado de la amistosa confianza de su gefe , amigo y
protector; y el haber seducido vilmente. por medio de
fraudes á los vecinos del valle de Aragua, estrechan-
doles por la fuerza armada á seguir el partido de la
independencia de estos paises, antes de executarse la re-
volucion de la capital ( 191 y este es ame1ricanos , uno
de los númenes tutelares de la patria , en quien dice el
gobierno, que (afianza P4 felicidad ( 20 ). Vereis por con-
secuencia forzosa de este . desárden' saqueado el laborioso
europeo , amenazado el pacifico arnéricano rebaxados los
sueldos de todos los empleados , agotado para siempre
el tesoro público, desolados los campos y enemistadas
entre si todas las ciudades de esta desconcertada confe-
deracion. Vereis obstruido el comercio, aniquilada la agri-
cultura , paralizada la industria , ocioso el artesano , y
expuesto el infdiz jornalero á la inevitable alternativa
de fallecer por hambre , ó de vivir por medio del ro-
bo y del asesinato ( 2 t ), Vereis un gobierno que para
su seguridad , y baxo el pretexto escandaloso de ave-
riguar la exirencia de nuestro amado rei , ha decretado
enviar parlamentarios á Francia ; como se vé en uno de
los artículos de sus sesiones ( 22 ): publicando con esta
medida la adhesion á un partido , que ya se traslucía,
tanto en sus manifiestos, guamo en la oficiosa acogida
que ha dispensado á los muchos franceses, nuevamente
establecidos en esta ciudad ( que presencian gustosos la
expatriacion continua de los españoles ) y en la conduc-
ta pasiva que ha observado con los profanadores del nom-
bre y retrato del monarca escarnecido y destrozado en
su propia presencia. Aqui hallareis en fia violada la pie-
dad , mofada la representacion del prelado eclesiástico
en las infames máscaras del libertinage, profanado el culto,
prostituida la cátedra de la verdad, vulnerada con aplau-
so la relizion ›. y proclamado del tolerantismo por los no-


2 5`
va dores , aunque contra el torrente de la corrupcion
ignorancia de. estos alguna impávida y enérgica pluma
haya procurado combatirle y refutar por principios po-
líticos las maximas que habia abortado la irreligion 6
el influxo de Puonaparte ( 23 ).


Vosotros teneis demasiada penetra cion para distin-
guir todos estos males ; tenedla tambien para precaverios.
En vosotros reside copulativamente la autoridad para ex-
riparlos , y hariais traición á la patria y á vuestra mis-
ma conciencia si los toleraseis. Yo no pretendo sino que
reflexioneis con imparcialidad en vuestra siruacion polí-
tica : que eviteis los lazos que pueda tenderos un ene-
migo sagaz y ambicioso : que rechazeis los peligros de
una fermentacion intestina : que examineis las ventajas
que de vuestra mano ha recibido el patrio suelo, com-
parandolas de buena fé con el interes general , y tran-
quilidad pública , y que no os arrebate la ambicion del
mando , ni el torrente impetuoso de las pasiones é de
tina preocupacion criminal , que ocasione la ruina de vues-
tros hijos , el oprobio de vuestro nombre , y la ex¿'


-:cra-
don de la posteridad.


P. de U. y P.




NOTAS.


) Anificsto de la junta central á la nacion española
publicado d impreso en Sevilla á 28 de octubre de 1809. •


) • Nadie ignora las desavenencias , ni los resultados de las
disensiones del general D. Gregorio de la Cuesta con el vocal
Puedes y la España llorará eternamente la infausta muerte del
desgr.zeiado 1-laturana inspector de artillería, causada por una
indiserecion lija de la ignorancia, que, en la carrera militar.,
tenia el arzobispo de Laodicea último presidente de la junta
central.


( 3 ) Por la representacion de V. S. de 4 de marzo del año
corriinte que-


con fecha de 3 de septiembre próximo aitterior se
sirvió S. pasar para la resolucion del supremo consejo de Re-
gencia de los reinos de España é indias se ha enterado S. A.
de la novedad ocurrida el y• de enero del mismo año en el ac-


• to de prestar el juramento á las cortes generales y extraordina-
rias de la nacion española cl Ayuntamiento de esa ciudad de
Maracaybo y autoridades de la misma, á cuya prestacion par.-
licipa V. S. haberse negado el Auditor de guerra de esa capi-
tania general D. fosé Vicente de Anca y el del apostadero de
marina de Puerto Cabello D. Remen. Hernandez de Armas que
accidentalmente se hallaban en esa capital á pretesto. de que no
se le señalaba el lugar que creiun corresponderles en el cuerpo
municipal.= S. A. ha desaprobado altamente la conducta irregu •


• lar de los referidos auditores , y extrañado el que con tan in,
oportuna etiqueta perturbasen un acto tan solemne, en cuya ce-
lebracion debieron prescindir de toda pretension á preetnznen-
ciar y distinciones, cue pudiera alterar en lo mes mínimo la
armonía y regocijo general reservando su derecho en el caso de
tenerlo para ocasion mas oportuna. Por lo que se ha servido man-
dar que haciendose comparecer á la presencia de P. S. t los ci-
tados auditores Anca y Armas , se les reprenda áspera y seve-
ramente por V. S. se les haga saber el desagrado 5. A. por
el modo con que se conduxeron en la citada ocurrencia y se les
amoneste para en lo succesivo con la circunstancia y precisa CO77.—
dicion de haber de prestar. el juramento á las cortes generales
y extraordinarias en el ayuntantiepto reunido de .esa ciudad, •a1




a8
que al efecto y para su inteligencia y cumplimiento en la parte
que le toca deberá V. S. trasladar esta providencia: manifesian-
dele al mismo tiempo para su satisfacion que S. A. no ha po-
dido menos de aplaudir su proceder generoso en tan aciaga ecur-
reneia, al que indudablemente se debe atribuir el que á pesar de
un incidente tan inesperado hubiera podido verificarse con la tran-
quilidad y júbilo que . se verificó el acto mas serio y mas solemne
que pudiera ocurrir para los verdaderos y leales españoles entre
los que con justicia deben tener un distinguido lugar los habi-
tantes de esa capital y provincia.= Lo que de orden de S. A.
comunico á V. S. para su inteligencia y puntual cumplimiento en
la parte que le cortesponde ; previniendole de la misma , que en
lo succesive deberá observar cuidadosamente la conducta de los
Lados auditores , avisando con pantaalidad lo que se observase en
ella y dando cuenta igualmente de haberse executado en todas sus
partes la anterior providencia..


Dios guarde á V. S, muchos, años. Cádiz 13 de Diciembre
de sú si.=josé Antonio Larrumbide.= Señor Capitan general
-de Venezuela en Maracaybo.


El Consejo de Regencia se ha enterado de lo expuesto por
•V. S. en su representacion de z5 de junio último y documentos
que acompaña en rasen del caracter petulante de su asesor D.fosé Vicente de: Anca y de no poseer los conocientos que se re-
-quieren para servir tal destino y, merecer la confianza de los ;e-
fes de esas provincias en los negocios arduos ; y en su vista seha servido S. A. resolver que se aproveche la primera ocasion
de trasladar ¿I .reparar á Anca de la asesoria aprobando al pro-
pio tiempo la conducta de V. S. en asesorarse con él en solo lo
indispensable. Lo que participo á V. S. de orden de S. A. pa-
-ra su inteligencia y gobierno. Dios 3c. 15 de Diciembre de
-18 s s.= _Ignacio de la Pezuela. = Señor Capitan general de Ve-
nezuela.


( 4 ) La junta revolucionaria de Caracas , en cuya formacion
no tuvo parte alguna el pueblo, comisionó para que fuesen á sem-
brar la sedicion por Coro, y Maracaybo á D. Andres Moreno ,
D. Vicente.Texera, y D. Diego jugo , y el comisionado regio
en Puerto Rico dió libertad á estos emisarios remitidos á las
prisiones del Morro por el gobernador de Maracaybo. Ignóranse
los resortes que produxeron esta providencia , pero son bien sa-
bidos los escandalosos resultados de ella. Embió asi mismo la ex-
presada junta á la [famayca á D. Mariano Nomina que en es-
ta comision gastó 15. 9 pesos fuertes del tesoro público : á Lon-


a y
da'es:


á D. Luis Mendei , á Filadelfia á D. Vicente Bolibar , y en
oficio de 20 de abril de 1310 encarga el brigadier Toro, que
coadyuve con las tropas de su mando al sustento de la idea
realizada. Tal era la libertad que desaban al pueblo, y tan gran..
de la desconfianza que de él tenían.


• ( 5 ) Nadie sin irritarse podrá leer las escandalosas proclamas
de Caracas del 4 y 25 de enero de este año, que ya debían es-
tar quemadas por mano del verdugo con sus mordaces y atrevi-
dos autores. La primera hablando de los españoles en general di-
ce: Subyugados, destruidos, miserable juguete de las cortes
,francesas los imbéciles españoles echan una ojeada moribunda
sobre la floreciente America, y aun en los últimos suspiros no
respiran sino dominio, muerte y usurpacion. Entrad en la na-
da miserable nacion, cuyos vicios é iniquidades Os han con-
ducido á este extremo, y ved con una rabia devoradora tomar
á la América el magestuosa vuelo que va á colocarla en el ran-
go político que merece &c. &c. y concluye llamando á los es-
pañoles, rebañó de esclavos despreciables.


La segunda empieza asi : ciudadanos : nuestros antiguos ti-
ranos tienden nuevos lazos para prendernos. Una mision ver-
gonzosa y despreciable ( habla de la Corveta Sebastiana , que
llegó á la Guaira con la comision de trasladar á España los di-
putados en cortes de Venezuela ) nos manda , que ratifiquemos
el nombramiento de los diputados suplentes, que ellos apli-
caron á Venezuela. Las cortes cómicas de España siguen los
mismos pasos, que su madre la regencia , ellas mas bien en
estado de solicitar nuestro penden por los innumerables ultra-
ges , y vilipendio con que nos han perseguido, y reducidas
á implorar nuestra proteccion generosa por la situacion impo-
tente y debil en que se encuentran, sostienen por el contra-
rio las hostilidades, y apuran impia y bárbaramente todos los
medios para esclavizarnos &c. &c. &c.


( 6 ) El autor del periódico titulado el español.
(7 ) Esta es la misma en que vivió últimamente el goberna-


dor Emparan. En la fachada principal se ven pintadas dos ser-
pientes con esta inscripcion: I ciase venenum ;. que hizo escribir
su dueño el difunto Arzediano D. Francisco Tobar. Emblema
notable!


( 3 ) El brigadier Salcedo , natura! de los reinos de España ,
inspector de artillería fué el primero que proclamó la muerte de
Fernando con grande escándalo del pueblo; y en recompensa de
esta ji:Ci911 exéerable , fue' nombrado socio benemérito del Club, y




nemine discrepante ; /e '. fueron dispensadas todas laSdes de votacion ec•, noticia que ha llegado al autor del anterior
.Manifiesto por boca del mismo Salcedo que se vanagloriaba de es-
ta


distinciones en la casa mas respetable de la ciudad , y ante


las
personas mas condecoradas que lo oyeron con admiracion.


>( 9 ) El congreso decretó la p: ision del Dr. Espej o , >
de los


Sallar y de otros individuos de la sociedad llamada patriótica por
los escándalos ocurridos el 1 9 de abril: estos se armaron contra


-la autoridad que llaman suprema , y con solo esto quedó ilusoria
c


providencia.
ro ) goleta española, el Narciso ,


procedente de--;eatiiz.":5


,apresada:y conducida á _la Guaira por un guarda costos de PuertO,
-Cabello. ..( t t Diae al marques del Toro la tentadora de ser coronel
de milicias , consiguióto por las hazañas que refiere el viagero Nnz
-en su tratado :de Venezuela , y . sin mas , ni mas saltó á pie Striz-


tinas á general del exército de occidente.


( ) Sin embargo de que el marques- general , solo tenia
quI


pelear contra . un corta .número • de • paisanos armados ele chuz'os
garrotes , perdió. en esta jornada todo su'exéreito , plana maycr::.',
tren, equipagé armas. ; veneras, y hubiera perdido


tambien SU:


buena opinion, si en algun :tiempo la hubiese tenido.( 13 ) D. Miguel ladeo Gomez, y denlas diputados dei la• pro:-
vincia del Socorro en el virreinato de Santa Fé , han do


2114


saltados groseramente por los llamados patriáttis á causa de ha,-ber. pedido al congreso de Venezuela por la libertad de los eu,‘.
ropeos , que se hallan presos-en las bóbedas de la Guaira, y Puer•-
•to Cabello..


( I 4) Proclamad os en los papeles públicos, y desconocidos
en


la práctica. Ellos pueden enrejarse con . el prospecto de la soci,?.:.
d-ad patriótica en que ofrecen los dignos socios Salias y


ll'It<hoz',
disipar la ignorancia de los pueblos,. elevar las ideas , los
(-iudaclano s á' la alta dignidad de un hombre libre; constituir
-el esiado., dese.mperl'an :-: .9 el encargo de redactores del peizlidicó-


titulado el patriota:7de Ve.nezuela.
Este prospecto que puede oca-


pa, un lugar nuei . distinguido entre los mayores absurdos que ha


,
dictado la. prestmcion, la ignorancia-y el fanatism o , descubre'
inmediatamente:codo


el carácter de sus autores y da una' idea exácta'
,de la e nergia del • gobie •ro. El. se titula


conservador de los de-


techos de Ferriandr, y el patriota ,
anuncia que en V enczue-'


la no debe- haber otro reí que el que ha criado al universo ,
ni otro -gobierno , que el que ella se constituya-, ofreciendo - de-


3
mostrar la frívola falsedad, de los derechos , que la • preew,
pacion puede atribuir aun á Fernando de Borbon.


(a 5 .) Una de las Letrillas de estas descocadas canciones em-
pieza., todos los reyes sun tiranos y esto se aplaudia por los
conservadores de los derechos de Fernando , y por lbs .


íntimos alia.
dos de Jorge.


( t6) Se trató en esta ciudad de implorar la proteccion de
la Francia, para sostener la independencia ., teniendo mucho cui-
dado de ocultar al pueblo estas maniobras.


( 17 ) El brigadie ,
D. Fernando Toro, hermano del marques,


ambos amilos inseparables del famoso Miranda , que vino de Lon-
dres al reclamo de la insurrcccion , y reside en esta ciudad con-
decorado con el titulo de presidente de la sociedad patriótica.


( t 8 ) Esta proposi•ion fué enérgicamente impugnada por el
erúdito Dr. Quintana miembro del congreso , y eclesiástico vir-
tuoso y despreocupado, quedando el estúpido brigadier Toro con-
fundido con los hechos históricos , que apenas entenderla aunque
se traduxeron al castellano, para demostracion de sus errores é
ignorancia. Seria de desear que en el congreso hubiera muchos
Quintanas y Mayas , cuya ilustracion y conducta darian el tono
á la causa pública.


( 1 9 ) Véase su manifiesto publicado á 1 3 de mayo de este año.( 20 ) Oficio de la junta de Caracas , de 20 de abril de 18 1 o
que corre impreso -al fin del citado manifiesto.


( a t ) público, y el gobierno sabe que en los llanos de
Apure se han levantado quadrillas de vandoleros , que abando-
nando el trabajo de les campos por huir de la .


milicia , -á que sc
des trata de obligar diciendoles que van á batir á los franceses ,
que suponen 'en coro, talan aquellos desgraciados paises satisfe-
chos de la impunidad, que es consiguiente á la anárquica reía.
xacion de la capital.


( 22 ) Gaceta de Caracas.
- -


( 23 ) El Dr. D. Antonio Gomez en su ensayo político contra
las reflexiones del Sr. Wiliarn Burke ,. sobre el tolerantirmo. Es.
te discurso fué dado á luz en las gacetas de Caracas, y recibi-
do del público con tantos y tan generales aplausos , que desear:-
d.) el congreso contemporizar con él, proveyó su reimpresion
1477 solo cuerpo. En él está pintada la opinion pública con las si-
guientes palabras: no somos colonias, ni colonos : somos par-
te integrante de la nacion española: quince millones de .habi-
tantes indianos sostendremos desde las Filipinas hasta la Ca-
lifornia en ambos endsferios este nombre inmortal, comunican-




, 2
do con todos los pueblos , con todos los hombres, nos cons'
tituiremos ciudadanos del globo, y unidos por una sola . creen-
cia, por un culto, por unas mismas cóstumbres, seremos gran-
des, libres y felices.


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