L/1. VICTIMA
}

7-12,3L-1


Tt


L/1. VICTIMA
DEL


D4,31uTIVRO%
O LA


ESPAÑA EN CADENAS
POD1111 AREITR&Riti


de ,(ié;.nand; (Ijorion,
Redactada de la carta que escribib


BENIGNO MORALES Á FELIX MEGÍA


por C.


Quita la mascarilla á los Infames
Para cinc tales como son parezcan
Cargan reputaciones usurpadas.


TOLOS A.
IMPRENTA D1 LA CIUDAD•


1 855.




1
BENIG11'O MORALES „uno de los


Editores del periódico que se publicó en
España con el título de Zurriago en el
tiempo de nuestra idolatrada Pepa, (*)
que tupo por objeto defender la Libertad
y hacer la guerra al tirano Fernando
7°, y á sus degradados prosélitos, es-
cribió la siguiente carta, á Felix Megía
su único compañero en la redaccion de
dicho papel, fecha en la ciudad de .4t_
merla á 23 de Agosto del año prójimo
pasado, en cuyo cha se hallaba en ca-
pilla, para ser liudado en el siguiente'
como lo fié en efecto en la plaza de la
misma Ciudad con otros 31 esclarecidos
Patriotas.


O sea durante la feliz ¿poca ele ¿a Constitucion.




Scc .contenido presenta el convenci-
miento mas exacto del acendrado patrio-
tismo que abrigó el corazon de aqiu?l
roe hasta que dejó de existir, como tanz-
bien el cuadro mas funesto de los izo,-
rOrCS y desgracias que en todas épocas
luz producido el despótico gobierno y ca-
prichoso procede'.


de Fernando, el Ti-
rano de España.


14% VICTIMA.
DEL


OZZ2OTIVIO


SOIVE la urna sagrada en que los restos
Del inmortal Padilla se conservan,
Posehidos de un temor respetuoso
Pusimos caro Amigo nuestras diestras ,
Y empeñando el honor, juramos juntos
Hacer al despotismo cruda guerra,
Y defender las Patrias libertades
Hasta morir, con todas nuestras fuerzas.


Jurar.... sentir en nuestros corazones
De santa Libertad la dulce hoguera ,
Y cual fuertes atletas presentarnos
A combatir en la menuda arena
Con las fuerzas terribles del Tirano,
Todo ocurrió en seguida: A lá pelea
Llevarnos el valor y la constancia,
Y una resoluCiou la mas completa
A despreciar la vida y los peligros
Porque la madre Patria libre fuera —
Lidiamos hasta el fin ; el universo





Pi]
Nos vid de sufrimiento y fortaleza
Corsa á Turno en Virgilio siempre armados
Subsistir de continuo en la palestra _
Con el cadalso en hombros caminamos
Mas de tres aros, y con faz serena
Resistiendo al Tirano ('`) y sus prosélitos
Sufrimos las calumnias mas groseras
Con que nos abrumaron diariamente :
Para que nuestra lengua enmudeciera...
Para que los Patriotas nuestros gritos
Y nuestras prevenciones desoyeran...
Los Periodistas al poder vendidos,
Que disparaban aceradas flechas
Al corazon de la infelice Patria ,
Cuando con imposturas deprimieran
Nuestros afanes y anhelar continuo
Para que vida y Libertad tuviera_ (1)
juntas sufrimos las persecuciones
Y juntos arrastramos la cadena:
Pero desde los hondos calabozos
Manifestar supimos la entereza
De nuestro corazon (a) ni los puíiales
Que brazos asesinos diriieran
Contra nosotros nos intimidaron : (3)
Del heroismo la escabrosa senda
Hollamos juntos con osada planta,
Y arrostrando suplicios por do quiera
Mil y mil veces 5 los hombres libres
La verdad les dijimos toda entera.
Mil y mil veces les manifestamos
Los ardides y tramas descubiertas....
Las tramas que el Tirano y sus sectarios


(". Criando hablamos del Tirano queremos decir
Ferríando de Borbon.


[51
De continuo forjaban, con la idea
De destruir el imperio de las leyes
Y que la Libertad desapareciera .
Mil y mil veces de al-arma el grito
Cuando los riesgos inminentes eran
Dimos brril,ien á los Patriotas puros
A fin de precaver una sorpresa (4)
El ídolo é idólatras temblaron
A nuestra voz terrible : sus promesas
De puestos elevados y honores,
De brillo palaciego y de riquezas
Supimos despreciarlas altamente,
Prefiriendo vivir en la pobreza
A la ignominia de besar la mano
Que á la Patria cadenas impusiera.


Vanos , han sido tantos sacrificios!
Nuestra Patria infeliz existe oprimida!


¡ Murió la Libertad! El despotismo
Su negro orgullo y su furor ostenta:
Fernando de Borbon va difundiendo
El luto , la afliccion , la muerte acerba :
Tú te hallas proscrito y miserable
Peregrinando por estrafiás tierras:


Y yo me encuentro preso y esperando
Separe de mis hombros la cabeza
La mano de un verdugo! !! á Es este el premio.,.
Es esta amiga la recompensa
De tanto af•n y de trabajos tantos ?


O todavía la esperanza queda
De otra mucho mejor ? Sí , caro amigo:
Los males que al presente nos rodean
Son transitorios : pronto como el humo


(3)




[6 j
Desaparecerán , y ni aun siquiera
Dejarán de sus huellas impresiones.
En seguida , grandiosas recompensas
Tendrán nuestros afanes por la Patria:
El justo premio á los que se interesan
En favor de los pueblos oprimidos
El Sér omnipotente lo dispensa
Mas allá de la tumba : nuestros nombres
En las generaciones venideras
Resonarán con gloria inmarcesible:
Y aplauso , lauro, bendicion eterna
De corazones del engallo exentos
Recibirémos, con que hoy emplean
Su talento y sus brazos defendiendo
Los derechos del hombre : y anatemas


indignacion caerán sobre el Tirano
Que con sangre Patriota el trono riega,
Y sobre los perversos que pudiendo
Ser Libres, á sus plantas se prosternan,
Y cubiertos de infamia y de ignominia
La mano patricida humildes besan.
Vivan envilecidos estos seres
Mientras nosotros la esperanza cierta
De un porvenir glorioso alimentamos.
¡O! sí; la fama con sus cien trompetas
Inmortales hará nuestros trabajos,
Si son caducas y perecederas -
La vanidad y pompas de la vida
Anhelamos las glorias verdaderas.


Yo quiero aprovechar, querido amigo,
Las pocas horas que á mi vida restan,
Ea coordinar apuntes que hace tiempo


[ 7]
Tenia preparados , porque puedas
Valerte de ellos para hacer notorio
Al universo entero la perversa
Conducta del Tirano abominable
Que á su cetro de hierro me sujeta ;
Vengando asi á la patria esclavizada ,
Pues á mi consuelo se me niega...
En ellos van las cansas principales
A cuyo horrible influjo perecieran
De nuestra Libertad las garantias...
Dichas con el valor y la franqueza
Que puede y debe hablar el que muy lejos
De temer á la muerte , la desea.
Aprovecha , Megía : estos apuntes
Para escribir la historia harto funesta
De la revolucion : tu pluma solo
De influencias pestíferas escena,
Es que le puede dar á los sucesos
El colorido que ellos merecieran.
Si tu no escribes esta historia , plumas
Mercenarias que al déspota aplaudieran
Escritores serviles y rastreros
Que del pan de ignominia se alimentan
Osarán presentar á Riego el Grande
Com o un facineroso , su ardua empresa
Qua hará inmortal su nombre , como un hecho
Que la justicia y el honor reprueban :
Y lograrán que Riego y los valientes
Que á lidiar por la Patria le siguieran ,
Parezcan cual traidores , cuando fueron
Dechado de virtud la mas perfecta.
¡ Desgraciados ¡ No sea I Ttí mi amigo ,
Delínea un cuadro fiel en que aparezcan
Riego y sus enemigos bajo el punto




[ 8
De vista que á cada uno le competa :
Quita la mascarilla á los infames
Para que tales como son parezcan :
Caigan reputaciones usurpadas :
La hipocresía , el fanatismo mueran ,
Y resplandezca la virtud sublime :
Al espirar... Ibrales te lo allega.




Con diversos aspectos en la historia
Nacion española se presenta


Desde el Patriarca Tubal hasta el dia:
Ora parece en la mayor grandeza
Y dictándola leyes á la Europa ,
(ara la vamos de miserias llena
Y en la degradacion y abatimiento.
á Cuál el origen... cual la causa será
De estas viscisitudes ?... con los hechos
Constantes en la historia se evidencia
Sin lugar á dudar : tanto en lo antiguo
Corno al presente, siempre consistiera
De bien y el mal de España en estas causas:
Si sus formas sociales fueron buenas
.Del poder tí la clíspide la alzaron;
Cuando las leyes su vigor perdieran.. ,
Cuando los reyes déspotas lograron
Que ú su arbitrio las leyes estuvieran...
En un cuos de horrores y de males


infelice Alacion se sumergiera.
lié aquí la cuesaion : ahora conviene
Para justificarla aducir pruebas.


[91
Todo el poder de la soberbia Roma
Encontró por tres siglos resistencia,
Y sepulcró sus bravos combatientes
En los fértiles campos de la Hesperia
Solo este hecho presenta á nuestra Patria,
Fuerte , osada , magnánima y guerrera.
Marchemos por la historia y hallarémos
Bienes sin fin que entónces poseyera
Treinta millones de almas la poblaban...
Gozaba de las sólidas riquezas...
Comercio , agricultura , artes, oficios,
Literatura... todo floreciera
En paz y bendicion : era envidiada
De las demas naciones europeas


Y cuál era la fuente sacrosanta
Que estos bienes á España produgera ?
Del poder que el orbe respetaba ?
Del terrible ascendiente que ejerciera
Su opínion en los altos Gabinetes
De las demas naciones estranjeras ?
Su forma de gobierno. El pueblo usaba
De la soberanía : la diadema
Él la daba á los reyes: él hacia
Por sus representantes que eligiera
Reunidos en Córtes... justas leyes :
Los reyes les juraban obediencia....
Carecian de poder para alterarlas ,
Y eran sus vigilantes centinelas
Para hacerlas cumplir exactamente.
La fórmula que entónces se tuviera
Para estos juramentos , por desgracia
Ha desaparecido : pero aun queda
La que los reyes de Aragon usaban
En tiempos mas cercanos : hl una muestra




'i ()]El pueblo de Aragon L
así le hablaba


Al poner la corona en la cabeza
Del que elegia por rey : Nos que apartados
Falenzos tanto como vos cualquiera ,
2' que reunidos mas que vos valemos
Os elevamos hoy á la suprema
Dignidad del Estado: os constituimos
Rey de Aragon porque sus leyes tengan
Un brazo poderoso que las guarde,


Jurad
de sus infractores las defienda:


que asi lo liareis y hacedlo siempre:
Si non , non sois el rey de nuestra tierra. (6)
Juraba el Rey que así lo cumplirla.
De buena voluntad, puesta su diestra
Sobre el Santo evangelio y responsableQuedaba al cumplimiento de esta oferta.
No se duda que en mismo pensamiento
(5 mas obligatorio se pusiera
A los primeros reyes de España.
Nuestros antepasados conociera!)
Que cuando el rey se aparta de las leyes
O llega á verse sobrepuesto sí ellas ,
Todo es desalacion... todo ruina...
Los males y desdichas se agiameran.
Los buenos reyes, padres de los pueblos
Felices hacen á los que gobiernan
Cuando observando las leyes; corno un rio
Cuyas aguas en sauces stnasnietas
Para regar las fertíles campiñas ,


hacerlas fecundar , y que florezcan ;
Pero si de la ley el Rey prescinde....
Si el rio rompe sus sauces.... ya se allegan
Las tierras productoras y los pueblos
Horrendos espectáculos pfesentar.


[1 41


Baso esta bella forma de gobierno
Que felice la España pareciera!
Vedla perder su brillo en el momento
Que sus Reyes las leyes infrigieran.Witiza y Rodrigo despreciando
Las santas leyes que acatar debieran...
De su poder los límites pasando
Y á la afeminacion y á la torpeza
Entregados.. del todo descuidaron
Que era el deber paterno su primera
Obligacion propágase el disgusto
En el pueblo Español , que se contenta
Con detestar al opresor gobierno
Y murmurar del Rey , cuando debiera
Destruir su poder porque del pacto
Con voces de lealtad , paz, sosiego,
Tranquilidad y union ; en donde encuentran
El medio de inspirar el sufrimiento
Y la resignacion y la paciencia
Los fanáticos viles.... los indignos
Egoistas que los tronos siempre cercan:
Por la discordia y las enemistades
Que el mal gobierno entónces produjera
Cundió la division y el descontento....
Con esta division pierde su fuerza
Nuestra Patria infeliz—. El Sarraceno
Pretende á su dominio someterla....
Halla en el conde don Julian apoyo....
Descuida todo medio de defensa
El rey Rodrigo.... cunden los traidores....
La detestable intriga abre las puertas....
Las huestes Agarenas francamente




E4Y 2]
2


sin contradiceion por ellas entranY en un piélago inmenso de infortuniosY de d
esdichas la nacion se anega :Siete siglos estuvo bajo el yugoI nsufrible que el Moro le i mpusieraPué Rodrigo la causa ?


z Sus escesosY abusos de poder en que incurrieraLlevaron á esta Patria desgraciadaA arder en los horrores de una guerraDesastrosa y cruel? ¡ Ah! no por ciertoLa sangre fria y criminal paciencia
Que
Con que vieron al Rey los Españolesde las santas leyes prescindiera
Fué sin duda la causa de los males....De las calamidades que sintiera
Esta infeliz Nacion. ¡ Es indudable!


Busquemos pues demostraciones nuevasEn la historia
tambien al fin propuesto <Destruidas las falanges Agarenas,


Los diversos caudillos que á la lucha
A los pueblos de España condujeranFormaron diferentes monnrquías:Pero aun e ntónces y despues que fueronEstos varios estados reunidos,Y llegando hasta el tiempo en que ya eraLa coroua de Espaíia hereditaria,


Advertimos tambien que se conserva
En el pueblo el poder : que hacer las leyes
Que
A las Córtes tan solo compitiera :


ellas velaban sobre su obs ervancia,Y que el Rey pot
sí solo no pudieraAlterarlas j amás, echar tributos ,


pi 3]
Ni hacer la paz, ni declarar la guerra...
Pudo con esta forma de gobierno
La España retornar á su primera
Grandeza y esplendor : nuevos recursos
A perpetuar sus glorias se presentan (7)
Pero hubo un Cárlos quinto pretendiendo
Las Córtes destruir, y que con ellas
Las leyes y derechos que escudaban
Bajo su cetro férreo subsistieran...
Hubo Españoles viles y obsecados
Que al Tirano sus fuerzas reunieran ,
Y el dolo, el fraude, la traicion, la intriga ,
Y á su impulso cayó la mole inmensa
De Comuneros en que se apoyaba
De nuestras libertades la defensa
El Gran Padilla, Bravo y Maldonado
En Villalar rindieron su existencia
A la infame segur del despotismo :
Las Córtes nunca mas se reunieran
A hacer las leyes: se abrogó el Tirano
El poder de destruir las que creyera
Que á su imperio absoluto se opanian ;
Y á su arbitrio qeedaron las haciendas
Las vidas y las honras de los hombres
Españoles , que humildes sucumbieran
Al capricho del déspota inhumano
Y á que la Patria su esplendor perdiera


Enumerar los males y desgracias
Que desde entónces la nacion sintiera
Con la dcminacion de Carlos quinto
Y los inicuos que le sucedieran
In su trono manchado con la sangre




14 4]
Que por la Patria con valor vertieran
Sus hijos predilectos... hasta el caso
De Que á ceñir !legase la diadema
Fernando de Borbon, fuera una obra
Que en el tiempo de vida que me resta
No lograrla concluir : los Españoles
Conocerán la situacion acerba
De la desventurada Madre Patria,


Q
Si por un solo instante consideran


ue desde Cárlos quinto hasta este dia
La poblacion al menos decayera
En dos terceras partes. ¡Cubran un velo
El cuadro de los males que afligieran
A la infeliz Hesperia por tres siglos
Que en servidumbre vil estuvo abyecta !


• .


Con lo espuesto hasta aquí , sobradamente
Se justifica la cuestion propuesta ;
Pero hay, por desgracia , hechos recientes
Couvincentes y claros que la ele van
A un grado de evidencia muy palpable.Al presentarlos




¡ de amargura y pena
Mi corazon se inunda! No hay remedio :
Hagamos un esfuerzo , y que se vean


QueLos males de la Patria , y los perversosal despótico imperio la sujetan.


Llegamos al reynado de Fernando
Sép:imo ole Barban , el que hace buena


Q
La memoria de todos los tíranos


ue la historia del mundo nos presenta:
Contemplad , hombres libres á este monstruo


[ 51
Atentando inhumano y


1


con flerera
Contra la vida de su anciano Padre
Por ascender al sólio : El Rey debiera
Olvidar que era padre de este inicuo
Para hacer que las leyes se cumplieran
Castigando severo á un asesino,
Cuando en el Escorial le sorprendiera
Y encontró en su poder los documentos
Que muy patente la traicion pusieran. (8)
Primer paso ostensible de Fernando
Y primera maldad que acometiera ,
Que apareció palpable , y sin castigo.
Y como los errores se encadenan
En la vida del hombre , asi este monstruo
En el crímen constante, persevera ,
Sin que en su corazon jamás penetren
De la santa virtud las influencias.


9


La impunidad sin duda fué la causa
De que despues osado promoviera
La rebelion tambien contra su Padre;
Para que la corona le cediera
En Aranjuez , y sin consentimiento
Del pueblo en su cabeza reluciera. (o)


Era el pueblo Español en aquel tiempo
Tranquilo espectador de estas escenas
Y nada le importaba que el palacio
En fuego abrasador se convirtiera .


que entre hijo y padre se encendiese
De la discordia la horrorosa tea,
Porque estaba sujeto Carlos cuarto




[1
Á seguir los consejos q


6
ue ] le diera


Un desmoralizado favorito,
Y creia la Nacion que aunque viniera
A reinar Lucifer era imposible
Que sus males y angustias acrescieran.
De aquí el silencio de los Españoles
Y el esperar alivio en sus dolencias
En Fernando. ; Que error ! El delincuente
Jamás está tranquilo, siempre tiembla
Porqué del crimen los remordimientos
Tienen á toda hora su alma inquieta ,
Y un porvenir fuesto y horroroso
Su loca fantasía le presenta:
Y así á Fernando en pos del fatal paso
De arrancar la corona con violencia
De la cabeza de su augusto Padre,
El negro genio del error le ciega,
Y no vi6 su deber que era muy claro :




Salvar la Patria ó perecer coa ella


Salvadla, si, oponerse á los designios
De Napoleon , que insano pretendiera
Subyugarla: ¿ Fernando que hizo entónces
De su alma el espanto se apodera




Corre despavorido hasta Bayona ( , o)
Y allí se postra con bajeza y mengua.....
Llora


besa los pies de Bonaparte


Y vende á la nacion que ingrato deja
En orfandad..... en anarquía horrorosa.....
Sin gobierno, y sin medios de defensa- ...
Por una vil pension , que renunciára
Cualquiera, otro que Borbon no fuera : (1 r),
A la nacion que en su favor clamaba
Porque de buena fé se persuadiera
Que Fernando baria el bien, y que las cosas


[1 7]
Que se contaban de él eran supuestas.
¡ Cuan obcecado estuvo el pueblo Ibero
¿Y disipó su error? oh, no! la venda
Que los ojos cubria de los incautos
Todavia los serviles la sujetan
Todavia los sencillos españoles
Tienen ante sus ojos manifiestas
Las imposturas, y á los impostores,
Y dudan retroceden por no verlas.
De la suporsticion y el fanatismo
¡ Esta es la obra ! ; si ! dejar sujeta
Una nacion entera á los caprichos
De Fernando Borbon que se deleita
En oprimirla! Amados compatriotas,
Del caos de confusion y de tinieblas
En que os han sumergido los perversos
Salid.... salid á ver la verdadera
Luz , y con ella examinad los hechos
Para sacar exactas consecuencias.


Ved al monstruo implorando de sus padres
El pardon , y abdicando la corona
En José Bonaparte á quien de muerte ,
Entonces la Nacion aborreciera ,
Por la sola razon de que intentaba
Dominar en la España por la fuerza : (ta)
Y ved á la Nacion alzada en masa
Y en su estado infeliz hacer la guerra
Al poder colosal de Bonaparte
Porque á Ferrando le restituyera
La corona abdicada , y arrostrando
La muerte y las desgracias con firmeza
Al mismo tiempo qua el Borbon ingrata


2




1


[1 8]
Ve estas desdichas que á la España aquejan,
Y lejos de causarle sentimiento
Su eorazon infame las aprueba. (13)


Considerad al monstruo prodigando
A Bonaparte mil en norabuenas,
Siempre que sus ejércitos lograban
Ventajas en España ¡ que vileza ! (14)


Vedlo escribiendo cual humilde siervo...
Dirigiendo sus súplicas atentas
A Napoleon para que destinase
Al infante D. Cárlos do pudiera
Castigar por su mano á los incautos...
Sencillos españoles que vertieran
En su obsequio la sangre, y que insurgentes
Osó llamar su viperina lengua.
Con este vil y desgradante paso
Vió el universo entero su alma negra,
Su corazon infame á todas luces,
Y que de ingratitud su tipo era. —




Vedlo cuando debia vestir luto
En Valancev rodeado de mozuelas...
Viviendo en el harem de los placeres,
En la molicie, el vicio y la torpeza...
Ved cuan humilde pide á Bonaparte
Una consorte de su parentela. (r5)




Vedlo allí ejercitando hasta el oficio


[19] -
De infame delator, y dando cuenta
De los planes que habla para salvarlo
A Bonaparte, porque prendiera
A un Coronel Inglés que disfrazado
Fue á Valencey tan solo con la idea
De darle libertad. (t6); Solo este paso
Tan vil é infame, su memoria llena
De horror Al que pretende restituirle
La libertad y una corona... entrega
El pérfido Fernando á los rigores
De mayor enemigo que tuviera
¡ Iniquidad monstruosa! ¡ A mas infamia
Puede el hombre abanzar 1... ¡ á mas vileza!


Todos estos son hechos indudables:
Los documentos con que se comprueban
Escritos por la mano de Fernando
Por repetidas veces en la prensa
Los hemos visto ya : se publicaron
En Londres todos ellos y á presencia
Del mismo Rey Fernando se copiaron,
Sin que él á desmentirlo se atreviera
En la Corte de España , cuando nadie
Podia ya esperar se corrigiera
O que abjurase sus perversas mafias,
Caminando derecho por la senda
Que el honor y el deber la señalaban,
Y su utilidad propia. (i7) Pero fuera
Posible que su bien y el bien del Pueblo
Que le cedió la dignidad suprema,
Pudiese hacer el hombre que ha sufrida,
Y con razon , la maldicion paterna ? (18)
No : que á !os virtuosos solamente




[21]
De Temis tan iguales parecieran
Los infelices , como los magnates
Que ántes los subyugaban sin clemencia :
Seguridad tenian en sus personas




Tranquilos sin zozobras ni cautelas
Descansaban , seguros de que nadie
Su quietud y reposo interrumpiera,
Los que no cometian un delito,
Tenia el rey la autoridad suprema ;
Su persona sagrada é inviolable
Gozaba de la honrosa preherninencia
De poder hacer bien y nunca el daño
Acatando la ley : De esta manera
El pueblo y el monarca eran felices.


Magnánima otra vez apareciera
La española naciun bajo estas leyes!
Y ,abatió las falanges altaneras
Que en Austerliz , en Jena y en Marengo
Invencibles al orbe parecieran :


Pero ah dolor ! Que importa que estas leyes.
Bajo todos conceptos fuesen buenas 2


Que importa que los hombres ilustrados
Con el mayor placer las recibieran 2
á Si la supersticion y el fanatismo
Les declararon al momento guerra ,
Y el gobierno miró á infractores
Con la mas criminal indiferencia ?.....


Si de hecho propendió con su apatía
A que los pueblos no se convencieran
De los incalculables beneficios
Que el buen órden de las cosas produgera ?
Faltó en España un genio que cual Junio
Bruto , diese á las leyes consistencia,
Sacrificando en aras de la patria


[201
Es dado practicar las obras buenas ;
Y los malditos con la infamia solo
Y con el negro crimen se deleitan.


; He aquí á Fernando ! ¡ aborto del infierno
Para oprimir y desolar la tierra!
Continuemos su historia y hallarémos
Hechos que todavía le presentan
Mas fiero y execrable : Entusiasmados,
El fuego del cañon las bayonetas
Sabian despreciar los españoles
Por Fernando el amado : perecieran
Prodigandole vivas afectuosos
Fn el mas fuerte ardor de la pelea
Hasta espirar en fin: En sangre ilustre
La España se inundó : la parca fiera
Corrió de fila en fila en los seis años
En que los brazos fuertes sostuvieran
Tan espantosa lucha : Al mismo tiempo,
En Cádiz , diputados que eligieran
Los pueblos tibies dieron á- las leyes
La fuerza y poderío que tuvieran
En los tiempos felices en que á España
La respetaban las demas potencias.
Los hombres recobraron los derechos
Que el supremo hacedor les concediera
Al nacer los derechos sacrosantos
Augustos é indélebles que imprimiera
En todo racional desde su origen
Con mano fuerte la naturaleza :
La libertad civil quedó escudada
Para que no pudiesen ofenderla
Les jueces arbitrarios: En el templo




[22]
Á todos los que osados se atrevieran
Á infringirlas: entónces si : marchára
Hasta consolidarse el gran sistema
De libertad , y hubieran redimido
Muy pocos sacrificios la existencia ,
De millares de víctimas ilustres :
Si el gobierno en la Isla ahorcar hiciera
Al obispo fanático de Orense
Y al marques del Palacio, que opusieran
Resistencia á jurar las santas leyes....
Si al general Elio le impusiera
El condigno castigo caando osado
Allanar supo con las bayonetas
La casa de un tranquilo ciudadano...
El sistema tal vez no decayera.
El hacer ejemplares á las veces
F.s mejor que el usar de la clemencia,
Para que el crímen en su curso inf,ime
Obstáculos encuentre y se detenga.
El gobierno, hasta entónces abezado
A usar de apaños y condescendencias
Con los magnates, supo perdonarlos :
Y en seguida se vid la resistencia
Del cabildo de Cádiz, que altanero
Rehusó publicar en las Iglesias
El famoso decreto de las Cdrtes
Que proscribió la Inquisicion horrenda.
Tambien la impunidad prestó osadía
Al Marques de Plantes para que hiciera
En un papel que redactaba en bruto
Del sistema la burla mas completa-,
Acto continuo empiezan orgullosos
Á denigrar la obra mas perfeta
En sus bases , los mas de los magnates


[23]
Que vivian con lujo y con riquezas
A costa de lb, pebres que oprimian




Los que sus privilegios de nobleza
Y sus ya carcomidos pergaminos
Velan desaparecer , y que era fuerza
Trabajar ó ayunar pues acababan
Señoríos y con ellos las gabelas




Los canónigos que ántes disfrutaban
En el descanso sus cuantiosas rentas.....
Mas de ochenta mil frailes que en la olganza
Y en placeres vivian á costa agena.....
Todos en fin los que de los abusos
Subsistian en vida placentera




Contra el código santo se pronuncian :
Y ora avasallando las conciencias




Ora gritando que se destruia
La santa religion con las quimeras
De que en breve de I3eréjes y judíos
Se inundarla la española tierra




Y ora calumniando á los patriotas
Con locas imposturas que creyera
El populacho imbecíl , consiguieron
Al fin que la opinion se corrompiera,
Y que la multitud, alucinada
No mirase que estaba la defensa
De sus derechos en las santas leyes,
Y por ellas mostrase indiferencia. ([9)


Vuelve Fernando en este estado á España
Libre de las prisiones que sufriera
En Valencey, y en pago á los enormes
Sacrificios que España le ofreciera




En pago á los servicios importantes




(241
Que tala:bien le prestó la Inglatera.....
Obró como un Borbon: como un malvado
Monstruo de ingratitud. ¡ Quien lo creyera ! (ao)
Observad españoles que de nuevo
Á perder su esplendor la Patria empieza.


Derrocar el imperio de las leyes
Y hacer que á su capricho sucumbieran : (21)
Abrir los espantosos calabozos




Aherrojar los patriotas que vertieran
La sangre por salvarlo


dar decretos
De proscripcion, de muerte, y de cadenas... (2%)
Restablecer la Inquisicion inicua


(23)
Formar la policía mas tremenda,
Espantosa y cruel grabar los pueblos,
Sin consideracion á la miseria
Á que hablan quedado reducidos,
Con tributos enormes , que pudierais
Llamarse propiamente usurpaciones
Del resto de la sangre que en sus venas
Á los hijos de la Hiberia le quedaba,
Y concluir con su mísera ecsistencia,
Para atinar tesoros é imponerlos
En el banco de Lóndres (24) cuando apenas
En los pueblos pequeños se encontraba
Un hombre á quien sobrase una peseta




Vender parte de España á los Estados
Del norte americano, sin que diera
Siquiera una noticia de este hecho
Al pueblo hispano, ni exigir su anuencia. (25)
Gastar en coches, trehenes , y caballos
En criados superfluos y libreas.
El pan que arrebataba de las manos


125]
Al pobre labrador , que se desvela
En buscar el sustento á su familia
Abriendo las entrañas de la tierra
Usar de hipocresía abominable
Visitando de dia las iglesias
Y conventos de frailes y de monjas :
Y consumir despues la noche entera
De burdel en burdel, acompañado
Del duque de Alagon y en francachelas




Ajar sin honra y en el abandono
Mas terrible y fatal á mil doncellas,
En cuyos castos pechos nunca el crímen
Penetrara si el Rey no conocieran
Perseguir, desterrar, cubrir de oprobio
Á los mismos que fieles le siguieran
A Valencey y allí le acompañaron ,
Escoiquiz, Macanaz, el buen Arriaga,
Amezaga, Ostolaza, y otros varios
Que en destierros y cárceles gimieran
Ensalzar á un Chamorro.... (a6) á los protervos
Que mas se distinguian en la carrera
De la vil delacion y el espionage,
Llenandonos de honores y de rentas
Cual sucedió con Baso (27) con Garcia
Salomé, con Argona y la caterva
Que Lozano de Torres protegia
Y Galindosa. (28) Promover la gnerra
Para que el continente Americano
En males infinitos incidiera.....
Diseminar en veinte mil familias
El desconsuelo, la amargura y pena,
Sin querer conceder una amnistía,
Para que á España regresar pudieran
Los que reconocieron y sirvieron




[]Á José Bonaparte , ¡ Tal
2 6


vez eran
Delincuentes! Fernando sin embargo
Debió reflecsionar en qne él la senda
Del error 6 del crimen, les trazára,
Y él primero sus plantas puso en ella :
Y sobre todo que eran españoles,
Y llevaban seis años de miserias
Y ausentes de su patria, cuando él mismo
Si procedieron mal la causa era,


Tal fué del Rey Fernando la conducta,
Y tales sus hazañas y prohezas
Que millares de víctimas hicieron,
Sin qua se necesitase adJcir pruebas
Para justificarlas : Sun tan claras
Públicas y notorias que apenas
Se encontrará en España una persona
A quien dejen de serle manifiestas.
4 Decidme ahora españoles, son bastante
Para que el universo le aborrezca ?
Esperad


esperad ; aun quedan otras
Mas feas todavia..... mas horrendas.


bid oid á su segunda esposa
Doñt Maria Isabel, aborreciera
El rey Fernando : ella era virtuosa,
¡ Como pues entre el lobo y las ovejas
Podia haber paz estable ! Al fin el laz o
Conyugal se rompió de una manera


i e n fatal y ruidosa : cuando estaba
D.1


parto decretó que se la abriera
Fara estraerle el feto : ; q


inhununo !


[27]
La reyna en aquel instante pereciera
Y el rey quedó de hazaña tan gloriosa
Alegre y complacido, Mengua eterna
Afrenta, deshonor y vilipendio
Oprima á los cobardes que toleran
Al déspota inhumano ! Ese Dios vivo.....
Ese Dios justiciero que presencia,
Y permite que triunfen los malvados
Que tan horrendos crímenes perpetran
Que ve la iniquidad entronizada
Y que en el sólio la maldad se alberga
Lance los rayos de la atroz venganza
Y convierta en cenizas en pabesas
Al pérfido Fernando, al detestable
Fiero opresor de la infeliz Hesperia.


Hé aquí en compendio la exicial conducta
Que Fernando observó desde su vuelta
Del cautiverio en Valencey al trono
Que los valientes hijos de la Hiberia
Con mil penalidades le guardaron ,
Hasta que lanzó Riego en las cabezas
De libertad el sacrosanto grito :
No me es posible hacer la referencia
En detall de los males y quebrantos
Que en este tiempo la nacion sintiera,
Pero tampoco puedo en el silencie
Sepultadas dejar las ocurrencias
De Madrid , Barcelona y la Coruña,
Ni el esfuerzo que hicieron en Valencia
En ese mismo tiempo los patriotas,
Por que el rey á la ley reconociera.
Corra mi pluma muy ligeramente




[2 8]
Por el inmenso campo presentan
Estos sucesos harto desgraciados,
Y nota la piedad y la indulgencia
Con que fueron tratados las valientes,
Que vertieron su saagre en la contienda
Coa Banaparte por el rey Fernando.


El Brig


adier Parlier


el grito diera
De la santa libertad en la Coruña ;
Y mil bravos al punto lo siguieran
Ley y Coastituaion gritando todos;
Pero las oidores de la Audiencia ;
El clero de la iglesia da Santiago,
El general Sain Marc, los que tuvieran
Eu fin cifrado su existir infame
Ea que el despótica poder rigiera ,
Seducir á la tropa consiguieron ,
Derramando su oro á manos llenas :
Y fué preso PJrlier : y en un suplicio
Encontró á sus servicios recompensa.
Los que en su heróica empresa le ausilieron
Ea castillos y cárceles sufrieran
Crueles é inhumanos tratamientos,
Vejaciones, tormentos y miserias. (29)


En Madrid, el tirano y sus sectarios
Con la supercheria mas completa
Tendieran lazas á los liberales
Coa el fin de que en ellos perecieran.
Sabian que infinitos anhelaban
El restablecimiento del sistema
De g kierrto destruido par Feriaand o,


[29]
Y ternian se apurase su paciencia :
De otra parte, deseos de venganza...
De que la sangre sin piedad corriera
Abrigaban Fernando y sus prosélitos:
¿ Como pues conseguir que se extinguiera
El justo anhelo de los liberales
á Como aplicar antidotos pudieran
A tulles que creian inminentes
Aunque solo en deseos consistieran ?
¿Y auno en fin patíbulos se alzaran
Do víctimas ilustres se ofrecieran
En obsequio al Tirano ? Egercitando
Medios inicuos, la maldad mas negra
Que abrigar puede el corazon humano.
Los emisarios pérfidos se aprestan
A seducir á los patriotas puros...
Propagan entre estos las ideas
De planes bien fundados de alzamientos :
Consiguen persuadirlos con cautela
De que tenian armas y dinero ,
Y cuantos medios necesarios fueran
Para lanzar de libertad el grito:
Que habia personages de alta esfera
En este piola... que al Rey no se tocaba,
Pues el objeto reducido era
A que las leyes su vigor cobrasen:
Y alucinados con la dulce idea
De libertad , de buena fe creyeron
A los que estas patrañas propusieran.
}Tubo tambien que en muy pequeñas sumas,
Algun dinero se distribuyera
A los menesterosos : de este modo,
Incurriendo asimismo en la vileza
De incluir en las listas á personas




[30]
A quien no mencionarán tal empresa.
Tendieron una red en que cayeron
Los patriotas que mas se distinguieron
Por haber dado en los pasados tiempos
De su adhesion al Código mil pruebas,
Como Richars , O Donojtí, Yandiola,
General Renobales y una inmensa
Muchedumbre de fuertes Oficiales
Que hicieron la guerra al déspota del Sena
La red se recogió muy al principio
Por que habia temor de que cundieran
Las ideas liberales : las prisiones
Y causas en seguida se comienzan:
Corre la voz infame de un proyecto
Que atentaba del Rey á la existencia
A fin de alucinar al vulgo incauto:
Arjona y otros jueces que entendieron
En las actuaciones, se afanaron
Inutilmente porque apareciera
Justificado este hecho : Ios espias...
Los iastrumentos viles que eligiera
El tirano y no mas , lo contestaron
Y por ello obtuvieron recompensa. (30)
Los acusados, aun que en lms prisiones
Y en el tormento algunos ( 3 t) padecieron
Penas mas duras que la misma muerte,
Dijeron solo , se les propusiera
Que el proyecto tenia por obgeto
Que el Monarca á la ley se sometiera
Y todos afirmaron que ignoraban
La persona que estaba á la cabeza
De este proyecto , y que facilitaba
Los ausilios que algunos recibieran.
Por esta intriga en un suplicio horrendo


[311]
Reichars con otros cinco perecieron,
Y fueron diferentes condenados
A presidios, destierros , y otras penas:
Y por ella tambien muchas familias
A una desolacion la mas completa
Quedaron reducidas , é infamadas.
Si hay algun español que no me crea,
O que para formar exacto juicio
Otros convencimientos apetezca ,
Ved la causa formada por Arjona
Cuyo extracto está inserto en la Colmena
Periódico español : los reflexivos
Verán alli la infamia descubierta,
Aun que manos serviles la formaron
Y que de apaños muy claros está llena ;
Alli verán á espias indecentes
Que al Rey le daban diariamente cuenta
De sus operaciones que el Rey mismo
Los inducia y mandaba que siguieran
En el papel de Judas. Observemos :
¿Si el Rey en esta trama no estuviera




Si el Rey no fuese quien la dirigia
Y daba impulso


es facil subsistiera
Desde el primer aviso en apatía
Y que mirase con indiferencia
Que contra su persona se atentaba
Cuando es notorio que á su sombra tiemblan
Ah 1 No: la intriga se descubre clara :


Y mas clara despues se manifiesta
Cuando se ve premiar á los malvados
Que al patriotismo puro sedujeron
Desde un principio , con empleos lucrosos
Rn la que se titula real Hacienda :
Y al observar que entre infinitos presos




L .)?]
No hubo siquiera uno que dijera,
A pesar del tormento, que habla planes
Ordenados , ni quien los dirigiera ,
Ni que se celebró ninguna junta
De liberales pública ó secreta :
Probado es pues que todo fué tramoya
Y la trama mas vil y mas perversa.


En Barcelona si ecsiltieron planes
Para que á su vigor la ley volviera.
Pudo el general Lacy, cuya espada
Llenó de gloria á la española tierra
Unido á Diaz Morales y á otros bravos,
Que en las falanges de la independencia
Prodigios miles de valor hicieron,
Pretender que á ley fuese sujeta
La autoridad del Rey, mas por desgracia
Castaños estos planes comprendiera :
Fué preso Lacy y los damas caudillos,
Y al fin Lacy murí6. ¡Fortuna adversa!
Registra tú mi amigo con cuydado
Toda esta causa, pues que se halla impresa
Para dar estencion á estos apuntes,
Y allí verás traidores á docenas. (3a)


En tumulto á oprimir á los patriotas
Vinieron las desgracias, rotos eran
Los diques de la fuerza productora
Del cruel despotismo : en consecuencia,
En mil calamidades y quebrantos`
Harto insufribles se inundó la tierra :
Se apuró el atfrimiento de los libres ,


[33]
Pero en su situacion ya no pudieron
Antídoto aplicar á tantos males.
Proyectos de alzamiento concibieran
En Valencia y al punto sofocadas
Por el perfila Eli o aparecieron:
Vida!, Bertran de Lis con otros varios
Sufrieron en cadalsos muerte acerva ;
¡ Oh Dios ! ¡Ya no hay remedio: nuestra patria
Llevará para siempre las cadenas
¡ Ya no hay qpien puede sujetar al menstruo
Ni reducirlo á su debar ! i ni queda
La menor esperanza ! ¡ el sello horrible
De esclavitud llevamos por do quiera !
¡ Vasallos ! ¡Este nombre de ignominia
Transmitido será hasta la postrera
Generacion ! ¡ Al universo entero
En ruinas la España se presenta !
¡Todos la compadecen , pero nadie
Una mano benéfica le presta!


Hé aqui el lamentar de los Patriotas
De continuo agitados , cual si fueran
Sufriendo una borrasca impetuosa
Sin piloto que el barco dirigiera :
Por seguro tenian el naufragio :
Cada uno la muerte á su presencia
Miraba sin cesar, y mil abismos
Para tragarlos que á sus pies se abrieron.
El Tirano entretanto preparaba
Una fatal y bien terrible fuerza
Para llevar al suelo Americano


(9 Así llama el gobierno obsolnto á los cincladan.s•
5




[55]
Y noble acero en su animosa diestra...
Del Batallon de Asturias a la frente
En primero de enero en las cabezas
Ufano comparece : en fuego sacro
De libertad sus ojos centellean




Su rostro está inflamado.., sus cabellos
Erizados... la boca le espumea




Y con voz altanera y mas que humane
El Héroe prorrumpió de esta manero:
Compatriotas , amigos, compañeros....
¿ Hasta cuando á la patria en las cadenas
Padeciendo veremos? ¿ Quien soporta
De hoy mas, el deshonor y la vergüenza
Eu que. existe sumida ? ¿ Á diez millones
De hombres bravos acaso se le niegan
Los medios de ser libres ? ¿y á estos bravos
Cual es la mano infame que los lleva
Mas allá de los mares , tremolando
Del cruel despotismo las banderas
Contra su voluntad ? ¿ Cual es el crimen?...
¿ Cuales son compañeros las ofensas
Que los hermanos de ultramar nos hacen ?
¿ Es acaso delito que pretendan
El yugo sacudir que por tres siglos
Los hace que respiren con afrenta?
No por cierto : los que aman á los hcmbres....
Los que su justa libertad desean




Los qee conocen que el linage humano
Es sola una familia que en la tierra
Está diseminada , y que los pueblos




Deben tratarse cual hermanos.. befan
Á los impios que su gloria buscan
En la sangre del hombre y los detestan.
No compatriotas , no : vivan f4lices....


[341
El tumulto , el horror y la tristeza ,
La desesperacion , el luto y llanto :
En las columnas de Hercules se aprestan
Treinta mil aguerridos combatientes
Con este fin : el déspota los lleva
A hacer la guerra á muerte á sus hermanos
De ultramar, cuyo crimen consistiera
En pretende: . r libres solamente
En querer ,e . ,ir la dependencia
Servil y degradante en que existian
Estan ya prontos para dar la vela
Los vajeles que deben trasportarlos
Para satisfacer á la soberbia,
A la ambicion , á la avaricia y fausto
Que nunca de sus goces se contenta:
Y en este estado , el ser Omnipotente
A cuyos pies circulan las estrella
Á cuyos ojos aparece el mundo
Como bola de lodo muy pequeña ,
Y los inmensos mares como gotas
De agua que bañan la menuda arena,
Quiso estender su mano protectora
Y un rasgo solo de su gran clemencia
Libró á los españoles de ambos mundos,
De los estragos que inminentes eran.


Riego fué el instrumento: (53) Riego o grande
Que levantando ufano su cabeza
Entre Iss tumbas de Patriotas tantos
Como hablan perecido á la violencia
Del déspota inhumano.., y elevado
Sobre la pestilente y densa atmcsfera
De la opresion,.. blandiendo el refulgente




[36]
Gocen de libertad en paz eterna
De America los pueblos : los derechos
De conquista que son los que se alegan
Para oprimirlos , fuerza es que al influjo
De las luces del siglo desparezcan.
Este siempre tiránico derecho,
Deja de ser legítimo , si emplean
Los vencedores su poder, en daño
De los pueblos inermes que sujetan.
Para dar leyes, oprimir á un pueblo
Y obligarlo á existir en la tutela
Del otro pueblo que su dicha no hace,
No hay causa justa que alagarse pueda.


Deberemos acaso interesarnos,
Y la vida espoliar, en una guerra
Prolija y desastrosa per Fernando
Que hace infelices á los que gobierna ?
Llevar la guerra á tan remates climas
Para esclavos hacer, y que perezcan
En España entre tanto nuestras leyes,
El comercio , las artes y las ciencias,
La agricultura.— todos los conductos
Que á la felicidad y á la grandeza
Elevan á los pueblos: Fié , el objeto
De nuestro Rey Fernando y sus ideas !
¿ Y nosotros seremos instrumentos
Que al cabo lleven tan inioua empresa ?
¡ Cuan obsecado vive ! Cual se engaña
E n continuar tratando como á bestias
A hombres que ya conocen sus derechos
Y que á cobrarlos con valer se aprestan:
¡No mas sufrIr amados compatriotas!
Lejos de hacerles á los libres guerra
liagamusla en E...paí-ía al despotismo,


[57]
Y muramos con gloria-


en • la contienda,
O hagamos que las leyes promulgadas
En las Córtes de Cádiz prevalezcan.
Consritucion 6 muerte , ciudadanos :
Del ser supremo y de los hombres sea
Por siempre abominado y maldecido
El cobarde que punto se detenga
En seguirme


las furias infernales
Le aflijan de continuo hasta que muera....
Quede su cuerpo vil sin sepul:ura....
Los perros y las aves carniceras
Le consuman


y su alma en los abismos
Las eternas torturas sufra y sienta —


Nunca Marte feroz levanta en Tracia,
Cuando llama á las furias á la guerra ,
Una voz mas terrible y espantosa
Que la que Riego en el momento diera
De pronunciar sus últimas palabras
Que resonaron en la Europa entera
Y que en los libres de los Pueblas todos
Esfuerzo y osadia produgeron
Siguiole ufano el batallon de Asturias
É impávido marchando á su cabeza
Llega á la Isla de Leon , en cuyo punto
Cinco mil combatientes reuniera
Que el coronel Quiroga acaudillaba
Lleno de fuego patrio: con el era
De acuerdo Riego para dar el grito
Y al punto con placer lo repitiera — (34)
Era del plan que en Cádiz los Patriotas
Protegerian esta heroica empresa
Alzándose tambien ; mas por desgracia




[381
Pudieron las inicuas providencias
Del General Valdés intimidarlos, -
Amarrando con gri l los y cadenas
A los que con Rotalde pretendieron
El yugo sacudir y que volviera
A recobrar la ley su poderio. (35)
En seguida en tropel vienen las penas
A oprimir é /os libres reunidos
En la Isla de Leon : Ellos se encuentran,
Sitiados por 0-Donell y por Freyre


ÉQue con veinte miI hombres los pusierann confiero espantoso : Ellos resisten
La desnudez, la hambre, y mil miserias:
Ellos tocan la dura disyuntiva
De tener que emplear las bayonetas
En guerra abierta contra sus hermanas;
Y en lucha desigual, ó á la bajeza
Sucumbir de postrarse ante el Ti. ano
Implorando un perdon que los cubriera
De ignominia. ¡ Fatales circunstancias!
Los males por instantes se incrementan
Y en buscar medios para el esterminio
De aquellos infelices se desvela
El opresor Tirano: El solicita
Que desde Francia en su socorro vengan
Doce mil Suizos: pone en ejercicio
El dolo y la treicien : con recompensas
Alucinar pretende á los incautos
Para que Riego y las demas cabezas
Del ejército libre á los rigores
De viles asesines perecieran :
Ofrece indulto á los demas: pretende
Que todo estragos y ruinas sea :
'Jur su árdea se colocan en prisiones


[39]
En todo el Reino , á cuantos se sospecha,
Que abrigan las id.ias de ser iibres
Por su órden acometen y perpetran
Valdés, Campana y Freyre asesinatos
Contra un pueblo indefenso , que se entrega
Al júbilo y pl,Ice.r, pues lo persuaden
Del restablecimiento del sistema
De libertad, los fieros asesinos
Que el yerro en tanto aguzan can cautela
Para verter la sangre, á sangre fria,
De seres que jamás los ofendieran
Por complacer al pérfido Fernando,
Q ue en su corage destronar quisieraAl Universo entero: ¡ hombre inhumano
¡ Hombre mas fiero que las mismas fieras!


En esta situacion tan lamentable
Corria la borrasca mas deshecha
El pequeño bajel de los patriotas ,
Sin lastre , sin remeros y sin velas
Y en todas direcciones combatido:
De su suerte infelice se lamentan
Y esperan el naufragio por instantes.;
Pero el Gran Riego que el timon maneja
Impávido los llevas á salvamento. (37)
Con el mismo valor y la entereza
Que acreditó Leonidas ea Termopilas
Haciendo frente á innumerables Persas
Con sus trescientos Griegos... asi Riego
Con mil doscientos hombres se presenta
Fuera ya del recinto de la Isla,
Del opresor ante la inmensa fuerza ,
Y entonando los himnos que en obsequio


(36)




{40]
De la Patria adorada compusieron
Las musas en Jonama y Arco-Ag,uero , (38)
Consiguió que las armas se cayeran
De la mano á las huestes aguerridas
Que el tirano llevó para su ofensa. (39)
Vedlo morchar ufano separando
Con mano fuerte cuanto se opusiera
A interrumpir su marcha majestuosa
Y haciendo que en los pueblos reviviera
El entusiasmo nacional, que opreso
Por el terror que el déspota infundiera
Existia amortiguado y casi entinto.


Benéficos efectos produgera
Esta jornada del caudillo Riego ! (40)
En diversas provincias ya resuenan
De libertad aterrados gritos...
Madrid se alza, y el tirano tiembla.
Si : tiembla el tigre entonces y se humilla
Ante los libres como mansa obeja:
Hace de que desea el bien del pueblo
La mas solemne y pública promesa :
Asegura que obraba seducido
Cuando prescribió el Código en Valencia:
Jura en siete de Marzo su observancia
Y dice que el primero por la senda
De la Constituciorz irá contento,
Pues que ya reconoce que con ella
Se afianza , se establece y perpetúa
De la Nacion la gloria y la grandeza.
He que de nuevo nuestra cara Patria
Ornada de laureles se presenta,
La egida de Minerva en una mano
Y en la otra cetro de la noble Astrea ,
¡ Qué porvenir tan dulce y placentero!


[)í'
Que esperanzas tan gratas y alagüeñas


Descubre entonces el hombre reflexivo !
Observa con placer, que ya estan puestas
Con las antiguas leyes restauradas
Las bases á las glorias de la Hiberia :
Que la legislacion se perfecciona,
Y que á la ilustra ion se abren las puertas:
Que la educacion pública recibe
Mejoras á la par : que la riqueza
Nacional , va sin duda á fomentarse,
Porque las leyes proteccion dispensan
A la industria , comercio, agricultura,
Al talento y al mérito: y destierran
Los abusos, corrigen los desordenes,
Evitan los agravios, y comienzan
A enjugar tantas lágrimas amargas
Que en tres siglos de bárbara cadena,
Por los exesos del poder insano
De los tiranos pérfidos , vertieran
Los pobres españoles. Ya aparece
Una provisional junta compuesta
De hombres patriotas que convocan Córtes. (45)
Puesto en la plaza pública emblema
De nuestras libertades.... abolida
La inquisicion terrible y la perversa
Y detestable policía de Arjona :
Las puertas de las cárceles abiertas
A víctimas ilustres é inocentes
Que mil penas en ellas padecieran....
Decretos generales de amnistía
Para que á España regresar pudieran
De José Bonaparte los secretarios....


Todo en un solo dia apareciera! (4a)




Mes : el grito de Riego se repite
En Portugal , ea Nápoles , en Grecia
Y en el Piamonte: rotas estuvieran
Tambien de aquellos pueblos las cadenas ;
Servilmente humillados existian
Bajo de las terribles varas ferréas
De opresores injustos é inhumanos,
Y al oir de Riego el grito , se movian
Con ímpetu gigante y recobraron
Nuevo ser, á la par que consiguieron
Que los inalienables y sagrados
Decretos santos que naturaleza
Les concedió se viesen respetados
De los tiranos, que con imprudencia
Los despreciaban, y que la justicia
Y la razon tan solo presidiera.


¡Hombres que amais la libertad del mundo,
Corazones sensibles.... almas tiernas....
Vosotros que sabeis morir gritando
Viva la libertad é independencia.....
Observad la brillante perspectiva ,
La actitud tan hermosa que tuviera
La Europa entánces y aplaudid á Riego!


Sea nuestra gratitud hacia él eterno !
¡pero odiad.... maldecid al mismo tiempo
A los viles que su obra destruyeron !


El ingrato Fernando en el m >mento
Que juró ; el juramento menosprecia,
Y principia á intrigar par que la España


pi 3]
Á la ignorancia y á los yerros vuelva.
Á los reyes Tiranos que oprimian
Á las domas naciones Europeas
Convoca en su favor , y se somete
A ofrecerles la parte que quisieran
De la hispana Nacion , por los ausilios
Que le facilitasen. Ellos tiemblan
Por una parte al ver que el fuego santo n
Se propaga en Europa y se incrementa;
Y como al mismo tiempo son rentados
Por la ambicion , al punto se interesan
En favor de Fernando y en su ausilio
La fuerza, el dolo y la maldad emplead(43)
Pero todo en poder de estos Tiranos
Sin duda alguna perecido hubiera,
Y las Naciones todas que subyugan
En distinta aptitud ahora estuvieran ,
Si no hubiera en España hombres indignos
Que á sus hermanos sin piedad vendieran ;
Estos infames en orgullo enchídos ,
Vienen desde el grillete y la cadena ,
Y empuñan de la Nave del estado
Llenos de miedo y de ambicion las riendas ;
El medio les obliga á que se humillen
Ante el Tirano inmundo con bajeza :
La ambicion y el orgullo los arrastra
4 buscar una vida placentera
A costa de maldades y de infamias—.
Y nada les importa que perezcan
Las libertades patrias si ellos logran
El mando conveniencias que desean :
Al fin se ponen con el Rey de acuerdo
Para acabar con Riego y el sistema


0`) El grito de Constítitcson.




LI^ 'i
De libertad que habia restablecido,
Fundando en sus ruinas otra nueva
Constitucion con Cámaras y beto
Absoluto : En substancia , era la idea
Fijar un despotismo enmascarado ,
Asegurando ellos su existencia
Pacifica y con goces abundantes,
Y mas que en cambio la nacion sintiera
Los horrores del negro despotismo. (44 )
Fernando ni con esto se contenta :
Al absoluto mando solo aspira,
Pero en el plan de Cámaras encuentra
Un pretexto y disfraz á sus anelos
Engañando con pérfida cautela ,
A los que tal proyecto le proponen ,
Para que conspirar le permitieran
Libremente : En efecto desde entónces
El Rey y los Ministros ya comienzan
A trabajar, aunque en distinta f.>rma ,
Contra la ley que derrocar quisieran.
Por una parte intenta el Rey fugarse
De la Corte , en el dia en que debiera
Prestar su juramento en el Crongreso
Ejercitando la maldad mas negra
Al mismo tiempo , pues se proyectaba
Que per todos sus ángulos ardiera
Madrid en aquel dia. ( 45 ) De otra parte
Los Pérfidos Ministros se deleitan
En perseguir á Riego y calumniarlo
Con las infamas páginas secret 3 s. (46)
Se afanan porque pierda su prestigio....
Se declaran contra él en guerra abierta....
Y al mismo tiempo á la Nacion disgustan
Porque las nuevas leyes aborrezca.


[M b
Perciben todos sumas atendibles
Del Nacional tesoro.... (47) De las rentas
Del estado disponen á su arbitrio.... (48)
A todos sus secuaces los emplean
En destinos lucrosos.... (49) De cesantes
Y descontentos todo el Reyno llenan.... (50)
Destruyen el ejército de la Isla,
Que era cl antemural y la defensa
Que tenian las patrias libertades.... (51)
Á Riego , el grande Riego lo destierran
Por complacer al Rey , que no podia
Soportar de este Héroe la presencia
Intimidan al Pueblo Madrileño
Sacando los cañones á la Puerta
Del Sal , por sostener tanta injusticia,
Tamaña iniquidad, tanta vileza.... (5z)
Dejan impunes á les enemigos
De nuestra libertad.. Siguen los Persas
En destinos lucrosos A un Lozano
De Torres, y á un Arjona se les dejan
Sueldos crecidos.... Al Servil Castaños
Asesino de Lacy, se conserva
So empleo de consejero.... Ruinosos
Empréstitos disponen y concertan,
Y malversan, y roban con descaro
Sumas considerables, que debieran
Aplicarse al Ejército y Armada
Y á medidas precisas de defensa
Que la libertad Santa reclamaba
Del ministerio infame con urgencia,
Pues veia al Fininces acantonando
Un ejército fuerte en la frontera.... (53)
¡ Infame Ministerio ! ¡ A él se le deben
Los males y amarguras que nos cercan!




[46j
Él; á los ministerios subsiguientes
Del error y oel mal marcó la senda,


Y los condujo como por la mano
Atados á la bárbara, cadena
Del anillo, que al pian premeditado
De Cámaras y boto los sujeta. (54)
De este plan tan inicuo y detestable
Nacieron los proyectos.— las empresas
De insurreccion de Echabarri , de Baso,
Del Moro, del Abuelo , de los Caerías,
De los Guardias de Corps, y de Merino,
Del Locho, del Trapensa , y de una inmensa
Muchedumbre de hambres obsecados
Que salieron al campo en guerra abierta
Contra los libres, y á esponer su vida
Por conquistar la albarda y aguaderas....
Por que ellos y sus hijos subsistiesen
En la degradacion y en la miseria.
Del mismo plan de Cámaras v Neto
Salió la impunidad en que existieran
Todos estos facciosos.... El produjo
Que la tribuna popular. cayera.,
Y que á la imprenta se pusiesen trabas,
Y las persecuciones que se hicieran
A los buenos Patriotas, que gritaban
Al ver la iniquidad con que vendieran
El Rey y los Ministros á la Patria_ (55)
El mismo plan fue causa de que diera
El grito sedicioso en fin de Junio (56)
La guardia Real , y de que acometiera
En el siete de Julio á los Patriotas
Gritando viva el despotismo y mueran
Los liberales : Por los mismos planes
Tuvo el Rey la (nadie é imprudencia


pt71
De decir que ya estaba reto el pacto
Al consejo de Estado: El produgera
La conducta exicial que por entóuces
En la diputacion se descubriera
Y en las Córtes despues: les mismos planea
Tan perniciosos sin efecto quedan
En aquellos momentos , pero nunca
Fueron abandonados; á la inversa
El ministerio de los San Migueles
Les dió mas estencion y consistencia.
Y de aqui el despreciarse los tratados
De alianza que ofreció la Inglaterra ,
Presentando una mano protectora
Á los libres de España : las groseras
Notas de San Miguel á este gobierno,
Dieron motivo á que desatendiera
Nuestra situacion con sentimiento. (57)
El mismo plan inicuo y la torpeza
De San Miguel—. su nulidad notoria,
Fue tambien causa de que se rompieran
Las relaciones entre España y Roma
Y ere hecho produjo consecuencias
Bien tristes á la causa de los libres (58)
A este plan se debió que no tuvieran
Ausilio y proteccion los que dejaban
Del tirano del Sena las banderas.
El mismo plan produjo que del todo
Se olvidasen los medios de defensa (59)
El fue causa tambien del menosprecio
Con que se recibieron las propuestas
Da una alianza ofensiva y defensiva
Que España y Portugal hacer debieran: ,"6o)
A influjo de este pian se destruyeron
Las tribunas que alzadas estuvieran




P181
Desde el siete de Julio en que los libres
Su heróica sangre con valor vertieran
Por el mismo quedaron sin castigo
Los viles que á las Guardias condujeran
A entronizar el fiero despotismo. (6t)
Con la superchería mas grosera
Osó decir por él, el ministerio
Llevando hasta su colmo la imprudencia,
En una sesion pública de Cortes,
Que no habia temor de que invadieran
Los franceses á España y aquel dia
Dijo tambien en la sesion secreta
Que ya no se dudaba que entrarían
En breve los franceses, que existieran
En la frontera haciendo sus aprestos
Para traer á España las cadenas. ( 6•1.)
Por este plan perjudial é inicuo ,
Y por una politica perversa....
Por rtnquiabelismo obominable
Se contestó á las notas altaneras
De Prusia , Rusia y Francia en una forma
Muy própia de españoles, como hubiera
Adoptado el Gobierno de ante-mano
Medidas adecuadas á la empresa
De oponerse al designio de los déspotas ;
Pero era muy impropia... muy agena
De la situacion de España entónces. (63)
Tambien por este plan se dispusiera
La salida del Rey con gran premura
Para Sevilla , dando asi una prueba
De temor, de recelo y desconfianza
A toda la Nacion. (64) A él se debiera
El conferir el mando de un ejército
Al conde de Abisbál , porque pudiera


[49]
En seguida venderlo , y á la patria. (65)
El mismo plan produjo que obtuviera
El mando de ejército en Galicia
Un Morillo , con pacto de que hiciera
Que Quiroga de España se ausentase ,
Para que asi los libres concibieran
Un pánico terror y desconfianza.
Fue de este plan el separar las fuerzas
Para que los franceses no encontrasen
A su entrada en España resistencia.
Por él tambien al general Torrijos
Se le privó del mando que abtuviera
En la raya de Francia : de este inicuo
Y diabólico plan fué abrir las puertas
De nuestra cara Patria á los franceses ,
Que sin oposicion marchan y llegan ( 66)
Sin disparar un tiro hasta la Isla
Por estos mismos planes sedujeran
A Regato , y Regato á Ballesteros.
Por este mismo plan se hizo la venta
Del trocadero en fin tí el se ha debido
La perdicion de la española tierra. ( 67 )




Ya• nuevamente el perfido• Fernando
Eregido en tirano manda en ella :
Y.. vedlo ; pero no : apartad la vista
Del doloroso cuadro que presentan
Mas de seis mii ilustres ciudadanos
Que su vida en patíbulos perdieran....
Mas de sesenta mil que gimen presos,
Y mas de veinte mil que su existencia
Salvaron con la fuga, y ahora viven
En paises estraños de miserias


á




os


[52]
para que publicasen aquel periódico, el cual


tenia por objeto adormecer el espíritu público, é
inspirar moderacion y sufrimiento á los españoles,
con las voces de órden, lealtad, moderacion y paz,
para despues descargar sobre ellos el golpe mor-
tal de imponerles las cadenas.


Al mismo fin de denigrarnos y calumniamos
contribuyeron los periódicos ministeriales , como
los que escribian el Universal , en cuyo papel
jamas se insertó cosa alguna que no fuese apro-
bada previamente por el ministerio , á quien esta-
ba vendido: y como es público, notorio y compro-
bado por una triste esperiencia, que todos los mi-
nistros, que hubo en España desde la restauracion
del sistema en 182,o , hasta octubre de 18 s 3 , épo-
ca fatal en que pereció la libertad, volvieron trai-
doramente las armas contra la Patria desde el
instante mismo que llegaron á pisar el inmundo
alcázar del despotismo.... es claro que no po-
dia producir cosa buena aquel papel que dirigia
Narganes traidor tambien á la Patria como los
anteriores y distinguido entre ellos por sus infa-
mias durante el gobierno de José Bonaparte.


Tambien fueron instrumentos del mismo plan
los periodistas Cambia-colores , como v. gr. los
que componia el Espectador que fueren exalta-
dos , moderados, ministeriales, and-ministeriales,
serviles y liberales, godos y africanos, segun p/a-
cia al llamado Grande Oriente, Español reEu-
lar , en cuyo infame club no habla mas que ca-
nalla y bribones de á fóleo, que obraron directa-
mente contra la institueion masónica cuando se
intrometieron á , tratar de asuntos políticos , ha-
ciendo que una sociedad tan respetable y tan


[53]
digna de aprecio en todo el universo les sirviese
de capa para sus latrocinios. Los buenos Masones
que son benéficos y virtuosos desampararon inme-
diatamente á esta turba de hombres, ambiciosos
porque llegasen á conocerlos: pero quedaron ba-
jo su férula muchos hombres obsecados , muchos
ilusos y muchos egoistas, que á trueque de me-
drar ellos , les importaba un ardite que perecie-
se la Patria. A esta última clase pertenecian los
editores del Espectador, García, Izmard y otros
de su jaez.


Fueron, en fin, instrumentos del mismo plan
los periodistas en bruto, que asi como Fr. Gerun-
dio dejó los estudios para meterse á predicador,
ellos dejaron sus oficios de taberneros y sastles,
y sin saber leer ni escribir , se metieron de pa-
titas en el corro de los publicistas para barba-
rizar en grande, como por ejemplo Trapero y
compañía que redactaban el Nuevo Diario de
Madrid, en el cual hubo de todo como en la viña
del Señor , pues con la misma facilidad tenia ca-
bida en este papel un artículo eminentemente
liberal como otro eminentemente servil.


Toda esta cuadrilla de pícaros , sostenida por
otra tan pícara como ella, cayó sobre los desam-
parados editores del Zurriago , calumniados :
1° de que hablan sido afrancesados, esto es par-
tidarios de José Bonaparte , y como tales babilla
obrado con todas sus fuerzas contra la Patria :


c que estaban pagados por el Rey para atacar
á todos los ministerios, diseminar el disgusto en-
tre los patriotas, desorganizar el sistema : 3°
que eran intimos amigos , y especialmente Megía
del Embajador &anees , en cuya mesa comia los


411




[54].
mas de los dias : y 4 ° que habian servido am-
bos en la policía que estuvo á cargo de Arjona,
en el flameo del despotismo, y por sus delacio-
nes habian perecido muchos patriotas. Este estre-
mo dijeren que lo justificarian con documentos que
oxistian en su poder, y que ofrecieron presentar.


Aunque todos estos cargos no tenían mas apo-
yo que el dicho de los que los presentaban, como
los repetian de continuo ellos y sus partidarios,
y eran deducidos con un aire de verdad, tal co-
mo el que les daba la oferta de prese , itir docu-
mentos, produjeron impresiones fatales á nuestra
opinion.


Par mucho tiempo desprecismes les impos-
tuco, y á los impostores , y seguirnos nuestro
curso como la Luna sin hacer caso de los ladri-
dos de los perros: pero observando que nuestros
enemieos se envalentonaban, y que nuestro silen-
cio parindicelea la causa Santa de la Libertad que
defendíamos , nos vimos precisados á entrar en
materia para destruir los cargos , y hacer pare-
cer á los impostores en su verdadero punto de
vista.


El primer cargo se desvaneció completamente
con documentos que presentarnos y estuvieron
puestos de manifiesto en la librería de Esparza
por especio de un mes para que t, do el que gus-
tase te impusiese de su autenticidad. Por ellos se
acreditaba , que solamente vimos á les franceses
en el campo de batalla, en los seis afios que du-
ró la guerra: y que en este tiempo hicimos im-
portantísimos senvicies que estaban sin prémio
porque jamas habíamos querido sucumbir á la ba-
jeza de pedirle mercedes al tirano.


[551
El u e Cargo estaba destruido por si mismo


en el criterio de los hombres sensatos. á Si el Zur-
riago era al único papel que acusaba al Rey , y
descubria todos los malos pasos que daba, con el
obgeto de empuñar el cetro de hierro ?... en que
cabeza bien organizada podia tener entrad la
idea de que el Rey alimentase á un biborez para
que le royese las entrañas ? á.Podia llegar la fa-
tuidad de Fernando 7° y de sus directores has-
ta el estremo de pagar á Escritores sus ma ores
enemigos ? á Hebia de tener el bárbaro placer de
que le presentasen á la faz del universo como el
mayor Tirano.... como el hombre mas inmoral
y mas perverso que pisaba la tierra , pues que
fueron tales los coloridos con que lo hicimos apa-
recer , despues que lo vimos couspirer clara y
abiertamente contra la Constitucion ? á pesar de
la irresistible fuerza de estas razones , todavia
hubo ron os que creyeron á nuestros calumniado-
res, y estuvieron en la inteli gencia de que Fer-
nando 7° daba su dinero para obsequiarnos; y
en esta creencia subsistieron aun despues dc ha-
ber visto el alzamiento de los batallones de Guar-
dias , que salieron de sus cuarteles gritando vi-
va el Rey absoluto, y mueran los autores del Zur-
riago y de la Tercerola, porque hablamos dado
tres dias antes el grito de al-orate á los Patrio-
tas, y aun despues de habernos visto en el 7 de
Julio defendiendo la libertad en las filas de les
libres : ¡ Que aberracion 1


Para destribuir el cargo 3° sefialamos los
legares del Zurriago, que uo eran pocos, en que
hablamos de las inicuas miras de la santa Aiian-
2:1, y de la horrorosa y clastestabic conducta del




[56]
Tirano de Francia, que llevó al suplicio á su her-
mano Luis vr : y para justificar este estremo, inser-
tamos sus cartas en aquel tiempo á su confidente Fis
James... Del inicuo fin con que existia el ejército
Frances en la frontera bajo pretexto de cordon sa-
nitario... de la necesidad de oponerle una fuerza
respetable... de las inicuas tramas de los serviles
reunidos en Bayona,... De las acusaciones que ha-
blamos hecho al Fmlenjador trances por su inter-
vencion en la su blevacion de los Guardias en Aran-
juez , y por sus gestiones personales con el Au-
ditor de Guerra D. Tiburcio Hernandez para que
faltando en la justicia dejase impune á Goffin,
asesino del eminente Patriota Landaburu.... Y de
nuestros clamores en fin, para que se hiciese sa-
lir de Fepaíía á este Embajador enemigo declara-
do de la libertad.


Con tan fuertes hechos, y les reflecsiones que
de ellos emanan. conseguimos que los hombres pen-
sadores y juiciosos despreciasen la acueacion ; pe-
ro nos faltaba todavía convencer á los menos re-
flexivos y con este fin dijimos mil veces en el
Zurriago y en las Tribunas populares que ro co-
n ociamos al embajador frances, que ignorábamos
hasta la casa de su habitacion, y que dabames
derecho á todos los patriotas para que nos aca-
basen á puñaladas si nos Viesen entrar en .la ca-
sa de tan acérrimo enemigo de la libertad , 6 si
probasen que habíamos estado en ella alguna vez.


Y en cuanto al cargo 4° dijimos, que no
conocíamos á Arjona mas que de vista , y Megía
le habia hablado una sola vez : que el Zurriago
habla referido sns infamias , y clamando mas de
una vez, para que la Nacion en el estado mise-


[57]
rabie en que existia no fuese por mas tiempo gra-
vada con el sueldo de 6o mil reales que le paga-
ba, pues no lo merecia ni era justo que los defen-
sores de la Patria estuviesen con las armas en la
mano y con mil privaciones, mientras Arjona y
otros serviles como él, vivian en la abundancia
y en los placeres, á costa de una patria cuyas
entrañas procuraban despedazar. Desafiamos á
Arjona y á los demas calumniadores para que pre-
sentasen los documentos que decian tener en su
poder ; obligándoles á esta presentacion con de-
cirles , que si no lo hacian quedaban con la nota
de viles impostores. Mas hicimos : instados por
nuestros amigos, que hasta los pusieron en el ca-
so de dudar de nosotros, denunciamos dos mime-
ros del Espectador y del Nuevo Diario de Ma-
drid que contenian estas calumnias, ante el al-
calde constitucional de Madrid D. Lino Campos,
el cual convocó al Jurado : pero se aglomeraron
los empeños por parte del Tirano y sus secuaces...
influyó el Grande Oriente con toda su fuerza so-
bre los jueces de hecho , que en la mayor parte
eran masones sometidos á aquel club, y con es-
cándalo general, declaró el jurado que la acusa-
clon no era ofensiva y que no habla de consi-
guiente lugar á la formacion de causa. ¡ Falta de
pudor y de probidad en unos hombres supedita-
dos al Grande Oriente


Los cargos pues , fueron destruidos tan com-
pletamente como se ha manifestado ; pero á las
impresiones que produjeron mientras callamos,
y hasta que reunimos hechos y documentos pa-
ra hacerlo-desaparecer... á la desigualdad de ar-
mas con que lidiábamos, porque el Zurriago era




[58j
solo y se publicaba sem analmente, y los papeles
consagrados á hacerle la guerra salian á luz todoslos días y eran muchos... á la pro teccion que estosgozaban y al desamparo en que existian aquellos...
á la influencia del Grande Oriente , que espidió
planchas para que todos sus subordinados desa-
creditasen al Zurriago y á sus autores... y á la
poca ilustracion de la multitud se debió en gran
parte decayese aquella fuerza moral que ostentá-
bamos, y de consiguiente se debilitaron


nuestrosasertos y no produgeron los resultados que de-bían esperarse: Y COIllo á la par can los Publi-cistas mencionados , se empeñaban en envenenarla opinion , los serviles,' los liberales, los pérfidos
inventores y prosélir)s del plan de Cámaras y
bezo absoluto, el espíritu público se fue aletar-
gando, con las voces de paz , moderacíon , árdea
y tranquilidad que de continuo inculcaban, mien-
tras abrían las puertas á los enemigos exteriores
para que penetrasen hasta Cádiz sin que se lesdisparase un cañonazo.... y de aqui la ruina dela libertad.


Ahora que el tiempo ha justificado nuestras
predicciones y nuestra conducta Ahora que ya
se ha roto el velo que eocubria á los enemigos de
la Patria..., nos hacen justicia los Españoles to-dos; y parecemos en una aptitud apreciable pa-
ra todos los amigos de la Libertad. Pero que
aprovecha esta indernnizacion cuando la Patria
es esclava ? Ojalá subsistieran las calumnias en
toda su fuerza y vigor contra nosotros, mas que
á su influjo pe recieramos si nuestra ruina pro-
porcionaba la libertad al pueblo Español!,(/) El Juez- de primerr instancia de Madrid


L:5]
D. Martin de Pineda hizo padecer á Megía en
una prision por espacio de siete meses, obrando
descaradament e contra Justicia. Por la ley orgá-
nica de libertad de imprenta se establecia , que
fuesen responsables del contenido de los papeles
impresos en primer lugar los autores , en segun-
do los editores , en tercero les impresores, y que
los reimpresores ro fuesen penados. En Cadiz se
insertó un artículo en el diario Gaditano que re-
dactaba Clararosa, el cual tenia autor, editor im-
presor responsables ante la ley. El autor era Tau-
llar Blanqués , el editor Clararosa, y el impresor
el del diario Gaditano. Este artículo lo reimpri-
mió Megía en el Zurriago, y sin embargo de que
los despachó que á su instancia se remitieron á
Cádiz y volvieron - á Madrid con diligencias que
acreditaban que allí habla autor, editor é impre-
sor responsables del artículo, y á pesar de que,
como se ha dicho , la ley esclula terminantemen-
te de pena á los reimpresores, el injusto Pineda
hizo sufrir á Megía el tiempo de prision que se
ha referido ; le presentó ante el juzgado como
responsable al artículo, y el juzgado mirando so-
lo al papel , le condenó á dos años de prision.


La Audiencia de Madrid para ante quien lle-
vó Megía sus recursos de apelaeion y de nulidad,
se convenció de la injusticia del fallo y absol-
vió á Megía del procedimient o libremente; pero
dejó sin castigo al juez inicuo que holló la ley. En
esta parte obró tambien la Audiencia contra lo
espresamente prohibido por la ley orgánica de li-
bertad de imprenta, que establecia , que al mis-
mo tiempo que se declarase nula una sentencia se
exigiese al juez que la hubiese dictado la respon-
sabilidad personal.




[60i
En el tiempo de esta prision y de las demasque sufrieron los dos editores del Zurriago , fuéjustamente cuando hicieron la guerra mas vigo-


rosamente á la arbitrariedad y al despotismo.
En la profundidad de los calabozos escribian


su panel, burlándose del Gafe Político D. José
Martínez de San Martin, denunciando á la opi-
nion pública sus malos pasos en daño de la Pa-
tria, y poniendo en ridículo bajo el nombre de
Tintin, al mismo tiempo que acusaban á Pinedabajo él de Poncio Pineda, aludiendo á que eratan justo como Poncio Piiato.


(3) Los editores de! Zurriago amenazados
de muerte por mil anónimos ... seguidos las mas
de las noches cuando retiraban á sus casas des-de las sociedades patrióticas.... habiendo sido pre-ciso que muchas veces les acompañase la autori-
dad judicial, que tuvo diferentes avisos de que
habia asesinos apostados para acabar con su exis-
tencia... viéndose ultrajados y prevenidos en di-
ferentes ocasiones para que no subiese:, á las tri-bunas... habiendo sido allanada la casa de Me-
gía por Receta que entró en su estudio con la es-
pada desnuda en la mano derecha y con una pis-
tola montada en la izquierda... sosteniendo desa-
fíos y repeliendo insultos casi de continuo... siem-
pre siguieron impávidos haciendo la guerra


el losenemigos de la Patria.
(4) En 27 de junio de 1823 dijeron en la Ter-


cerola : ya es tiempo de dejar la pluma y p.,-
ner mano á la espada. En seguida hicieron va-
rias reflexiones para persuadir á los patriotas que
estaban sobre un volean que iba á dar su esplo-
sion y á sepultarlos en sus ruinas, Muchos tontos


[61]
que no veian el mal se burlaron de esta predic-
clon ; pero al tercer dia vieron con sorpresa el
pronunciamiento claro de seis batallones de Guar-
dias contra el sistema, y que el Rey mismo esta-
ba á su cabeza.(5) Despues del 7 de Julio se dijo á los edi-
tores del Zurriago que eligiesen el punto á don-
de quisiesen marchar de Ministros plenipotencia-
rios de la Nacion española ; y de aquí tuvo ori-
gen la voz que corrió entónces de que Megía iba
de embajador á Lóndres. Despreciadas estas ofer-
tas ,y otras que indirectamente se le hicieron, se
llegó hasta el caso de que un teniente coronel lla-
mado Guseme, favorito del infante D. Francisco,
les habló francamente y les ofreció de parte del
Rey cincuenta mil duros, si dejasen de escribir el
Zurriago, y salian de España inmediatamente.
Los editores del Zurriago miraron todas estas
ofertas con el mas alto desprecio.


(6) Cuando los Aragoneses echaron con el
fuero de Sobrarbe los cimientos á su Monarquía,
señalaron límites á las facultades y autoridad de
los Reyes con este juramento , que demuestra que
la soberanía existia en el pueblo.


(7) El descubrimiento de las Américas. La Es-
paña hubiera llegado á dar la ley al universo si
al mismo tiempo de adquirir el dominio del nue-
vo Mundo no se hubiera entronizado el despotis-
mo , en el reinado de Cárlos 55' de Austria , 1°
de España. Antes de esta época era fuerte y mag-
nánima : en la feria de Medina del Campo se gi-
raban 155 millones de escudos, y además circu-
laban inmensas sumas en las ferias de Burgos, Se-
govia , Logroño, Rioseco y otros. La España te-




[621
nia fsctoaias y comercio en las principales ciu-
dades de los reinos estrangeros : Tenia fabricas
sin número , pues solo en Sevilla se contaban
treinta mil telares , como nos dice el Señor Cam-
pomanes en su tratado de industria popular.


En el alío de 1586 ya. tenia la España , en
Vizcaya zoo naos que navegaban á Terranoba
por bacalao y á Flandes por lanas: En las castas
de Galicia y de Asturias habia mas de trescien-
tos pataches que navegaban á Francia, á Ingla-
terra y á otros reinos. En Portugal tenía mas de
400 naos de alto-bordo y mas de 1, 5o chamba-
las y carabelones : y en Andalucía sobre 50o naos
que navegaban á nuestras Américas. Asi consta
del libro titulado RIllecciones imparciales sobre
la humanidad de los Españoles en las Indias,
escrito en Italiano por el abate Nuixi, traducido
al castellano por D. Pedro Ve.re/a. y Ulloa , é
impreso en Madrid en el alic, 1782.


La armada llamada invencible que Felipe 2 C.
tripuló contra la Inglaterra, se componia de 15o
navíos de alto-burdo, 40 urcas y 32o 'tacs me-
nores.


La escuadra que tenia la España en Puerto-
belo en el año de 1546 se componia de 22 na-
víos y porcion de barcos menores.


Pero la España ha perdido por grados su
fuerza naval , su comercio, su poblacion, sn in-
dustria y su riqueza, á la par que ha crecido el
despotismo y arbitrariedad da sus Reyes.


_a Aca-
bó la dinastía de los Jaimes y de los Pelayos,
originarios de España y españoles netas y casti-
zos ; y acabó Al mismo tiempo el esplendor, el
poder y la gloria de la Nacion.


[63]
La casa de Austria encontró en España una


poblacion de 26 millones de almas ; pero les Re-
yes de esta dinastía y de la de los Borbones , ejer-
ciendo un poder arbitrario y despótico, la han
reducido á diez millones. La casa de Austria Le-
vó á la España al borde del sepulcro , en tales
términos que fué mirada como'una nacion impo-
tente y r ula, y dividida en tres potencias que for-
maron liga y planes para dividirla y repartir-
la entre si.


La casa de Austria estrajo de la Nacion to-
dos los recursos que pudo ; favoreció á todos los
Alemanes sus paisanos, les colocó en los mas ele-
vados empleos , les entregó el gobierno de la Na.
clon , y no solo despojó al paciente pueblo espa-
ñol de su representacion en Córtes, sino que de-
jó sin premio á los descubridores del nuevo Mun-
do, los atropelló, entregó las ricas provincias de
Venezuela al yoga y codicia de los Alemanes,
despojando á los Españoles de sus mismas propie-
dades , y fué el móvil para que todas las nacio-
nes conspirasen contra la España á fin de qui-
tarle sus Américas, hasta el punto de haberse
escrito por un francas llamado Casaos y bajo el
nombre supuesto de Fr. Bartholorné de Las-Ca-
sas una historia de libelos y un tejido de sueños,
que de dia en dia se han ido aumentando, para
concitar el odio de los EspAoles Americanos ácia
sus hermanos los Peninsulares. Este libro y los
infinitos individuos de todas sectas y Naciones que
con el hábito y supuesto nombre de Misioneros
remitió Aqüa-vi va General de la compañia de Ja-
sas y que se diseminaron por todas las Américas,
acabaron de romper el lazo de union de estas


A




[6 Ji]
con la Peninsula. (*)


La casa de Borbon empezó á gobernar el Reino
por losmismosprincipios que la Austria. El primero
Rey de esta dinastía Felipe 5? se propuso afrance-
sarnos: ridiculizó nuestro traje con un libro satírico
que hizo publicar en lengua latina : comenzó sus
latrocinios apropiandose seis millones de pesos
que llegaron de América para el comercio de Ca-
diz: hizo llevar á su palacio la balija de Estre-
madura con la correspondencia del público : des-
pojó de su título hereditario al teniente Adelan-
tado mayor de Murcia : Emprendió la dispara-
tada guerra de Portugal, despachando convoca-
torias por medio del alcalde Ronquillo para que
se presentase en la frontera de Ciudad-Rodrigo
toda la nobleza castellana, y declarando pechero
al que no lo ejecutase , por que siempre ha sido
politica de los Borbones imponer el castigo an-
tes de cometer la culpa é infamar á sus sulocii-
tos en vez de honrarlos. Acometió en fin Fe-
lipe S° muchos actos de violencia y des-
potismo ; derramó la sangre de los Españoles y
agotó sus fortunas por conquistar Reinos para
coronar á sus cinco hijos. Cárlos 3 ? que fue uno
de ellos condujo á España un mundo de Italia-
nos : puso las riendas del Gobierno en manos de
Esquilache , ó por mejor dicho, en manos de la
mugar de Esquilache : su mal gobierno produjo
el motin de Madrid y en consecuencia de este mo-
da y á sangre fria despues que se sosegó, quitó
del mundo con la mas profunda cautela y con el
mas alto y sanguinario despotismo á treinta mil
Españoles.
Carlos 4 ? nieto de equel á hijo de


Sumerjo erudito tont. 8. 116.


[65]
este, despojó de titulo y patrimonio hereditario
al Conde de las Torres de la Albufera de Valen-
cia para premiar los crímenes de Godoy : Que-
brantó la fé pública abriendo todas las cartas y
correspondencia : nos sometió por veinte años á
los caprichos de un desmoralizado favorito y de
una descocada prostituta , y vendió , unido con
su digno hijo Fernando la Nacion Españula al ti-
rano de la Francia á cambio de una miserable
pension.


á Y será posible que despues de tantos y tan
amargos desengaños no piensan todavía los Espa-
ñoles en fijar para siempre sus destinos ? á Será
posible que la familia de los Borbones por quien
tantos ríos de sangre se ha derramado en el mun-
do, haya de ser la cima que se trague á la Nacion
Española? á Es posible que toleremos por mas tiem-
po ser la mofa y ludibrio de las Naciones? Con
razon puede decirse de nosotros lo que dijo Ser-
gio á los Senadores Romanos al verlos cuan indi-
ferentes y apáticos se dejaban despojar de su li-
bertad: ¡ Oh nomines ad serviendum natos ! Oh
hombres ruines.... Oh almas bajas que solo ha-
beis nacido para la esclavitud, y solo sois capa-
ces de la servidumbre ! Fernando 7° puede de-
cir ahora á los Españoles lo que decia el Empe-
rador Caligula á los Romanos, al ver su humi-
llante y degradada situacion : Ó los Reyes somos
Dioses, ó los Pueblos son una manada de bestias.


k Será posible Españoles que esta familia fran-
cesa, indígena de esa Francia que tantos siglos ha-
ce nos abomina y aspira á esclavizarnos , hayr
podido persuadirse que la Nacion es patrimonio
suyo ? Es tina alaja de su propiedad , J un mue -




[13]
ble heredado dc/ cual puede disponer á su capri-
cho y antojo ? á Será posible que veamos con in-
diterencia curnpildas les pe/abras que Lui,, IV.
dijo al deepedIrse á su nieto Felipe V. Hijo mio
ya no hay Pirineos , que fue decirle , ya la Es-
paña es nuestra.... Ya es una Provincia, ó Co-
lonia de la Francia ? Z Y podremos ver esto con
indiferencia y apezie z Que es del ardor y pa-
triotismo Español ? 3Que es del valor Castellano?
Fernando 7


.° se ha olvidado de que por haber
obrado en oposicion con las leyes ha perdido re-
petidas veces su derecho al trono: á Y por que
los Españoles no se lo acuerdan , y usando de
sus imprescriptibles derechos se libran de los in-
finitos males que sienten ? Su padre fué Napoli-
tano , su madre Parmesana, su visabuela Pola-
ca, su visabuelo Frances.... De donde pues les
ha de venir su amor á la nacion Española y el
deseo de hacerla feliz?


¡Renazca Españoles el ello de cuatrocientos
catorce ! Renueven su dominado! '


los Vandalos,
Alanos, Suebos, Siiingios y Cactos t Reproduz-
case el siglo 8
Tiliáns.e con sangre las mar-


genes del Guadelete.... Tremelen triunfantes las


('1)
medias lunas en los muros de la infelice arisco....


El imperio Otomano, las huestes agarenzs se
epeáeren de nosotros y marquen nuestra frente
con el sello horrible de /a Convier-
tánse para siempre en Muaulananes los hijos de los
Heroes que venciendo á Napoleon dieron liber-
tad al mundo, y libertad patria y corona al mes
ingrato, al mas perverso y al mas cruel d, les Ti-


Griegos
llamaban á lo España Criseo que sil,-


zilica ovo.


[67]
renos que vieron los siglos 1 Todo será menos ma-
lo que el yugo del monstruo Fernando ¡ Pero
ah! ¡ que aberracion ! Mi razon me desampara:
tal serás feliz Patria querida mía : los decretos del
eterno me lo notifican : tú has de ser libre: vive
y vence : libre has de ser.... yo lo pronostico.


(8) En la causa que con este motivo se formó
aparece de Fernando tan clara como la luz del
dia. El fiscal entónces del consejo y cámara de
Castilla el sabio é incorruptible D. Simon de Vie-
gas puso en esta causa la acusacion y en ella tocó
mérito de los cargos que resultaban contra Fer-
nando y cómplices y apoyado en ellas y en la ley
pidió la pena de muerte contra el mismo Fernan-
do , contra el Duque del Infantado, Escoiquiz y
otros.


Otro comprobante de la maldad , es la circu-
lar que en aquella época expidió Cár los 4° á to-
dos los Pueblos, que principia asi : Dios que ve-
la sobre sus criaturas y no permite la consu-
macion de los hechos horrendos cuando las víc-
timas son inocentes &c.


Otro comprobante : las cartas que Fernando
escribió á sus Padres que dicen asi.


1. a Querido Papá : He delinquido contra V.
M. he faltado á lo que debla á mi Padre y Rey,
pero me pesa de mi conducta y prometo á Y. M.
la mas humilde obediencia , paro fui sorprendido.
Yo he revelado el culpable á V. M. y os suplica
que me perdoneis y que permitais besar vuestros
reales pies á vuestro agradecido hijo_Fernando.


San Lorenzo 5 de noviembre de 1807.
2.a Querida Mamá : estoy muy arrepentido


de la gran falta que he cometido contra mis Pa-




[6 8]
des y Soberanos : suplico á V. M. con la mayor
humildad que me perdone como tambien por la
obstinacion con que negué la verdad , en la úl-
tima noche. Suplico á V. M. con las mayores ve-
ras de mi corazon que os digneis interponer vues-
tro poderoso influjo con mi Padre, á fin de que
permita besar sus reales plantas á su hijo agra-
decido_Fernando.


San Lorenzo 5 de noviembre de 1807.
Otro comprobante: en una carta que escribió


Cárlos 4 á su hijo con fecha en Bayona á 2 de
mayo de 18o8 le dice entre otras cosas lo si-
guiente. 55 Os hice arrestar y hallé en vuestros
papeles las pruebas de vuestros delitos ; pero al
acabar mi carrera reducido al dolor de ver pere-
cer mi hijo en un cadalso, me dejé llevar de mi
sensibilidad al ver las lágrimas de vuestra madre,
y os perdoné. 95


(9) Documentos que justifican la fuerza que
se hizo á Cárlos 4? en Aranjuez para
que abdicase la corona á Fernando.


Carta de Cárlos 4 ° emperador de los fran-
ceses. I) Señor mi hermano : V. M. oirá segura-
mente con pesar, la relacion de los aconteci-
mientos sucedidos en Aranjuez y sus consecuen-
cias. Vos no vereis sin simpatizar conmigo , á un
grande Monarca aliado, puesto todo bajo su pro-
teccion, como de aquel que solo puede asegurar
su felicidad , la de sus dignos v amados vasallos.
En este apurado momento, en medio


i del ruido de
las armas , y de ros clamores de una guardia re-
belde, me encontré en la precision de escoger


[69]
entre mi vida y mi muerte, y que á mi muerte
se habia de seguir la de la Reina , y fuí obliga-
do á abdicar el trono; mas hoy se halla restable-
cida la paz , y lleno de confianza en la genero-
sidad del grande hombre que en todos tiempos se
ha declarado mí amigo, he tomado la resolucion
de resignarme en sus manos, y esperar su reso-
lucion sobre mi suerte , sobre la de la Reina, y
la del Príncipe de la P22.


Dirijo á V. M. el protesto de los sucesos que
acontecieron en Aranjuez y contra mi destrona-
cion : y muy confiadamente descanso en el cor-
dial afecto y amistad de V. M. rogando á Dios
que lo tenga en su santa guarda.—Señor mi her-
mano—De V. M. el mas aficionado y amigo,_
Carlos. = Aranjuez 25 de marzo de 1808.


PROTESTO.


Po protesto y declaro que mi decreto de 19
de marzo en que renuncié mi corona en favor
de mi hijo fué un acto á que me hallé constre-
ñido para evitar mayores calamidades, y eco-
nomiza, la sangre de mis amadas vasallos. De-
be por tanto considerarse como de ningun vi-
gor._ To el Rey.


(1 o) Los patriotas quisieron detenerlo en Vic-
toria., y llegaron hasta el caso de cortar los tiros
de las mulas que tiraban el coche ; pero la cruel-
dad de Fernando 7' tocó hasta en el estremo de
declarar por bando inclusos en la pena de muer-
te á todos los que se opusieran tí su salida de
aquella ciudad.


(II) No solo vendió Fernando la Corona y á




[70]
la Nacion que debia defender, sino que para dar-
se consistencia á esta venta, procuró aletargar
á los españoles , é inspirarles resignacion y su-
frimiento: así lo prueban las siguientes procla-
mas que espidió.


Españoles! mis amados vasallos : hombres
pérfidos procuran descaininaros. Ponen las armas
en vuestras manos para que las empleeis contra
las tropas francesas. Ellos trabajan al mismo tiem-
po para armeros contra los franceses , y á los
franceses contra vosotros. El resultado de eso no
puede ser otro , sino que la España sufra un sa-
queo CJI1 les mayo-es calamidades posibles. El es-
píritu de faccion de que tengo ya sentido los tris-
tes efectos, está muy en movimiento. En medio
de estas importantes y críticas circunstancias, yo
me ocupo en concertar con mi aliado el Empe-
rador de los franceses todo lo que tiene relacion
con vuestra felicidad. Guardaos de oir á sus ene-
migos. Todos aquellos que os hablaren contra de
los franceses están sedientos de sangre. Estos ta-
les son enemigos de l a Nacion, 6 son agentes de
la Ing!aterra, que se aprovechan cuidadosamente
de las circunstancias, y cu yas intrigas envolverán
la pérdida de vuestras provincias, y una serie de
años de trabajos y calamidades para vuestro País.


;Espafi >les! confi Id en mi experiencia y obe-
deced á la autoridad que tenga de mi pais : Se-
guid mi ejemplo y petisa I que en la posicion en
que estáis, no hay para los Españoles prosperi-
dad ni seguridad sin la amistad del grande Em-
perador nuestro aliado.


Dado en Rayonas en el Palacio Imperial,
llamado Palacio del Gobierno á s4 de mayo
de 408. 7o el Rey.


:11


[74]
4 los consejos de Costilla y de la Inquisicion.


_ En nuestras actuales circunstancias hemos
resuelto dar una prueba de afecto ácia nuestros
amados vasallos, cuya felicidad durante todo el
curso de nuestro reinado, ha sido el constante ob-
jeto de nuestro cuidado. Hemos por tanto abdica-
do todo nuestro derecho á los Reinos de España,
en favor de nuestro amigo y aliado el Emperador
de los franceses, por un tratado que he firmado
y ratificado, y que estípula la integridad é inde-
pendencia de los reinos de España , y la conser-
vacion de nuestra santa Religion , no solamente,
sino como única y exclusiva religion en la España.
Hemos pues juzgado conveniente mandaros esta
carta , para que os contormeis con sus disposicio-
nes haciendo todo esfuerzo para sostener al Em-
perador Napoleon. Presentad la mayor franqueza
y amistad á los franceses , y sobre todo dirigid
vuestro cuidado á preservar el pais de insurrec-
ciones y tumultos_ En la nueva condicion en que
vamos á entrar volveremos frecuentemente los ojos
para vos , y seremos felices si sabemos que gozais
paz y contento. Dado en el Palacio Imperial á
4 de Mayo de 18o8 To el REY'.


(1 2) Al llegar á este lugar , y para que los
españoles puedan conocer el monstruo que hoy los
tiraniza , harémos mencion de un suceso que ocur-
rió en Rayona y refirió el Monitor en 3 de mayo
de 1780. Entre varios españoles que fueron á cum-
plimentar á Carlos 4.o y á su Esposa en Rayana,
se halló tambien su hijo Fernando. Al despedirse
todos, Fernando quiso seguir á sus Padres; pero
Carlos 4.o se lo impidió , que se quedase , dicién-
dole : Príncipe , ¿quereis todavía insultar estos




[72]
cabellos blanco3? Fernando conoció en t6nces la
fuerza de sus crímenes y dijo así. V. M. puede ha-
cer lo que quisiera de un hijo que está penetra-


do de dolor por los daños que ha causado á K.111.
(13) Desde Valancey escribió á Napoleon la


siguiente carta.
5 Señor he recibido con mucho placer la carta


de V. M. I. y R. del r4 del corriente: le doy las
gracias por las afectuosas espresiones con que me
honra , y en las cuales he contado siempre , y las
repito á V. M. I. y R. por su bondad en favor
de las peticiones del duque de san Carlos y de Ma-
canaz. Hago tambien á V. M. I. y R., tanto en
nombre de mi hermano y tio , como en el mio,
los mas sinceros cumplimientos por la satisfaccion
que he tenido en la instalacion de su amado her-
mano sobre el trono de España. El fin de todos
nuestros deseos ha sido siempre la felicidad de la
Nacion generosa que habla en aquel vasto reino:
no podemos ver á su frente un Monarca tan dig-
no y tan propio por sus virtudes de asegurarsela
sin esperimentar un gran consuelo. El sentimien-
to y el deseo de ser honrados con su amistad , nos
ha obligado á escribirle la adjunta carta que me
tomo la libertad de enviar á V. M. I. y R., ro-
gandole despues de haberla leido, se digne pre-
sentarla á S. M. C. Una mediacion tan respet:.ble
nos asegura que será recibida con la cordialidad
que deseamos. Señor: disimule V. M. I. y R. esta
libertad que me tomo por hallarla fundada en la
ilimitada confianza que nos ha inspirado , y segu-
ro de todo nuestro afecta y respeto Permítame V.
M. I. y R. que retifique los mas sínceros é inva-
riables sentinVentos con que tengo el honor de ser


[73]
_Señor_ De V. M. 1. y R. el mis humilde y mas
obediente servidor _Firmado Fernarzdo— Va-
Iancey 5.9 de junio de 18°8.


(14) En carta que dirigió á José Bonaparte le
felicitó por la derrota de las tropas Españolas
en Tudela bajo las órdenes del Palafox y de Cas-
taños.


Despues en 6 de agosto de 1808, cuando los
Españoles derramaban su sangre á torrentes por
Fernando , este monstruo se regosijaba en los re-
veses que esperimentábamos , y escribió á Napo-
leon la siguiente carta. n Señor el placer que he
tenido viendo en los papeles públicos las victo-
rias con que la providencia corona nuevamente la
augusta frente de V. M. I. y R. nos estimula á fe-
licitarle con el respeto, el amor , la sinceridad y
el reconocimiento en que vivimos bajo la protec-
cion de V. M. I. y R. Mi hermano y mi do me
encargan que ofrezca á V. M. I. y R. su respe-
tuoso homenaje y se unen al que tiene el honor
de ser con la mas alta y respetuosa consideracion.
_Señor_ De V. M. I. y R. el mas humilde, mas
obediente servidor. _ Firmado Fernando.


(1.5) Carta de Fernando de Borbon Príncipe
de Asturias á Napoleon Lo Emperador de los
franceses, fecha cuando justamente estaba atentan-
do contra la vida de su Padre en el Escorial
Señor, el temor de molestar á V. M. I. y R. en
medio de las grandes atenciones y negocios con
que incesantemente os hallais ocupado, me ha pri-
vado hasta ahora de satisfacer mis ardientes deseos
sobre manifestaros por escrito los sentimientos de
respeto , estimacion y afecto que profeso al mas
grande hambre que jamas ha existido, enviado por


6




[741
la Providencia para librar á la Eurapa de la per-
turbacion con que estaba amenazeda : para con-
solidar los tronos vacilantes, y para dar á las na-
ciones paz y tranquilided. Las henSicas virtudes
de V. hl. I. y R., vuestra moderaa:on y vuestra
bondad aun con vuestros injustos é implacables
enemigos, todo en fin me hace esperar que le es-
posicion de estos sentimientos, será recibida con
la efusion de un corazon lleno de la mas sincera
admiracion y amistad. La peculiar situacion :n
que yo mucho tiempo me he visto, y que no
puede haberse ocultado á la cita penetracion de V.
M. han sido hasta ahora uno de los muchos obstá-
culos que han retardado mi pluma, siempre pron-
ta para manifestaaos mis deseos t pero satisfecho
de encontrar en V. M. L y R. la mes poderosa
proteccion, he resuelto, no solamente ratificar los
sentimientos da mi corazon ácia vuestra augusta
persona , sino tambien depositar mis mas intimas
secretes en el pecho de V. hl. como en el mas tier-
no Padre. Soy estremadamente desdichado en ver-
me obligado por particulares circunstancias , á
ocultar calmo si fuera un crímea un acto tan justo
y digno de alabanza como este, pero tales son fre-
cuentemente las fatales circunstancias de un es-
ceso de bondad aun en el mejor de los reyes. Pe-
netrado de respeto y filial amor á mi Padre cu-
yo corearon es muy generoso y justo, no me etre-
verla á descnbrir sino á V. M. aquello que V. M.
sabe mejor que yo, es; que estas mismas cualida-
des sirven frecuentemente de instrumento para
que astutas y malignas personas confundan la ver-
dad á los ojos del Soberano , no obstante de que
esta virtud y similar caracter sea congenial al de
mi augusto Padre.


[75]
Si las personas que le rodean le dejasen co-


nocer fundamentalmente el carácter de V. M. I.
y R. como yo lo conozco ; con que ansia no se
esforzeria mi Padre para estrechar los vínculos que
debian unir nuestras dos Naciones? L Y para es-
to podría idearse medio mas adecuado que mi sú-
plica á V. I. y R. M. para que me concediese el
honor de recibir yo por mi Esposa á una Prin-
cesa de vuestra augusta familia? Este es el uná-
nime deseo de hados ios vasallos de mi Padre, y
no tenso duda será el propio suyo (á pesar de los
esfuerzos de un pequeño número de personas ma-
lévolas) al momento que sean conocidas las in-
tensiones de V. I. y R. M. Esto es todo lo que
mi corazan desea; pero como esto no es confor-
me con los pérfidos egoistas que rodean á mi Pa-
dre, y que pueden sorprenderlo' por un momen-
to, me hallo lleno de aprensiones sobre este par-
tieullr. Solamente el respeta de V. M I. y R.
pudieren desconocer sus planes, abriendo los ajas
á mis buenos y amados Padres, haciéndoles dicho-
sos, y al mismo tiempo á la Nacion Española y
á Mí mismo. Entórices todo el mundo admirarla
ince saiternente mas y mas las bondades de V. I.
y R. M. quien tendria en Mí el mas aficionado
y agradecido hijo. Por tanto con la mas grande
confianza imploro la paternal proteccion de V.
Tel. no solamente para que pueda ser servido con-
cederme una Princesa de vuestra familia para mi
Esposa sino =bien para remover todas dificul-
tades y obstáculos que puedan oponerse á este
mismo obgeto de mis deseos. Este esceso de bon-
dad por parte de V. 1. y R. M. es lo necesario
para Mí, porque no puedo dar pasos algunos por


e




?.;


[76]
mí mismo, sin que ellos dejasen de ser interpre-
tados como un insulto á la autoridad paterna,
estando reducido , como lo estoy al único recur-
so de resistir ( como lo haré con invencible cons-
tancia ) mi castnniento con ninguna otra persona,
sea la que fuese, sin el positivo consentimiento
y aprobacion de V. M. de quien solamente espe-
ro la eleccion de una esposa para n-:í. Esta es la
dicha y la felicidad que espero obtener de V. I.
y R. M. cuya preciosa vida ruego á Dios pre-
serve muchos años. —Escrita y firmada por mi
propia mano y sellada con mi propio sello ea
el Escorial á t r de octubre de r8o7_ Fernando.


Mas en 4 de octubre de 18 ro escribia á Mr.
Barthelemi Gobernador del Castillo de Valancey
en estos términos mi principal deseo es lograr ser
hijo adoptivo de S. M. el Emperador nuestro au-
gusto Soberano. Yo me considero digno de esta
adopcion que será verdaderamente la felicidad
de mi vida, por mi amor y adliesion perfecta á
la persona sagrada de S. M. I. y R. y por mi su-
mision y obediencia entera á sus órdenes ___ Fir-
mado — Fernando.


Quien no se persuadirá al leer estas cartas sin
noticia de la conducta posterior de Fernando,
que en ellas hablaba el corazon del mismo ? ¿ Quién
no creeria que amiba á Napoleon tiernamente ?
En el manifiesto que Fernando publicó despues
de su vuelta á España con fecha de e de Mayo
de x8 td , hace del mismo Bonaparte (por que
ya estaba caldo ) la mas horrenda pintura.
¡ Hombre doble y pérfido corazon de los Re-
yes debe ser franco en todas las situaciones de
la vida : el idioma de la verdad es el único que


[77]
debe existir en sus labios en las adversidades es
cuando deben proceder con mas grandeza de al-
ma : poro esta no es doctrina pira los envilecidos
BORRONES.


(16) Este fué el Baron de Kolly Irlandés,
comisionado por el Rey de Inglaterra , Jorge 3 '
pura sacar á Fernando de su cautiverio y resti-
tuirlo á España con seguridad. Fernando lo de-
lató á Napoleon y el desgraciado Baron fué pre-
so al momento, y hubiera sufrida indudable-
mente el último suplicio , á no haberse destrui-
do entórices el imperio de Napoleon.


( ir) En el periódico titulado La Tercerola
que se publicó en Madrid en el año de 18/3, se
insertaron estos documentos.


(18) Esto es público y notorio ; asf como lo
es tambien que Cárlos 4 dijo muchas veces 15 que
su hijo Fernando era un Príncipe abandonado al
furor de sus pasiones y que sus crímenes no que-
darian impunes sobre la tierra- n Cuando se
cumplirá esta prediccion


(s 9) En los gobiernos despóticos , como di-
ce sabiamente la ley de Partida, vs los tiranos te-
miendo su castigo y su ruina como fruto de sus
crímenes , procuraron dividir el pueblo en cla-
ses , 6 mas bien en facciones que se aborrezcan
y odien reciprocarnente ; olvidándose así de sus
desgracias y los autores de ellas.» De aquí la
brutal y quijotesca manía que ha existido siempre
entre los españoles de aborrecerse y asquearse mu-
tuamente. Desconociendo que el género huma-
no es una sola familia diseminada por el universo,
y desatendiendo los principios de la moral mas
pura , y los preceptos de la sacrosanta religion




[. 78]jesu-cristo, ha llegado á figurarse cierta porcion
de españoles que son formados de una m:sa mas
esquisite que los demos, y que descienden de Adan
antes de que este padre coman cayese en peca-
do. De esta preocupacion y su perstician política,
vienen los pleytos, las rencillas les desavenencias,
1,s rencores, las venganzas , las arbitrariedades,
los ultrajes y los perjuicios , cosas que desapare-
cen en los Estados libres que reconocen y respe-
tan la igualdad legal : y vienen tambien aquellas
bárbaras palabras tan freceentemente osadas por
les es pañoles de 55 á sabe Y. con quien habla ?
¿sabe, V. , quien soy yo ? ¿ Sabe , que
de V. á mí hay mucha diferencia ? ti Coeoze. V.,
á mi familia Pícaro , vil , canalla : peche-
ro, infame, villano, pillo , baragate , meque-
trefe etc. , etc. Mas : 99 le secaré en un cero, le
plantaré 'm par de grillos , le cargaré de hierro
hasta el pezemezO, le pondré en un brete : le pon-
dré una mordaza , le haré dar un caños, le pe-
garé cien azotes, le amarraré como á un Cristo, ha-
ré que mis criados le maten á palos , le pondré
en un castillo , le enviaré á un presidio , lo con-
fundiré" etc. , etc.


Este es el lenguage coman, por desgracie , en
aquellos españoles que hallándose mas plagados
de defectos y de vicios, les corresponde á ellos me-
jor que á ningun otro estas denigrantes palabras.
Tales son, españoles las vergonzosas consecuencias
de habernos fanatizado en nuestra educacion con
las informaciones y pergaminos de nobleza hereda-
da; de modo que 'apenas empeclines á respirar,
cuando sola respiramos 'quijotismo, bostezamos hi-
dalguía, y eruptemos nobleza. El hombre dee-


[79]
preocuparlo y amigo de sus semejantes , ve con
dolor estas mafias ridículas : la Úonetitucioa ira
habla proscripto y ella sola era capaz de exl:11-
guir13. ¡Pero ah dolor 1 Hemos retrocedido al
Gobierno cle,pótico, cauteloso , cereornpide,
en que un jóven por buena aptitud y disposicion
que presente, para que pueda ser admitido en un
colegio, acad,enia 6 universidad.... para que
pueda ser ca,:ete, guardia-marina y hasta para
recibir la capilla de fraile Benedictino, Cister-
ciense , Gerónimo 6 Premostratens'e , se necesita,
( cuando debla bastar una informacion de buenas
costumbres ) talento y méritos personales, que
presente papeles de nobleza y examinar escrupu-
losamente su genealogía, osamentas y podredum-
bres de sus ascendientes : de modo que con el pa-
se 6 visto bueno de los Preceptores, Gefes, Exa-
minadores 6 Prelados, y con las galanas arengas
que los reyes de armes estienden , para chupar.
les pesetas, al pie de los escudos de armas de eses
ilustrísimas genealogías, los pobres muchachas
quedan tan embriagados de su genealogía ; tare
pagados de su alcurnia, y tan ensimismados, que
convirtiéedese desde aquel momento en idólatras
de su nobleza heredada , se cesen superiores á
todos los demos hombres, y los miran con desden
y con menosprecio. Que diferentes ideas se hu-
biern inspirado á los jóvenes bajo el sistema
constitucional ! Ellas hubieren sido análogas ít las
que recibe la juventud Inglesa. Si á un Inglés el
mas infeliz se le ultrajase con semejantes contu-
melias , es bien seguro que el tal Inglés, aun que
fuera el mas pobre y el de mas humilde nacimien-
to contestarla á su agresor de esta manera: cs Se-




[80.i
ñor mio: V. es un duque 6 un general; yo soy
un zapatero , pero puedo todavía llegar á ser lo
que es V. : V. en su alto rango y yo en mi hu-
milde ocupacion, ambos somos miembros de un
estado, y uno á otro nos debemos igual aprecio é
igual respeto. Delante de la ley somos iguales; y
por una misma ley somos gobernados yjuzgados. V.
es un rico y yo soy un pobre ; pero soy un Ingles
y un hombre como V. Si todos fuerámos obispos,
6 almirantes , no habria sacristanes ni tambores;
y si todos fuerámos tambores y sacristanes no
habrin almirantes ni obispos ; pero en una socie-
dad debe haber de todo y unos á otros deben
mirarse como conciudadanos apreciándose y


-res-
petánd,)se reciprocamente. Y por lo tocante á los
insultos con que V. á título de señor don Guindo
me ha injuriado , como no tengo su afluencia ni
vervosiclad, le correspondo con sus mismas desa-
tentas espresiones ; pero en cuanto á sus amena-
zas será otra cosa , porque en atencion á que so-
lamente la ley tiene dominio sobre mí , y solo á
ella debo temer ; á V. que no es la ley sino un
caballero Inglés, insultante , desvergonzado y
atrevido, voy á enseñarle moderacion y crianza,
rompiéndole los hozicos, y desbaratándote las qui-
jadas : para esto me quito la casaca, me arreman-
go la camisa y doy principio con este puñetazo:
Zas. "


De este estilo lacónico y persuasivo del zapa-
tero inglés, podrian usar los españoles , por mas
pobres y desdichados que fuesen, gozando de la
igualdad legal que garantarizaba la Constitucion,
cuando se viesen insultados; pero en la actuali-
dad los grandes , los poderosos estar autorizados


]4[8
para ultrajar de palabra y de obra á los misera-
bles que tienen que sufrir y callar porque son es-
clavos.... porque el fanatismo les ha hecho caer
en una degradacion lastimosa. ; Pobre patria mis!
Estas disenciones hacen tu envilecimiento y des-


precio en los países extranjeros !
Los hombres así menospreciados y abatidos y


que desde la cuna empiezan á obedecer sin répli-
ca y á respetar á los mandarines , y á sufrir los
golpes que á su placer descargan sobre ellos, se
hacen incapaces de virtud, desconocen el amor
á la Patria, y no pueden ilustrarse. z En qué pues
se diferencian de las hordas de salvajes?


El labrador, el marino, el artesano , el jor-
nalero, el soldado , el menestral , el fabricante,
el mercader, el tratante.... todos estos son los que
trabajan y sudan en España, para que se abri-
guen y coman sin trabajar los tantos y tantos pí-
caros que los oprimen y aniquilan á una con eI
Tirano, á título de caballeros hijos-dalgo , y que
tienen ademas el atrevimiento de insultarles lla-
mándoles ese pueblo bajo : esa canalla, esa ple-
be. ¡ Infelices ! Esas clases industriosas y traba-
jadoras se presentan á la vista del hombre jui-
cioso como una manada de ovejas: las clases pri-
vilegiadas son los pastores de estos rebaños , 6
por mejor decir , son los lobos carniceros que los
degüellan, é inhumanos se ceban en su sangre,
y los llevan cuando los place á la lid... que der-
ramen su sangre contra sus propios intereses, co-
mo lo han hecho alucinados para poner el cetro
despótico en las manos de Fernando 7


Ellos para seducir á Ios que llaman pueblo
bajo 6 canalla, en cuya clase entran todos los




í82]
que no tienen dinero, pues es bien seguro que con
cien mil duras ninguno es plebeyo, invocan la re-


: Z pero podrán amarla los qua continua-
mente están disfain ando á su prójimo ? Ellos abo-
gan por la inquisicion, la elogian y aplauden :
¿pero porqué hacen esto ? Porque en la existen-
cia de este tribunal consiste el imponer y aterrar
á todos, para que no se atrevan á oponerse á
sus arbitrariedades, á descubrir sus delitos, ni los
crímenes del gobierno, ni las injusticias de las au-
toridades subalternas ; porque coa la iuquisicion
desaparece la libertad de escribir... mueren las
leyes protectoras de las garantías sociales, se con-
solide y afianza mas y mas el imperio del despo-
tismo y de las tinieblas de quien es la inquisicion
la. deidad tutelar. En este monstruoso tribunal S3
atropella , á la sombra del misterio y con el pre-
tásto de religion á los verdaderos amigos del pue-
blo y de la patria , que son unicarne.nte aquellos
pocos hombres de bien esparcidos en todas-4s
clases del estado : los cuales prefieren el blengeneral al particular suyo ó de su familia. En este
tribunal se amalgaman todos los crímenes , se
aherrojan en mazmorras, atormentan, martirizan
y hasta se queman vivos á los hombres de luces
que defienden los derechos del pueblo ; y se obli-
ga á todos , con rigor bárba ro é inaudito, á ser
racionales solo en la figura, y cristianos solo en
el . nombre. Con la inquisicion, quien se atreve-
rá á .pedir las reformas que con tan grande y co-
nocida urgencia necesita el estado eclesiástico,
cuya crasa ignorancia, desenfreno y relajacion
escede á la del tiempo del rey don Rodrigo ? Quie-
ren la inquisicion, porque existiendo ella puede el


[851
Tirado y sus protejidos distribuir las gracias y
mercedes sin temor á la pública censura : para
que les prostitutas de Madrid sean las distribui-
doras de todas las dignidades eclesiásticas , y de
todos los empleos civiles y militares : para que
los reyes de España sean tan déspotas como el Gran
Turco' : y para que los hombres laboriosos y hon-
rados sean esclavos del rey, de sus favoritos, de
los galillos, de los letrados, de los escribanos, de
los alcaldes, de sus alguaciles , de los -obispos, ca-
nónigos, inquisidores, y abades y hasta del úl-
timo fraile. ¡ Infeliz del labrador ó artesano que
no esté á la presencia de cualquiera de estos opre-
sores con mas acatamiento que en la Iglesia'. ¡ Des-
graciada Patria ! Las clases apreciables existen
despreciadas y comparecen con humildad y aba-
timiento delante de los privilegiados, de los ad-
ministradores de rentas, de sus oficiales y depen-
dientes, y lo que es el colmo de la ignominia, de-
lante de los lacayos, y de las prostitutas de estos
abominables instrumentos de la tiranía ; y si no
lo /lacea asi , no hay hacienda ni vida segura: el
español mas apreciable, el que en su vida ha co-
metido un crímen, se ve de repente sepultado en
l as prisiones en esta pais desventurado, donde ha
dejado de imperar la ley.


Para que, lo que llaman pueblo bajo, pueda
formar juicio de las clases improductivas y gra-
vosas del estado, que son al mismo tiempo las que
le oprimen y vituperan llamándole canalla etc.,
se presentará un ligero análisis de una de dichas
c lases para que se conozca lo que es, lo que pue-


e , y lo que debia ser.
Hay en la Península 9 t. 1.58 clerigos, inclu-




[8L]
sos en ellos los 16.481 curas y 4.929 coadjuta.
res 6 tenientes. Hay 6 r. 327 frayles repartidos
en a. 051 conventos : hay 31. 40o monjas distri-
buidas en 434 monasterios. El resultado es que
existen 183. 000 personas eclesiásticas y 2.485
conventos. Hay 41. 673 templos y añadiendo uno
mas por cada convento, resultan 44. 1 ,58. La to-
tal poblacion de España segun el censo del año
de 1803 consiste en lo. 785. 632 almas : y al
presente por consecuencia de la guerra con Bo-
naparte , y de la emigracion y asesinatos que ha
hecho Fernando 7° es indudablemente mucho
menor. Las poblaciones realengas son 11.91 t :
las de señorío son 13.308, y de estas las 8.539
pertenecen á seculares , y las 4.059 restantes soo
de los frailes y de algunas monjas.


El estado eclesiástico en España con nada con-
tribuye á las cargas y necesidades del estado ; y
por el contrario gravita sobre él con tal opresion,
que hasta los frailes Franciscanos que por su ins-
tituto no poseen señoríos ni fincas , han estable-
cido en algunos pueblos de España , como ley
eclesiástica y acto fundamental de nuestra santa
religion cristiana, la indispensable contribucion
de las cabezas, manos y extremidades de todos los
cerdos que se matasen , diciendo que son para
San Antonio: siendo asi que la mayor parte de
los contribuyentes son pobres, y pobres muy ne-
cesitadas.
ti?


¿No seria pues mucho mejor que se estingnie-
sen los frailes , y se duplicase 6 triplicase el nú-
mero de curas párrocos, cuya institucion viene de
los Ap6stolls , para que pudiesen mas comoda-
mente distribuir el pasto espiritual á los feligre-


[85]
ses ? Aun que los 21.410 curas se aumentase has-
ta el número de 6o.000, siempre resultaba un so-
brante de 162. 575 personas en el estado ecle-
siástico.


Y con las rentas y propiedades de cada con-
vento , no podia establecerse en cada uno de ellos
una fábrica mas 6 menos rica segun la riqueza de
cada convento ? No cabe duda.


É invertidos esos 2.385 conventos en otras
tantas fabricas, y los 62. 575 individuos en fa-
bricantes y artesanos, no serian muy útiles á la
Nacion ?


El hacer reflexiones sobre este punto seria ya
impertinente. Concluyamos esta nota asegurando
á los que tos tiranos y los tiranuelcs llaman pue-
blo bajo, que si no hacen esfuerzos para reco-
brar su libertad, todo el fruto de su trabajo se
repartirá entre los que los improperan y sujetan
como á viles esclavos, y que ellos y sus hijos lle-
varán el sello horrible de la servidumbre por los
siglos de los siglos.


(2o) No solo fué ingrato para los españoles,
sino cambien para los estranjeros que derramaron
Par él su sangre. En el tratado de paz y amistad de
Fernando con Napoleon , firmado en Vslancey
á it de diciembre de ! 813 por el conde de Cefo-
ret y el Duque de San Carlos, se obligó Fer-
nando ( art. 6. ) á hacer evacuar provincias,
Plazas y territorios ocupados por los gobernadores
Y ejercito britanico : y en el articulo 7 " se lee


Siguiente: 13 se hará un convenio militar entre
un comisario español y otro francés , para que sea
8iltla/tanca la evacuacion de las provincias espa-
toias, ocupudas por ingleses ó por los frau-




e


[86}
ceses." Asi paga el diabio á los que le sir


(as) Para esto usó el rey Fernando de una
supercheria may infame ; pero con ella consiguió
sofocar los gritos de leas patriotas. Prometió por
su decreto espedido en Valencia en 54 de mayo
de 131 4 convocar Córtes con 'a posible brevedul
y consagrarse al bien y la felicidad de la Nacion;
pero trascurrieron seis ellas y nunca trató de
cumplir sn promesa, ni pensó mas que acabar con
la Espzfie.


El que prometí es muy cierto;
El que pagaré no es tanto.


Lé aquí el valer que merecen
Palabras de los tiranos!


(az) Una multitud de patriotas que con tri5u-
yeron muy eficazmente á la salvacio5l de la Pa-
tria y á la formacion de las leyes protectoras de
las garantías sociales sufrieron estas penal. Entre
ellos esta n Argüelles, Martinez de la Rosa, e! Con-
de de Tureno, Canga Argüelles, Capaz , Feliu y
otros que al restablecerse el sistema Constitucional
volvieron á la Córre ea triunfo á ocupar los pri-
meros destinos pero desgraciadamente dejaron es
los presidios el patriotismo y adhcsion sisteina
Constitucional y retornaron llenos de terror pá-
nico y convertidos en unos egoistas consumado?.
Abezados al grillete y á la cadena pareciales Ya
que era demasiada la libertad que proporcionaba
el Código á todos los espailo!es y se propusieron
modificarla con las Canearas y veto absoluto
quedando ellos en la cospide del poder. De aqui la,
ruina del, sistema Constitucional como re vota
mas adelanté.


[8.71
(23) Léanse en eornpendi


-o los procedimientos de la
Inquisicion en Cataluiía , segun el resultado de los do'
omentos que hellaron los patriotas en el archivo de aquel
tribunal al tiempo de la restauracion del sistema en
1820.


• C'` CA L^ :71 c - ro c ceca" el 0 010O ‘r:
0) W.• 0, ti .4,1..0 o o C1 I.,


-


Ir; ce c•->
••/. C•1 •-•


c e 6 6 e 0510 N ccs.cel so o
ci 1..sCID 00 C'•: ,r) ce 00 C.


•-•


• • •






• •


• • • •


• • clel---.-ro-..-i-o ...- a o O 0 CO 00 --,1- 0 -..-r v.-,
<1 P '.0 <", c' -," --1- 01 O C-1 --,.- .-. c,1 GO ir c.,:.0L ,cy


,-; 0,) CC CC .+0: tO cc c0 0. 470 r: en ..- ,- CA . . I, 0 n
'-,


N O C>




Zi...:
o


• ,....00007,090000009 E4
.0 N `,71 r• .5 E-1
•-••• 0 0.


1. ,
4 „O






•- •-


1
e E t., r


• Fs, 77; • .•7.• ^`
.;


c: c.. r• 0••• p +C 0 CC
.0 .0C,


- r: • e: •"•, r• CO COkr; ‘..•") 00•
. ......


.24 0.
0q M op ..••n•• n-n eC, O -
tn` CZ


•r, .0
-4,r; n0 +el kr) +(:,
.....


......


4.>
9 9 O! r: o' e <I 1/2


C. CO C"; C cl M Tkr, e C.
.....


,It



<•n••




[88] 4
Obsérvese que las víctimas se disminuian á pro-


porcion que se aumentaban las luces en Europa, y
de consiguiente crecia cl horror hácia este tribu-
nal y faltaban los denunciadores y las víctimas.


(24) Fernando 7 r: llegó á ser uno de los ca-
pitalistas mas considerables del banco de Londres
y estos fondos -aplicaron en gran parte despees del
año 182o á las juntas revolucionarias establecidas
en Bayona y en Cataluña y con ellos y con lo, lau-
silios de la santa alianza perecieron las libertades
patrias en t 823. •


(25) La venta de las Islas Floridas. Asi dispo-
nen los tiranos de sus infelices vasallos ; los
venden cual si fuesen manadas de ovejas. No es
esto decir que los habitantes de las Floridas perdie-
ron con el cambio : al contrario, pasaron desde
el ignominioso nombre de vasallo, al glorioso de
ciudadanos ; se trae á colocacion este suceso para
acreditar la arbitrariedad y despotismo de Fer-
nando 7 °. y para que se vea tambien su buena
fe, recordamos en este lugar que los Estados Uni-
dos del Norte de América dieron entónces á Fer-
nando cien millones de reales y fueron tambien
injusta y vilmente engañados por el mismo Fer-
nando, pues mientras se trataba esta negociacion,
hizo la supercheria de dar una gran porcion
de tierras valdías del territorio de las Floridas,
al Duque de Aragon Bargas y Puñonrostro sus
favoritos.


(26) El tal Chamorro es en verdad un hom-
bre digno de la amistad de Fernando 7 ° El es
un bruto del alma y.... Dios los cria y ellos se
juntan. Por si/S0 les distingue y les dispensa las
mayores confianzas, y les llena de consideracio-


[89J
nes y de riquezas. Era aguador del palacio
de Aranjuez este hombre rtístico, que es el mas
intratable de cuantos pisan la tierra : no sabe
leer ni escribir, pero dirie y aconseja á Fernan-
do. ¡ Asi va ello 1


El Rey marchaba á Francia en 184 : Cha-
morro se colocó en la reja del coche, y le dijo
allá vamos todos : la espresion le hizo gracia á
S. M. y de aquí la elevacien de este salvaje al
distinguido empleo de alcahuete.


(27) Este satélite hijo de un encuadernador de
libros de Valladolid, era un hombre perdido, sin
oficio ni beneficio: lo que se llama un vagamundo
en toda la estension de las palabras. Derribó la
lápida de la Constitucion en aquella ciudad en
1 814, y en seguida llevó él mismo á la horca
á varios liberales. Vino á Madrid, y como era
natural que el déspota le premiase estos servicios,
hétele en el tribunal. de la policía Echebarri con-
tinuando su merito , robando y cubriendose de
oprobio y de execracion y despues de adjunto
con Arjona en la policia y condecorado con el
empleo á Secretario del Rey y gozando un suel-
do de 36, mil reales anuales y manos puercas; y
haciendo mas injusticias que el alcalde Ronquillo.


Las primeras juntas que celebraron los ser-
viles en Madrid en el año 1820 para conspirar
contra la Constitucion, fueron en la casa de es-
te perillan. Allí se resolvió la fuga del Re y á
Castilla para que no prestase el juramento ante
el Congreso Nacional, de lo cual heblerémos
mas adelante.


28) Lozano de Torres era Intendente de
ejército en tiempo de la guerra con Bnonapar-


7




[90]
te. El duque de Wellington le puso pre'.o en Ciu-
dad-Rodrigo , nada menos que por ladron ; y la
casualidad de haber ocupado aquella Plaza las
tropas francesas le libró de haber recibido cua-
tro tiros. Fernando 7. 0 le nombró á su vuelta de
Valancey ministro de Gracia y Justicia; pero las
gracias parece que las hizo todas siendo niño,
pues mientras fué Ministro no se le conocieron:
ni gracia ni justicia , se descubre en los decretos
que espidió. Persecncion á los patriotas , protec-
cian á los pícaros , picardías é infamias; no hay
que buscar otra cosa en todas sus resoluciones.


(29) En el periodico titulado la Colmena
que se publicó en Madrid en 82o, se insertó en
el extracto de esta causa : allí aparecen en su
verdadero punto de vista los traidores á la Pa-
tria, y se descubren los inicuos medios que ejer-
citaron para esclavizarla.


(3o) El hito político de don Domingo Baso,
admito como se ha dicho con Arjona en el ini-
cuo tribunal de la Policia , fué agraciado, por
haber hecho el papel de Judas en esta causa,
con el empleo de Comandante de los resguardos
del cordon del Ebro ; y á dos soldados del re-
gimiento de Marina se les dieron los empleos de
cabos de los resguardos de rentas de Den y de
Granada. Tambien se insertó en la Colmena el
extracto de esta causa.


(31) Richars , 0-Donotí, é Yandiola fue-
ron atormentados por esta causa.


(30) El extracto de esta causa se imprimió
en Madrid á expensas de don Patricio Muore en
1801 , con algunas notas muy interesantes que
punen en claro el mal comportamiento de mu-


[941
ches individuos: los unos por debilidad, otros por
mudos y otros por su adhesion al Tirano. Es muy
interesante para escribir la historia de la revoln-
eloa, el tener tambien á la vista lo que ha dicho
el Zurriago con relacion á Castaños, Villacampa,
corone! O-Doyle , Ruiz Porras y Manzanares.


(33) Una parte de este ejército destinado á
subyugar las Américas , se propuso á restaurar
la Constitucion: los oficiales que tomaron par-
te en esta empresa eligieron jefe al coronel don
Antonio Quiroga.


La revolucion rompió en t .° de enero de 1800
á las ocho de la mañana: Riego fué destinado


. á obras en primer lugar , y á la frente del bata-
llo,' de Asturias que mandaba proclamó en el
pueblo de san Juan de las Cabezas , la Consti-
cion de la Monarquia Española , promulgada
en Cadiz en 18,0 : se restablecieron los magis-
trados constitucionales, y marchó en seguida
para el cuartel general de Arcos , donde pren-
dió al general en jefe conde de Calderon Calle-
ja , y á los generales Fournas, Sanchez Salva-
dor y Blanco, y se dirigió á la Isla de Leon.


(3 1.) El general Quiroga llenó todos sus debe-
res completisimamente : se cubrió de gloria, y su
nombre, á la par de Riego, correrá con aprecio de
generacion en generacion, hasta la edad mas re-
mota, y lo respetarán los hombres y los siglos.
En los documentos siguientes está con; igoada la
mejor prueba que se puede uncir para justificar
el acendrado patriotismo y virtudes cívicas de
este herólco caudillo de los .Libres; su lectura
produce en el corazon de todos los hombres pa-
triotas, el mas vivo entusiasmo por la causa san-
ta de la libertad.




[9!1
Prxlautt del general Quiroget.


cc; SOLDA DOS colocado á vuestro frente
por la eleccion de los oficiales de este Ejér2ito,
me dirijo á vosotros con aquella franqueza que
debe existir entre compañe.os de armas. La Es-
paña se aproximaba á su destruccion , y vues-
tra ruina iba á completarse con la de la Patria:
Vosotros erais destinados á la muerte para li-
brarse así el Gobierno del temor que vuestro co-
raje ie inspiraba, y tomó el pretesro de la con-
quista de las Colonias, que ahora es imposible.
Entre tanto guardaban vuestras familias en la
mes abjecta esclavitud, bajo un Gobierno arbi- •
trario y tiránico que d'spone á su placer de las
propiedades, de la existencia y de la litertad de
los infelices Españoles.


u ¡SOLDADOS! este Gobierno destruirla á
la Nacion y P or fin se destruiria asimismo. ;Es
imposible sufrirlo por mas tiempo ! Por una par-
te violencia y flaqueza; y por otra exitando la
indignacion y el despieJio. Para que& país sea
feliz, el Gobierno inspira confianza, amor y res-
peto.


cc ¡ SOLDADOS ! empeñémonos por nuestro
bita y el de nuestros hermanos de armas cp e
aseguraron la irme, e:/dencia di la Necios con-
tra el pode- de Bol-raparte.•


La empresa es muy gloriosa. ¿liay algun
soldado que se nos oponga ? No. = En las mismas
filas de aquellos que el Gobierno pueda juntar,
hallareis hermanos que estarán unidos con voro-
tros.... que mueran como satélite, de la tiranía é
indignos del nombre Español.


[951
u ¡SOLDADOS! Yo descanso en vosotros:


vosotros sois dignos hi:03 de la Patria : probad
que lo seis: un.o / y disciplina es lo que os res. o-
m'eudo. Yo tendré la satisfacelen de reanmerar
á aquellos que se distin¿uieten: peto si alguno
falta á su de er , probareis que :ro es en vano
la autoridad que se me ha coifiado , y que la
energía de un Gob:erno que prosura el bien, es
siempre superior á la de un déspota.


¡SOLDADOS! la victoria nos espera, y su
resultado es la gloria y los prémios que la Pa-
tria de-rarnará sobre nosotros e t abundancia. "


Cuartel general de san Fernando a Enero
de azo - El general en gafe del ejércitoNac:onal.


Antonio Quiroga.
Manifiesto del ejercito Nacional al Puebla


Espolia.


cc El cuerpo del e:ército Español que en el
principio de este año se declaró por la causa
de la Patria , se juzga obligado á espocer á esa
misma Patria los motivos de su comportamien-
to, los pasos que ha dado , los sentimientos qua
le anima, y la esperanza que ha concebido en
favor de la Na&o:1 de quien ton hijos.


No pre , eado alor• a recordar á la Nacion sus
glorias pasadas emanadas de sus virtudes: la his-
toria las ha trasmitido hasta la presente y los
Españoles del dia por mas que difieran de sus
antepasados, se deleitan en admirar los monu-
mentos que atestan su heroismo. La Patria de
los Pelayos, de los Alfoasos, de los Feruandos,
de los GonzsIes y de los Cides l fue célebre en.




[9 3
el mundo. Su bello terreno, el mas fértil de Eu-
ropa, corresponde á la grandeza de sus héroes.
En armas, artes, legislacion, industria , ciencias
y literatura no tiene ere eavidiar á otras Nacio-
nes y para la mayor parte ha sido objeto de en-
vidia , espejo y modelo.


Invencibles en la guerra, generosas y ama-
bles en la paz, los Españoles • fueron aprecia-
dos por su espHtu, por su inteligencia, profundi-
dad de su genio y sentimientos de honra que es-
tán arraigados en sus cocazones. ¿ Como es pues,
esta Nacion , en otro tiempo la primera de Eu-
ropa, F0 1 9 ha figurado por e


•pacio de tres si-
glos en la clase de estado subalterno é insigni-
ficante ? ¿ Como acontece que la Nacion qmi una
vez gob,, roci la Italia , los Paises Bajos, la Cos-
ta de Africa, empezó á declinar desde el momen-
to en que obtuvo tan formidable poder ? ¿ Co-
mo sucede que la industria , las ciencias, las ar-
tes , no han hecho entre nosotros los mismos pro-
gresos que en las demás naciones ? ¿ Como ha
sufrido hasta el mismo carácter Españo l


tan
ai:eracion á los ojos del observador que


axamina la fisonomía de las naciones ? ¿Como
sucede que en un Pais que en to los respetos de-
bia obrar tan conspicua parte en el mundo , na-
da se presenta die,no de él ?


iñoles! Este problema es de solucion
• ini• fácil. Cuando las Naciones comienzan á ser


paaesion absoluta de un hombre solo, quedan se-
pu'tadas. El deseo de engrandecer al Príncipe,
aeapa de los sentimientos del patriotis-
mo y de la Ijoria: La Eeduccion, las artes , la
intriga , las maquinaciones sórdidas , la traicion


[9 15]
y la pérfidia son otros tantos genios males que
rodean al trono de los Reyes absolutos y arbi-
trarios. La Eepafia ha sufrido estos , males mas
que ninguna otra Necios , desde el tiempo que
Fernando 7.° comenzó á forjar sus cadenas. Los
Príncipes de• la casa de Austria , ribalizarónse
unos á otros, en levantar el edificio de la domi-
nacion del despotismo. Desde aquel tiempo , se
contó este Pueb l o por nada de polícia. Desapa-
recieron los representantes que mantenian sus de-
rechos. El principal objeto de las producciones
del genio era lisongear las pasiones de los Re-
yes é •imbuirlos en la idea de su Omnipotencia.
Nadie se ocupaba de los derechos de los hombres,
ni de la felicidad del Pueblo, con la energía que
da fuerza á los Estados , .ni con las virtudes
que les aseguran su felicidad y su gloria.


En vano se mustrára la nacion grande y dig-
na de su nombre , cuando aquel que daba leyes
á Europa trataba de esclavizarla por medio de
maquinaciones y de perfidia. Los Ejércitos que
llevaron el terror á los otros paises no pudie-
ron sofocar la voz generosa de esta Nacion. La
espada, el fuego, la debastacion, una guerra inau-
dita, todo parecia sacrificio insignificante, cuan-
do se poaia en balanza de la corona insultada.
No contenta de combatir contra los enemigos es-
ternos, trabajó por estirpar los internos, que eran
todavía mas pésimos , por medio de un Gobier-
no que aseguraba la libertad civil y la propie-
dad. La Constitucioa revivió á la Nacion en fren-
te de las bayonetas de sus enemigos. Estas ba-
yonetas desaparecieron de su terreno y la Na-
clon vio entonces el término de su poder y de
sus triunfos.




[961
Mas qué ventajas ha tenido el Pueblo Es-


paii3/ de tantos sacrificios y de tanto valor?
¿ Qué ha venido á ser del edificio que á la ley
erigió », cine debia ser inmortal ? hl Rey que to-
do lo debia á la Nnion, hizo el primer ensayo
de su poder para derribarlo. Los Pad! es de la
Patria que lo erigieron, fueron tratados como c ri-
minales y traidores. Amar y desear un gobierno
que podrá ser el mas útil á la Nacion , fue teni-
do por alta traicion. Las instituciones que fueron
repreMas por los sabios , y que hablan provo-
cado la invasion pasada fueron renovadas con
feria, y exaltadas por la mas detestable hipocre-
sía. laveató- e e: crítnen de desafeccion á la per-
sola real, hasta. entonces desconocido en Euro-
pa. Prisiones, destierros fueron el prémio de los
mas beneméritos á la Patria. Corazones infl u-na-
de-e con sus glorias pasadas, fueron llenos de ter-
ror; y al fuego de la Itibertad que da vida á los
estados , sucedió el corrupto de la e‘7claitud que
lleva consigo por do quiera que exista la muerte
civil.


No : no hubo jamas Nacion tratada con mas
arbitrariedad ni mas insultada. La España clic;
un ejemplo de sufrimiento que espantó á la En-
ropa. Los que deseaban hacer creer que e' en-
tusiasmo contra la Francia habla sido efecto de
supersticiun , triunfaron entonces de los que lo
atribulan á sentimien tos generosos. En efecto ¿Qué
carácter de sospecha no daba esta inaccion ? ¡Qué
repeatinamente se sumergió la Nacion que habia
dado un vuelo tan sublíme ! ¿ Como permitió que
el eiificio que erigiéra con tanto trabajo y tan-
ta sangre , fuese derribado ? ¿ Cómo corrió al


[97]
yugo despues de tantos sacrificios que hizo pa-
ra sacudirlo?


¡ Españoles ! esta fata l inconsecuencia os ha
traido á la presente esclavitud y si no os dis-
pertais os llevará á vuestra ruina. ¿ Pondré an-
te vuestros ojos la triste pintura de estos resul-
tados? ¿Pero qué podré yo decir que vosotros mis-
mos no testimoniéis ? ¿ Quién no se ha de mover
á vista de un gobierno flaco , sin carácter , sin
principios, sin consistencia , que ha dejado la Na-
cion en blanco respecto de las primeras naciones
de Europa ? ¿ Quién dejará de enfurecerse vien-
do la corrupciou de sus agentes y el abuso cri-
minal de su poder en tantos funcionarios públi-
cos , y la conversion de España en un teatro de
robo y saqueo, en el cual los que hacen mayor
presa son tenidos en mayor consideracion? ¿Quién
no ha suspirado á vista de las escenas de cala-
midades públicas, campos incultos , aniquilacion
de comercio, muerte de industria, impotencia de
hs leyes, impunidad de la licencia, violacion de
la seguridad pública triunfo de los delatores,
término á que ha llegado la miseria general, la
corrupcion de la moral y sus necesarias conse-
cuencias; en una palabra la conversion en una
masa muerta de una nacion que deberle haber
Iseidnoci: l ?teatro de actividad, de vida y de opu-


Estos males de que presentamos tan débil
bosquejo, deboraron los corazones de todos aque-
llo s que suspiran por el bien de su Patria. Va-
rios españoles generosos qne abiertamente se le-
` 7 antaron para esterminarlos, fueron víctimas de
la perfidia y de la fuerza armada que se con-




[98]
vierte en azote de las naciones, cuando ellas per-
manecen en la servidumbre. LIS castigos y los
destierros fiero/1 los tristes efectos de sus he.r6i-
cos esfuerzos. Los malvados triunfaron con este
nuevo aumento de miseria. Los buenos lloraron á
sus dignos defensores , y repetian con acentos de
admiracion, de pesar y de afliccion los nombres
de aquellos valerosos é infelices, hombres.


Ei haber faltado aquellos valientes no inti-
mida á los cuerpos del ejército Nacional que se
presenta denonado en un campo de batalla tan
célebre en catástrofes. Las miserias de su Patria
exigian de ellos , la declaracion que pronuncia-
ron de hacerla renacer, 6 de morir en su de-
fensa. El restablecimiento del dozniaio de la ley,
y de poner la Nacion en estado de ejercitar sus
derechos, y de lijar su suerte, fueron los úni-
cos motivos que lo indujeron á levantar el es-
tandarte de la Libertad. Su primor paso, al te-
mar tan resuelta determinacion , fue publicar la
Cc>nstitucion Politica de la ilionarqula Espa-
fhla, objeto de predileccion y de amor para los
que anhelaban por la victoria de tan justa causa.
El resto de sus acciones ha sido conforme á los
dictámenes de tan sagrada regla de comporta-
miento. Los desórdenes y la violencia no hala
manchado la gloria ni el ve lor que distingue á
las tropas de este Ejército. Se ha respetado la
propiedad , se ha asegurado la tranquilidad
blica par medio de la mas estrictica disciplina,
y han obrado corno era de esperar de coraz o


-nes espaíi ales respecto á todas las instituciones re-
ligiosas. Él ejército en sí mismo no ha sufrido mas
alteracioaes que las necesarias para su orgam-


r991
zacion : y tanto el General como el resto de
los gefes , no han tomado otra distincion que
la que antes les estaba permitida. Son apoyos y
baluartes de la Naciera ; pero no sun sus legisla-
dores : su valor, su energía y su vida la han con-
sagrado á la noble ambicion de ser sumisos á las
leyes que imponen equidad y justicia.


¡ Pueblo Español, generoso valiente, y gran-
de! Pueblo llamado por el destino á ser el pri-
mero sobre !a faz de la tierra ! unios á vues-
tros hijos para hacer aquellas leyes que consti-
tuyeron vuestra prosperidad y grandeza. Atreveos
á usar de vuestros derechos, y á restablecer lo que
tan solemnemente promulgasteis. Sin leyes no
puede haber estado : sin leyes sancionadas por
cuerpos representativos, no puede haber Liber-
tad civil, que es el mayor bien que el ciudada-
no puede gozar. Practicad estas virtudes, fru-
to de la inteligencia y de la esperiencia de los
si los : dad al mundo este gran espectáculo, que
espera de una nacion que por doce años tiene á
toda la Europa en movimiento : no permitais
que se diga que la apatía en vuestro elemento, 6
los hierros que os esclavizan son solamente los que
os convienen : unios á vuestros hijos que aspiran
s, l amente á la sublime honra de quebrarlos : sus
armas y su sangre os pertenecen , y cientos de
m illares de almas dependen solamente de vues-
tra vol ornad. En quién pondreis vuestra espe-
ranza ? Que barreras se os oponen ? Quién se
'Pondrá á la voluntad de todo un Pueblo ? Na-
cion Española, si no aprovechas tan feliz ocasion,
si no aprovechas la aurora de tu felicidad, no sus-
Pires, uo te quejes. Los males que sufririas, los




[4 00]
habrias bien merecido : las 14rimss que derra-
marás, no eaci tarjan la compasion de nadie ; y si
por causa de tu abatimiento perdiesem ).3 tan noble
empresa, tendremos la satisfaccion por lo menos
de haberla comadzado: y cualquiera que sea nues-
tra suerte será envidiada de los que respiran
ea la opreston, sienten el remordimiento que so-
ignominia á cada instante les presenta. Co-
m) gefe y encargado del Ejército.


Antonio Quiroga.


Memorial en nombre del Ejército Nacional
al Rey.


Señor: el Ejérsito España!, cuya sangre y sa-
crificios sin ejemplo restitu y eron á V. M. al
trono de sus antepasados, el Ejército Español, ba-
jo cuya guardia la Nacion por medio de sus re-
presentantes sancionó e! Código de leyes desti-
nad as á asegurar para siem iore su felicidad, se
encontró herido en su honra y ardiente patrio-
tismo, en el dia en que V. M. quebrantando las
leyes de la gratitud y de la justicia, puso sus pies
e s este monumento de sabiduria y estimó por
crimen lo que no era m as que la espresion de sus
legitimes derechos.


Seis años no fueron bastantes para apIssar
sentimientos tan profundamente gravados en sus
corazones. Varias conm )ciones tentadas en di-
ferentes tiempos y en varios lugares , de-
bían haber eoavencido á V. M. de que la Na-
cion participaba de estos sentimientos, y que
la persona de V. M. fué algun dia objeto de ge-
-neral ad >racion , dejó ya de serlo, el sistema


(I 01)
de gobie rno que ha adoptado, y las personas que
os cercan son indignas de vuestros beneecios y
confianza. El genio del mal hizo callar en to-
dos ellos , sentimientos tan generosos y respeta-
bles : y los valerosos que os levimtaron , vinie-
ron á ser víctimas de cortesanos Inicuos, que nun-
ca perdonan á los que rasgan el velo , con que
ellos engañan á un populacho ignorante y fá-
cil de seducir.


Con todo , esta suerte tan terrible no em-
barazó á los cuerpos de la espedicion ultrama-
rina que levantaron una voz dulce á todos los es-
pañoles que conocen el valor de este título. Es-
ta voz, Señor , ellos la levantaron y declararon
estos, sus sentimientos de una manera la mas so-
lemne en primero de enero. Nada les hará ser
perjuros y la última gota de sangre es sacrificio
demasiado pequeño respecto á la importante em-
presa que acometieron. Restituir la Comtitu-
eion de España, este, este es su objeto. Decidir
tambien que esta Nacion legitimamente repre-
tent:ida es solamente la que tieLe derecho á oler-
les leves ; este es el obis,eto á que aspira con el
mas puro ardor y con los acentos del mas pu-
ro entusiasmo.


Los progresos del entendimiento en Europa,
> a no permiten, Señor, que las naciones sean
gobernadas como si fuesen posecion absoluta de
les reyes. El pueblo requiere otras instituciones
y un gobierno Representativo, que es lo mas ay . á-
lego á las grandes sociedades cuyos miembros no
te pueden juntar individualmente para la forma-
ein de. las leves. Rste géneeo de gt bienio que
adoptaron las naciones mas sabias , es el que ro-




(1 02)
dos desean. En una palabra, el género de go-
bierno que ha costado tanta sangre, y del cual
ninguna nacion es mas digna que la España.


¿ Porqué será esta Nacion, la mas favoreci-
da por la naturaleza, privada del mayor bene-
ficio que puede concederse al hombre ? Porqué
merece ella menos la libertad civil , que es la
que solamente vivifica al cuerpo del Estado ?
Perjuicios antiguos , sstemas adoptados por la
violencia, prerrogativas frívolas y vanas que
emanan solamente de un falso orgullo y pérfi-
das sujestiones de validos que solamente adulan
para oprimir... estos son ecsactamente los moti-
vos de violar las leyes de la rezan , de la hu-
manidad y de la justicia. Los reyes pertenecen
á las naciones, y son reyes porque las naciones
así lo quieren. Estas son verdades incontestables,
y si los gobiernos afectan principios opuestos, usan
del lenguage, • del engaño y de 1 t hipocresía, y
propagan el error y la ignorancia.


Yo deseo y esta es la intencion del Ejército,
que tal lenguaje debe de existir. La Nacion par-
ticipa de estos sentimientos , aunque la costum-
bre habitual á la obediencia y el temor tienen
reprimidos sus deseos. Con todo este embarazo
se deshará en el momento en que observen lo
que los valerosos han hecho. El país que ellos
ocupan resuena con aclamaciones de alegría,
viendo proclamado otra vez su Código. Estos'
gritos se esparcirán por toda la Península , que
volverá de nuevo á ser el teatro de la virtud y
del heroismo y si tan dulces esperanzas no se
reatizasen, si el cielo no nos fuera propici • á
tan ardientes deseos, ellos no juzgan que serán


(1 03)
del todo vanos sus trabajos y morirán pbr la Li-
bertad. Esta suerte les parece preferible al vi-
vir por mas tiempo bajo las leyes y caprichos de
los que seducen el corazon de V. M. y lo llevan
á su infalible ruina. _a Cuartel general de san
Fernando 7 de enero de aso.


Antonio Quiroga.


Proclama del General del Ejército Patriota
á los habitantes de la ciudad de Cádiz.


; Cádiz ! Cádiz ! ¿Donde está tu patriotis-
mo ? ¿ Donde están las virtudes cívicas que te
distinguian ? ¿Eres tú aquel gloriosa asilo á don-
de pocos años hace, halló la Naden refugio, en
donde se promulgaron aquellas leyes que nos de-
bian hacer para siempre felices ? ¿ Cómo es que
el recuerdo de tan grande acontecimiento no
te inflama? ¿ Ves tú con indiferencia los glo-
riosos destinos que te esperan ?


¿ Por qué no te mueves ? ¿ la Libertad está
á tus puertas y todavía duermes ? Tu oistc su
generoso clamor y estás parada. La Constitucion
ha sido proclamada en la ciudad de san Fer-
nando ¿ y no te inspira este ardor ?


¿ Que fruto esperas coger de apatía tan fa-
tal como incomprensible ? ¿ Que escusa podrás
dar al mundo al contemplar tu letargo é indo-
lencia ? ¿ Que fuerza te oprime? que bayone-
tas sofocan tus f enerosos gritos ? ¡ Ah ! tal mis-
ma estás forjando tus cadenas y repeliendo el
brazo que los hijos de la Patria te ofrecen :


¡Cádiz dispiez ta t y vé el abismo á que te




(-1 0)0
conduce tan fatal sueño: levantete y atrevéte
ser libre. Cádiz en esclavitud , en el refugio de
la humillacion y de la miseria: Cádiz libre ,
rias la Reina de las ciudades opulentas; levante-
te , quiebra esos flacos estorbos que te atan: únate
con nosotros abre tus puertas á los que tiene ju-
rado morir por la Libertad civil de su Patria y
despues de seis años será otra vez tu suerte, res-
pirar el puro libre y delicioso aire de Libertad.


Cuartel general de san Fernando tt de
enero de t8ao.


Antonio Quiroga.
Proclama al ejercito Nacional.


¡ Soldados ! Vuestro general está satisfecho
de vosotros. Yo conozco que el' mejor espiritn
reina en todos los cuerpos, y que despreciais las
ridiculas promesas que os hace el gobernador de
Cádiz en sus insidiosas proclamas. Vosotros ya
sabeis que esta gente promete mucho cuando es-
tá en dificultades, y que despues os enviarán á
América para morir allí : este es el premio que
os darán.


En nombre de la Necion como dirijo á voso-
tros en otro lenguaje. Ya sabeis que todo Espa-
ñol está obligado á servir á su Patria, y que
ésta despues de cierto tiempo debe recompensar-
te ios servicios. El soldado que haya acabado de
cumplir su tiempo debe ser remunerado y tiene
derecho á futuros medios de subsistir, deberáse-
las enseñar que tienen una Patria , recibiendo
de ella una propiedad que le ligue á su terreno.
Conforme á estas ideas yo me empeño y en istl:n -
bre de la Patria os lo aseguro:


[4 05]
1.° Que dentro de dos arios todo el ejérci-


to en actual servicio será licenciado.
a.° Que á los soldados que probaren ocho


años de servicio se les dará diez fanegas de tier-
ra valdía junto á la ciudad á que pertenecieren
y mil reales de vellon : á los que hubieran ser-
vido 15 años, 15 fanegas y mil y quinientos rs.
á los de ao de servicio 84 fanegas, y por esta
Orden á los que tuvieran mas tiempo.


3.° Que este beneficio se estienda á todos
los soldados que abrazaren la causa de la Patria
uniéndose al Ejército Nacional , á fin de contri-
buir á su Libertad , y que ayudaren á esta em-
presa en otros puntos.


4.° Que todas las viudas, madres é hijos de
todos los que murieren en la presente campaña
gozarán plenamente del mismo beneficio.


¡Soldados! tened confianza. Hasta aquí ha-
beis sido un modelo de valor, de disciplina y de
entusiasmo : Bien pronto cogereis los frutos de
vuestros trabdjos.


Las tropas que todavía no han estado con
nosotros , en breve se os unirán, como ya lo han
hecho las que han podido: uníos por tentó, no-
sotros salvaremos á nuestra Patria y mis pro-
mesas serán cumplidas. Cuartel general de
san Fernando 15 enero de 18e,o.


Antonio Quiroga.
Proclama del General del Ejército Patriota


á los cuerpos de 111ilicias.
¡ Milicia provincial! á Contra quién tOrnais


las armas ? Vosotros que sois destinados á la de-
fensa de vuestro pais natal.... soldados paicfi-


8




{40G]
cos que solamente debeis desenvainar la espada
contra un enemigo invasor... Vosotros conside-
rados por todas las naciones corno la milicia de
la Libertad... Vosotros ciertamente no venis á
hacernos la guerra , siendo vosotros sOldados es-
pañoles; que seguimos las mismas banderas y
que estamos defindiendu vuestra causa y la de
vuestras familias.


¡Milicianos ! estamos seguros de que vosotros
ro teneis otro obgeto á la vista sino asegurar
la felicidad de España, bajo aquella Constitucion
-ya jurada por toda la Nacion. No nos levanta-
mos contra la religion de nuestros antepasados,
ri contra la propiedad, ni contra los legítimos
derechos del Rey. Preguntad á las ciudades ea
que vivimos, y ellas os dirán cual ha sido nues-
tro comportamiento : leed nuestros manifiestos,
y ellos os declararán cuales han sido y son nues-
tras intenciones.


¡ Milicianos ! armaos, uníos á nosotros. Aquí
en el campo de la Libertad, os esperan vuestros
compatriotas con los brazos abiertos, vuestros
amigos y tal vez vuestros parientas. 1-a Milicia
provincial siempre participó de las honras del
ejercito : venid á librar vuestra Patria , y ase-
gurar




e•
la felicidad de vuestros hijos , y á poner


fin á un cisterna inicuo y opresivo de contri-
buciones, y bien pronto volvereis á vuestros e .


j
trebejos, y á vivir en paz , bajo un gobierno
usto que en vez de oprimiros os protegerá en .'


vuestra noble ocie-. acion de cultivar la. tierra li-
bre de España. __ Cuartel general de san Fer-
nando 15 enero :le aeo.


Antonio Quiroga.


.1


(4 07)
(3$) En aquella época se expidieron


guientes documentos.


Proclama del Gobernador de Cádiz.


Los enemigos del órden ponen en práctica
todos los medios para apartaros de vuestros de-
beres. Sabiendo que nada es capaz de alterar la
fidelidad de esta ciudad han recorrido á la abo-
minable maniobra de mandar pérfidas proclamas
y escritos, á personas generalmente reconocidas
por fieles vasallos del Rey. Los que recibieron
estos papeles inmeJiatamente me los entregaron,
mas como puede haber otros que intimidados, no
se atreven á hacer lo mismo , yo les amonesto
y ordeno, que inmediatamente entreguen todos
los papeles de tal naturaleza. Pueden estar se-
guros de que no serán en manera alguna,,Inco-
modados ; pero si á pesar de esta órden los guar.
daren y fueren hallados, serán , castigados Co-
mo reos de atta traicioa. — Cádiz 54 enero de
18zo.


Prolama del Gobernador de Cádiz.


El Gobernador se halla penetrado de grati-
tud por el fiel y heráico comportamiento de
habitantes de esta ciudad, en el deplorable' , aseen-.
tecimiento de la noche pasada : un pequeño
po de personas facciosas capitaneadas por el co-
ronel Nicolás Santiago Rotalde que era jefe de
dia en la Puerta de Mar , abusando de la con-
fianza del Gobierno, de eaba perturbar la tran-


los si-


A. R. Yuldes.




(4 08)
guindad pública de esta noble é ilustre ciudad.
Sabeis que se ha frutado su conspiracion, me li-
sonjeo de que semejantes discordias no se reproduci-
rán otra vez. Mas debeis tambien saber que se-
tuejantes crímenes no pueden qtedar sin castigo,
y que haciendo uso de mi autoridad, estoy obli-
gado á adoptar las medidas mas enérgicas, á fin
de que todos los demas hombres buenos gocen des-
canso en sus casas y familias. Por tanto, habien-
do huido dicho Rotalde para evitar el castigo
que merece, ordeno que si descubren la perona.
de este rebelde, me la entreguen , ó digan el lu-
gar en donde se halla. Al mismo tiempo os re-
c-omiendo que evizeis todas las juntas, tanto en
ra ciudad corno fuera de ella : si alguna se ve-
rifica, mando que sea dispersada por la fuerza
de las armas: Habitantes de Cádiz: agradezco
vuestro comportamiento y espero que de aquí
adelante obrareis de la misma manera, corres-
pondiendo á la


• estimacion y al efecto que os ten-
go. Cádiz 25 enero de 182o.


4. R. raldes.


Bando del Gobernador de Cádiz.


. En el suceso que tuvo lugar en el o4 del
corkente se vieron varios ciudadanos armados
cite segnian el Vertido de los sediciosos , come-
tiendo desórdenes. Estas


- personas no quieren cor-
reSpein scier al efe.oó que les tengo , y abusando-


. de' mi-- bondad continuan sus • exesos : ya no es
posible evitar el rigor de las leyes y para ha-
cerlas respetar, orde lo Que en ning un lugar pú-
blico set permitido que se junten m as de tres


(109)
personas ; luego que escedan de este número se-
rán dispersades l or la fuerza. Ninguna persona
de cualquier sexo podrá parar en las tabernas
con el pretexto de beber, y saldrá de ellas lue-
go que hubiera hecho sus compras. Se quitarán
de las tabern is todas las mesas y bancos. Los ca-
fés se cerrarán al anochecer y no será permiti-
do á persona alguna quedar allí ; siendo los due-
ños de los cafés responsables por la infraccion
da esta medida , que será igualmente aplicable
á las casas de juego establecidas con licencia.


Ademas ordeno bajo la pena de muerte, que
todos los habitantes que tuviesen armas blancas
6 de fuego pertenecientes al Rey las entreguen
á les comisarios de sus respectivos barrios den-
tro de a¢ horas de la publicacion de este edic-
to y los dichos comisarios bajo su responsabi-
lidad, cuidarán de que se ejecute la presente 6r-
den que les tengo previamente comunicada, en-
cargandoles de registrar las casas de sus respec-
tivos barrios cuando fuere necesario y para ellos
les daré el ausilio que pidieren.


R. 4. Paldes..


(36) Obedeciendo las órdenes de Fernando
7.° que solamente respiraba sangre y asesinatos
se perpetró en Cádiz en diez de marzo la mal-
dad mas inaudita. general Freire llegó á Cá-
diz ea nueve de marzo y en el mismo din pá-
b:icaron los diarios de su órden, que ea el si-
guiente se proclamarla la Constitucion. Para es-
t o mandó construir un tablado ea la Plaza de
San Antonio convidó á la municipalidad y á las
Perzonas principales y escribió al gimeral Qui-




[4111
[11


roo que estaha en la isla de Leon , para que
concurriese á solemnizar aquel acto. Quiroga
contestó disculpándose de asistir al convite que


le hacia, diciendo que las ocupaciones del Ejér-
cito no le permitian por entónces. dejarlo.


Al siguiente dia apareció la proclama del ge-
neral Freire que decia asi_


,, Habitantes de Cádiz : vuestra decidida vo-
luntad se ha pronunciado á favor de la Consti-
tucion Politica de la Monarquía Española
Este acontecim'e"to nos ha causado lágrimas y
ha producido desórdenes que raras veces dejan
de acompañar á las convulciones políticas. El
pueblo de Cádiz ha dado en esta ocasioa una
prueda de su buen sentido y de las virtudes que
forman la base de su carácter. Pero la extraor-
dinaria naturaleza de las circunstancias en que
nos hallamos, nos obligan á tomar medidas para
asegurar el órden y prevenir los malos designios
de individuos que desean introducir el monstruo de
la anarquía en medio de los virtuosos ciudadanos
y verdaderos amantes de la Patria. La forma-
cion de un cuerpo municipal Constitucional debe
ser la primera de estas medidas. Los individuos
que lo compusieron en 1214 fueron nombrados
por vuestros votos: vuelvan pues á tomar el car-
go de la seguridad de vuestras personas y pro-
piedades y de aquí el órden público que es tan
importante mantener.


Habitantes de Cádiz ! Desde este momento
goiais de una repre..?entacion Constitucional : cc-
Sea los actos que teneis desaprobados por el Có-
digo .que teneis proclamado. Espíritus tranquilos:
poned de vuestra parte 'sil olvido todos los &Hos


pasados y no se oiga otro grao entre voso-
tros sino el de viva la Nacion — Cádiz


so


marzo de 182.o. Manuel Freire.


Se fijaron por las esquinas copias Impresas de
estas proclamas y al medio dia se juntaron las
tropas en la Plaza Mayor y un grande concur-
so del pueblo lleno de placer, de entusiasmo y
de júbilo por creer que hablan llegado al ca-re-
so de recobrar sus derechos; pero cuando el
lox anunció la hora determinada, en vez de dar-
se principio á la ceremonia preparada, la tropa
bizO una descarga sobre el pueblo y comenzó
una matanza general sin distinguir hombres, mu-


eres ni niños. Quinientas personas quedarong
muertas y hubo un número muy considerable de
heridos. Despues empezó la soldadesca el robo
y saqueo de las casas , cometiendo cuantas atro-
cidades pueden imaginarse, esta terrible escena
duró hasta la noche.


El gobernador de Cádiz Valdes , el coman-
dante de las tropas Campana y el, general en
gefe Freire, fueron acusados de actores de este
asesinato con el obgeto principal de aprender
con este engaño la general Quiroga lo que no
lograron porque él no quiso 6 no pudo ir á Cá-
diz en aquel dia.Como prueba de la maldad de estos gefes in-
semmos la árdea del siguiente dia t t de mar-
zo, e Viva el Rey ! ¡Viva


la religion! 5 .5 Hon-
ra á las valientes y leales tropas de la guarni-
clon de esta plaza, que en el pasado aconteci-
miento del dia de ayer, merecieron todo el re-




[1 11 2]
conocimiento de vasallos del Rey y el del Ge-
neral que tiene la honra de mandarlas.


5: En nombre de S. M. ofrezco á los gefes
oficiales y domas individuos de la guarnicion
mis mas ardientes agradecimientos por su brillan-
te comportamiento militar


Campana. n
Una prueba de que estos asesinatos se ejecu-


taron por órden del Rey, es que en el mismo
dia como se dirá despues se trató de engañar á
Riego por el general 0-donell : y otra es que
en el mismo dia el regimiento de Valencia que
estaba en Jerez de la Frontera se pronunció
tambien contra la Constitucion y lo mismo hi-
cieron cuatro cientos dragones del regimiento
<1,1 Rey y otros tantos zapadores del regimien-
to de Soria , que despues obraron en sentido
opuesto. Estos cuerpos se insurreccionaron , en-
tónces quisieron pegar fuego á la ciudad, dar
muerte á sus oficiales y marchar contra el re-
gimiento de Valancey ; pero la firmeza del co-
ronel de dicho regimiento , Montalvo Tabares, y
su disciplina, salvó á Jerez, de desastres igua-
les á los de Cádiz.


Si los autores de tales iniquidades fueron al-
tamente criminales y se hicieron dignos del mas
atroz castigo, mucho mas lo fueron todavía los
que los dejaron impunes.


(37) De la Isla salió una coluna mandada
por Riego , compuesta de mil y doscientos com-
batientes, que llegó á Algeciras ; publicó la Cons-
ritucion depuso las autoridades Constitucionales
y sustituyó las populares.


En consecuencia de esta entrada de Riego
en Algeciras, el general don José 0-donell, de-


[415]
ciará bloqueado este Puerto, lo que fué notifi-
cado al gobernador de Gibraltar, oficialmente en
7 de febrero.


(38) La col una de Riego salió de la Isla entonan-
do el himno siguiente.


CORO.


Soldados la Patria
Nos llama á la lid,
Juremos por ella
rencer d morir.


Seremos , alegres,
Valientes , osados,
Cantemos soldados
El himno á la lid:


A nuestros acentos
El orbe se admire
Y en nosotros mire
Los hijos del Cid.


Soldados , ete.
Mandamos el hierro


Qoe el timido esclavo
Del libre y del bravo
La faz no osa ver:


Sus huestes cual humo
Vereis disipadas,
'17 á nuestras espadas
Fugaces correr.


Soldados, etc.l tl mundo N in nuncailagS
ran :rinde en valor:
1\.C..sonvlionieolsq,vieclirfiufleasmoando


lu epaetiascritára Riego
el amor.
Soldados, etc.


i Honor al caudillo'.


¡ Honor al primero
Que el patrio aceroOsó fulminar !


La Patria oprimida
Ovó sus acentos ,
Y vió sus tormentos
En gozo tornar.•


Soldados, etc.
Su voz fué seguida ,


Su voz fue escuchada,
Tuvimos en nada
Soldados morir :


Osados quisimos
Romper la cadena,
Que de afrenta llena
Del bravo el vivir


Soldados, etc.
Rompismola amigos


Y el vil que la lleva
Si imano se atreve
Su frente mostrar


Vosotros ya libres
en hombres tornados


Sabremos Soldadosj
Su infamia borrar.


Soldados etc.
Al arma ya tocan ,


Las armas tan solo




AI c-iu-h-,1 v al dolo
Podeá:l abatir:


Que tiemble 1 ¡ que
tiemble


; Que tiemble el malvado!
Al ver al soldado
La lanza esgTimir.


- Soldados etc.
La trompa guerrera


El eco da al viento;
De horrores sediento
Ya ruge el canon:


Ya Marte sañudo


[4,14]
La audacia provoca ,
Y genio se invoca
De nuestra Diaeion.


Soldados etc .
Ya veis á los siervos


Volemos soldados
Los veis aterrado s


Su frente humillar ?
Volemos que al libre


Por siempre ha sabido
Del siervo vendido
Vencer v triunfar


Soldados etc.


(39) Eran todos espafioles todos abrigaban
patriotismo, deseaban romper las cadenas y an-
siaban la ocasion de unirse al ejército liberta-
dor. Asi los esfuerzos de los geles sectarios del
gobierno absoluto fueran vanos para moverlos
contra la coluna de Riego , con el ímpetu del
traidor que lo habla hecho si hubieran tenido
diferentes ideas.


(4o) El general Freire qué habla recibido en
Sevilla el nombramiento del Rey para general
en gefe, llegó entonces con seis mil hombres al
Puerto de Santa María. El general 0-donell se
apostó en Alcalá de los Gazules adelantando a"
ganas partidas hasta Puerto Real y Coníli
ro como diariamente se notase el disgusto de las
tropas que mandaban estos generales, Fr&re no
se atrevió á ponerlas ea contacto con las de los
Patriotas.


La coluna de Riego salió de Algeciras con
direccon á Málaga y entró en aquella ciudad
en t8 de Febrero sin oposicion , escepto una es'
caramusa' que tuvo su retaguardia en Marbella'
con una partida del general 0-donell. En 1V13"


[115]
Iaga fueron depuestas las autoridades y nom-
bradas otras en su lugar conforme á la Consti-
tucion.


Riego aumentó su fuerza en Málaga hasta
cuatro mil hombres y con ellos salió para Gra-
nada.


El brigadier Nebot , que en la guerra ante-
rior se habian distinguido mucho con el nombre
del Fraile, se puso al frente de cuatro cientos hom-
bres armados en Valencia, para unirse á Riego.


Los habitantes de Alcantarilla y Algeciras
entraron en Murcia proclamando la Constitucion
y el primero que se prestó á j urarla fué el Obis-
po. El Coronel de las milicias de Murcia marchó
á Cartagena con quinientos hombres y se pro-
clamó tambien la Constitucion en esta ciudad. La
Artillería destinada á sostener lo que los servi-
les llamaban derechos del Rey volvió sus pie-
zas contra el palacio de la Inquisición que era
uno de los obgetos principales del odio general.


En el norte de España comenzó la revolu-
cion ea zo de febrero : el cuerpo de oficiales de
la Corufia presidida por el comandante de Ar-
tillería se presentó al capitan general Venegas,
manifestándole que la guarnicion estaba resuel-
ta á proclamar la Constitucion, y que si él se
oponia quedaba preso en el acto. Venegas adop-
tó este último estremo.


Entonces se proclamó la Constitucion, se for-
m6 una Junta de gobierno : se creó un cuerpo de
dos mil hombres llamados Granaderos Nacio-
nales, que alternaban en el servicio con la tro-
pa de línea.


Las personas que el Pueblo nombró para lb




[4 1 6]
Junta de gobierno fueron las siguientes: don Pe-
dro Asar, que babia sido individuo de la Re-
genci.i en tiempo de las Cár tes y existia aun pré-
so como reo de Estado : don Felix Acebedo, ge-
neral de las tropas nacionales en Galicia : M.
Bustos, procurador del Rey en la Coruña : El
marques de Villadares , don Manuel Latre : don
Antonio Vilavega , negociante: don Cárlos Es-
pinosa, coronel de Artillería y don Joaquin Freire.


El general Acebedo destacó inmediatamente
un regimiento de Infantería, con algunas pie-
zas de artillería para las fronteras de Castilla.


Coa la mayor rapidez imaginable se esten-
dió la revolucion por toda la costa hasta Santa-
cln., Asturias, Vigo y fronteras de Portugal ; en
términos que apenas habla en estas Provincias
un lugar considerable que no se hubiese -procla-


. mado la Constitucion.
Mientras esto suceda: el general Mina que


se hallaba refugiado en Francia, volvió para
España y entró en Navarra en as de febrero.
inmediatamente reunió un cuerpo de Patriotas
en el Valle del Bastan y partió con quinientos
hombres á apostarse en Orbaiceta, donde empezó
á organizar su ejercito. Reunió hasta dos mil
hombres, se apoderó de la fundacion de Arti f leria
de Aizabal , distante cuatro lenguas de San Juan
del Pié del Puerto. En seguida se dirigió á
Pamplona , intimó al Gobernador de aquella pla-
za el conde de Espeleta en t r de marzo que pro-
clamase la : el G doernador contes-
tó que esto era lo in:smo que él deseaba : entró
el general Mina con sus tropas en la ciudad y
se proclamó y juró la Constitución con genera/
aplauso.


[1 I 7]
En so de marzo el general Castaños, for-


zado tambien por los principales habitantes de
Barcelona, publicó la Constitucion, cuya cere-
monia se hizo con la mayor tranquilidad y con
regocijo de todos sus habitantes. El pueblo se di-
rigió á la Inquisicion ; dió libertad á los presos
que allí habla : les libros , los . papeles y les
instrumentos de tortára de aquel sanguinario tri-
bunal fueron destruidos. Las demas poblaciones
de Cataluña siguieron el ejemplo de Barcelona.


La junta de Gobierno que se cre ó en Bar-
celona depuso de su empleo al general Castaños,
y nombró para substituirle al general Viliacampa.


El conde del Abisbal 0-donell fué nombrado
por el Rey para escoltar á la frente del-regimi-
ento de infanteria Imperial Alejandro , un com-
boy que salio de Madrid para el general Freire.
Se despidió del Rey besandole la mano y decla-
rando que derrernaria hasta la última gota de
sangre en su servicio; pero lo que hizo fué pu-
clamar la Constitucion en Ocaña que solo dista
de Madrid nueve lenguas.


Mientras esto suctdia el general don Jo s e O-
dorell persegui2 la coiuna de Riego y escribió á
este un oPcio anucianddle su determinacion de
declararse per la Constitucion y convidandole
para fraternizar con su division. El heroe Riegó
aceptó esta oferta que creia lacha con la mejor
buena fé , y fué é encontrarse con la division de
O donell con fuerzas muy inferiores á les que es-
te nandaba; pero ¡ cual fué sú admiracien al
verse cercado con su pequeña partida por fuer-
ces muy numerosas que le atacaron en coluna
zerrada! Riego se vid entonces obligado á abri-




-1


a


[1 -1 Sj
se pasó á la boyo:leca perdiendo gran parte de
su tropa, pero, aun que result aran muchos muer-
tos, heridos y prisioneros, al fin consiguió rom-
per aquel infame lazo que se le habla trazado por
árdea de Fernando 7.° Los prisioneros de la co-
luna de Riego fueron remitidos maniatados aí Se-
villa donde esperaban concluir sus dial en patí-
bulos en obsequio de su amada Patria : pero in-
mediatamente que llegaron á Sevilla fueron pues-
tos en libertad obsequiadas y aplaudidos por
aquel Pueblo que tambien había ya jurado la
Constitucion. Este engaño de 0-donell á Riego
fué el lo de marzo. Aqui reflexionará el lector
la analozia de este suceso con ocurrencias de Cá-
diz en el mismo dia y encontrará una prueba de
mis ascertos de que todas estas iniquidades fueron
obra del Rey.


Cuando el conde del Abisbal se declaró en
°caña á favor de la Constitucion se adhirieron
al mismo partido sus tres hermanos : á saber:
don Alejandro 0-donell coronel del regimiento
Imperial Alejandro, don José que era el que, co-
mo se ha dicho, perseguir á Riego y trató de ase-
sinarle y don Cárlos que era espitan general da
Castilla la Vieja.


Entonces tambien el regimiento de Málaga''
que mandaba el distinguido patriota Riquero
que estaba de guarnicion en ciudad Rodrigo,
proclamó allí la Constitución y marchó á Astor-
ga con el mismo designio.


Se llegó por fin al caso de que todo el ejér-
cito que mandaba el general Freire se decla-
rase por la Constitucion.


El general Ballesteros estaba entences des-


[11 °1
terrado en Valladolid, y fué llamado para que
tomase el mando del ejército. Ballesteros vino
entonces á Madrid , y le manifestó al rey que el
estado de las cosas era tal, que si él tomase el
mando del ejército se verla en breve tiempo obli-
gado á marchar contra Madrid, y á proclamar
la Constitucion para seguridad de su real per-
sona : así que recomendaba á S. M. que se sal-
vase, pues aun era tiempo, aceptando la Cons-
titucion , pues no le quedaba otro partido mas
que el de adherirse á !os votos de los que ape-
llidaba insurgentes y eran unos verdaderos hijos
de la Patria. Haciéndolo asi V. M. ( coaciu
Ballesteros ) como que tiene mas poder que nin-
gua otro individuo , está mas en aptitud que
nadie de hacer el bien de una nacion á quien
dele tantos sacrificios.


A pesar de que las circunstancias eran tan
críticas, no quiso el Rey jurar la Constitucion
y ere] 6 engañar á los patriotas y desarmarlos
con un decreto que se publicó en la Gaceta del
6 de marzo, por el cual p: evenia al Consejo
que convocase Córtes. Ya no era tiempo de que
estos engaños y promesas pudiesen alucinar al
pueblo Espaii.A.


La guarnicion de Madrid de acuerdo y en
unioa con el pueblo tomó entonces una aptitud
demasiado seria é imponente y pusieron al Rey
en conflicto en el dia 7. El general Balleste-
ros hizo entonces á la Patria los mas interesan-
tes servicios. A la par que dirigia los planes de
los patriotas, obraban tambien con su acuerdo
todos les jefes y guarnicion de Madrid. A la ca-
beza del pueblo impaciente por recobrar su li-




20]
bertad marchó á Palacio, habló al Rey con la
mayor claridad y energía, y obtuvo su allana-
miento á jurar la Constitucion.


Cuando haga mencion la historia de esta
brillante jornada de Riego, no debe olvidarse
de un suceso que cuidadosamente se h3 procu-
rado ocultar, y es el siguiente. El teniente co-
ronel esto :ces don Evaristo san Miguel , jefe
del estado mayor de la coluna, envidioso de las
glorias de Riego , y devorado por el ansia, de
figurar , trató en Belinez de asesinar al héroe
para quedarse con el mando en jefe. Algunos
oponian que abrigaba la idea de rendir las ar-
mas ante el tirano opresor y conseguir su gra-
cia por el mérito de tan execrable maldad. Rie-
go descubrió feliz.nente este inicuo proyecto,
destruyó los planes de San Miguel, le puso en
prision y pensó en hacerle expiar su críman en
un patíbulo ; pero los recuerdos de su antigua
amistad con este monstruo, la interposicion de
algunos amigos y sobre todo los sentimientos be-
neficos dei , aima generosa del héroe, le obliga-
ron á perdonarle y á procurar que no se hicie-
se público tan escandaloso atentado.


(4 t) Individuos de esta Junta.
El Eminentisimo señor cardenal de Borbon


arzobispo de Toledo.
El Teniente general D. Francisco Balle,teros.
El R. Obispo de Valladolid de Mechoacan.
D. Manuel Abad y Queipo.
D. Manuel Lardizabal.
D. Mateo Baldomeros.


p 211
D. Vicente Sancho, coronel de iernieroti.
D. Francisco Queipo de Tejada.
D. Bernardo Tarden.
D. Ignacio oezuela.
(4) EL Manifie:to que el Rev dió entonces


2í la Nacion es el colmo de la perfidia , porque
en él hace las mayores protestas de que desea el
bien del pueblo y jamrs su corazon abrigó se-
mejante idea, ni por un momento : he aqui su
tenor.


¡ Españoles: Cuando vuestros heroicos esfuer-
zos pusieron fin al cautiverio á que me habia re-
ducido la mas inaudita perfidia, todo cuanto ví
y ohí despues que volví á pisar este mi pais na-
tal, contribu y ó á persuadirme que la Nacion de-
seaba ver restablecida su antigua forma de go-
bierno : y esta persuasion me indujo necesaria-
mente á consentir lo que parecia ser el deseo
gener .1de un pueblo magnánimo, que , despues
de haber triunfado de un enemigo estrafio , te-
ma todavía los horribles males de la discordia
intestina.


No ignoraba yo que los rápidos progresos de
la civilizacion de Europa , la universal exten-
clon de los conocimientos , aun entre las clases
menos elevadas del estado, la mas frecuente co-
municacion con los diferentes paises del globo
y los mas espantosos acontecimientos que estu-
vieron reservados para la presente generacion,
hablan exitado ido is y deseos desconocidos á
nuest o; ame? isados, de que necesariamente ha-
blan de emanar nuevas é imperiosas necesidades.
No dejaba yo de saber que seria requisito indis-
pensable amoldar nuestras instituciones confor-


fl




[4 22]
rue á estos elementos, en Orden á as-gurar aque-
lla conveniente armonía entre e! pueblo y las
leyes , s(sbre que se apoya la c:r.bilidad y el
reposo de las sociedades.


Pero aun que yo meditaba maduramente y
con toda la solicitud natural en mi paternal co-
razon, en reformas de nuestro Código funda-
mental, que parecian mas congruentes al carác-
ter nacional y al estado presente de las diferen-
tes porcio: es de la inotiazqcí.: y tt:rnbien con-
forme á la orgenizacion de Otros paises ilustra-
dos, vosotros no hicisteis saber vuestros deseos
de que se retab!e:ie ,e aquella Constitucion que
eh medio de! e s truendo de las armas enemigas,
finé promulgada en Cádiz en 18re , en un pe-
fideo en que, con admiracion de Europa , pe-
leabais por la libertad de vuestra patria. Old
vuestros deseos y como tierno padre he con en-
tido e:1 lo que mis hijos juzgan conveniente á su
felicidad. Pres t é el juramento á la Constirucion
que anhelabais y seré siempre su mas firme apo-
yo. Tengo ya adoptado las medidas necesarias
para la pronta convOcacion de las Córies y uni-
do á vuestros representantes me resoeljaré en
contribuir á la Valide obra de la pros' eridad
nacional.


; Españoles! Mi corazon no aspira sino á
vuestra gloria y mi único deseo y alegría con-
siste veros unidos al rededor de mi trono,
contentos y felicez. Confiad por tanto ea vues-
tro Rtv que le dirige á vosotros con aquella sí::-
cera efusion de su corazon exitada por las cir-
cianstancias en ore eSteis colocados y por e! ín-
timo convencimiento de que estos son:lcs altos •


[4 25] •
deberes que la providencia me impone. Vuestro
bien dependerá de aquí en adelante , en gran
parte de vos)tros mismos. Guardaos de extravia-
ros por la falsa apariencia de un bien ideal,
que frecuentemente impide que se goce el bien
verdadero. Evitad la efervescencia de las pasio-
nes , que demasiadas veces trasforman en ene-
migos á aquellos que solamente procuran tener
el lugar de hermanos : concordad en afecto , asi
como concordais en religion, en lenguaje y en
costumbres. Repeled las insidiosas insinuaciones,
enmascaradas con ardid, de vuestros ribales.
Marchemos todos francamente y yo el prime-
ro, por la senda Constitucional: y dando á la
Europa un ejemplo de sabiduría , órden y per-
fecta m3deracion , en una crisis que en otras
naciones fueron siempre acompañadas con lagri-
mas y desgracias, hagamos que se admire y res-
pete puf siglos el nombre Español, al mismo tiem-
po que trabajemos vos. nuestra gloria y felicidad.
Palacio de Madrid 1 o de marzo de 18:o. —


Fernando.


Tambien el infante Don Cárlos electo enton-
ces Generalísimo espidió la siguiente:


Proclama.


¡SOLDADOS! El acto solemne por el cual
debajo de vuestras banderas declarasteis vues-
tra plena adhesion á la Constitucion Políca de
la Moruirquía , os impone grandes obligaciones,
01 mismo tiempo que os abre una brillante.e.ár-'
rera de qne podeis esterar inmortal gloria.


*fi




234]
Valor y e-rIstaneir.: esta noble divisa del,.


guerrero Espafiol en rodee tiempos, es la
.1e211.


ra prenda ¿e la inviolable fidelidad con que eum-
plireis vuestra promesa. Yo me felicito per la
eoeseaezs que el R a s; me ha dispensado cenfi-
riéndome la honra de mendaros Fiel al jura-
memo que hoy he preetado en su augusta pre-
sencie seré siimpre vuestro ip o en la carre-
ra que os ;quia por el camino de ia honra y del
deber.


Amar y defendeeeá nuestra Patria : man-
tener con constante lealt.d e! trono y la per. 0-
1111 del Monarca que es el apoyo de la Libertad.
la il y de la grandeza Nacional ; respetar las ,


lees; conservar la tranquilidad pública , es--
ter prontos para hacer toda clase de sacrificios
por el bien general ; unirnos con afietuosos sen-
timientos á la naden Española ; concurrir con
ella al restablecimiento y consolidacion del sis-
tema Constitucional ; observar aquella exacta
disciplina y subordinacion que son esenciales
le condicion militar ; tales son, soldados, nues-
tras sagradas obligaciones. Esto os haré dignos
del amor de vuestros conciudadanos, en tiem-
po de paz, y formidables al enemigo en nem-
po de guerra. Esto es lo que el Rey espera de -•
vosotros y de lo cual vuestro primer camarada
de armas ea daré ejemplo.


Hé aquí corno el antiguo trono de los Al-
forisoa y de los Fernandos brilló en esta lierói-
os Naden con esplendor desconocido en las mas
bellas edades de la Monarqofe.


Fernando 7.° nuestro enigno monarca , el
fanisiadors la Libertad da España y padre da


X 425)
ata patria reté el mas fe.iz y el *as podereeo
de los reeee, supuesto que puede fundar su au-
toridad en las indestructibles bases del amor y
venerecion de su pueblo •


¡SOLDADOS de todas graduaciones ; Haya
un solo seii zimiento eetre todos los E,speftules;
y en todos los pdigtoe -y en todas las circuns-
tancias, unamos un grito al rededor dei trine,
Viva viett la Nadan: vi9a la Cututi.
sucion......111adrid 14 de marzo de 181o.


EspoJicion de Riego al Rey.


El alma sublime del héroe de las Cabezas al
ver estos manifiestos, se llenó de gloria.; y cre-
yendo que su contenido era producido por la
efusion mas tierna del coracon de estas pernos,,
y qee su obra se perfeccionarla, hizo al Rey
la siguiente esposicion


Señor: Rafael del Riego comandántede la
primera divilon del Ejército Nacional que en
el primer die del presente año se declaró por la
causa de la Patria , se apresura á elevar á los
pies del trono de V. M. los sentimientos de
amor y de res•eo, que el corezon de las tro-
pas que mando han abrigado siempre y cuya
conducta no los ha desmentido. No la ambi-
clon , no el deseo de celebridad, no alguna
otra de las pasiones que tan fuertemente influ-
yen en loi corozo tes de los hombres, fueron los
motivos que estos tuvieron para publicar lee
primeros, en aquel dia la Cunstitucion sancio-
nada por la Nacion, y que es la garantia cierta
de su prosperidad y do su gzaad ,za, S t eompor-


Cá.tiza.




[126-j
Cimiento fue dirigido unicamente por el mas
puro amor á su Patria y por el mas ardien-
te' deseo á su felicidad. ;El cielo es testigo
de su sinceridad. Les hombres imparciales que
ven los obgetos como son en si al u-aves de los
caprichos, son los que puedan testificar esta ver-
dad tan e ,encial á su reputacion ; que inutilmente
pretende án mancharla los hombres perversos,
enemigos del bien, público ante los ojos de V. M.
de la Nacion y de la Europa.


Jefe de la coluna móvil de los patriotas que
salieron de San Fernando en 27 de enero para
derram-a- el patriotismo que los animaba , nunca
perdí de de vista tan importante mision , ni se
cometió accion alguna que deshonrase su ejecu-
clon. La violencia, la rapiña, todos los demss
desórdenes que conummente acompañan á cu,l-
quiera alteracon en el sistema social , nunca
ofuscaron el lustre de las armas de la Patria. Los
trabajos. las privaciones, los arduos sacrificios
que las TI ox4s tuvieron que suf-ir , nunca, ni por
un E0:0 momento, demoraron los planes tan ce-
losamente consebidos y tan denodadamente eje-
cutacI ns. Las ciudades por donde pasaron fueron
te<t . g)s d ..1 su s ubordinacion, ( . be.lielcia y disci-


: 'os ciudadanos no fueron perturbados en
sus prowedades ni por sus opiniones : los magis-
trados continuaron eiercien'o sus funciones : los
ministros del altar vieron respetado su caráctel.
ylos defieres ardo 's de la guerra no causaron
mal -á !o, trabajadores en la agricultura v en la
indnstria. Las ventajas alcanzadas contra los que
ce pro:lamaban apos.--,2ooes de V. M., no fue-
ren seguidas por el menor abuso , é invaria-


[127]
blemente se respetaron las leyes de la humanidad,
Cuando conquistadores, na insultaron á los ven-,
cidos , y cuando fueron acometido por un nu-
mero superior da sus adversarios , cedieron siu
desanimarse, ni sufrir que fuese rn alelada la
gran pureza de su honra.


Muy e.iflaquecidos por una concurrencia de
circunstancias infelices, aun así se juzgaron fuer-
tes , con la aprobacion de sus propios corazones
y la estima que mere2ian de todos los hombres
buenos. El cielo no podia dejar sin premio sus
trab.jos y siempre interesado en el bcn de /as
naciones , quiso hacer á la España un teatro de
escenas confo -me á tan digno objeto. Levantó-
se repentinamente la llama del patriotismo en
todls las provincias de la Península : V. M. ras-
gó el velo que escondia á los traidores y cedió
á los impulsos de su corazon digno del padre
de su pueblo. Aquel Código sagrado obgeto de
amor de todos los hombres españoles, recibió de
boca de V. M. aquella sancion por largo tiem-
po deseada , ya que se habian puesto los hom-
bres que no tienen otra patria que su iuteres, ni
otro Dios mas que las ignorantes sugestiones de
su orgullo. La Nacion que levantó este monu-
mento de sabiduría, llena de alegría, vió el ju-
ramento de V. M. con toda sinceridad , y en-
contró en é! la esperanza de su futura felicidad
y gloria á que es llamada por el destino.


Jamás presentó la España tan grande espec-
táculo : nunca el trono de San Fernando apa-
reció tan espléndido y glorioso. Un Rey unido
con su Nacion :"un Rey jurando aquella Coas-
./itucion que le priva del triste poder de baczr mal




[128]
la Patria. 2 Qué obgeto mas magnífico tt 10,


ojos de la razon, de la humanidad y de la jus-
ticia ? 2 Quién puede pensar en esto sin llenarse
de entusiasmo, cono perteneciente á una Nacion
que ha sido el teatro de tal accioa?


no
se convencerá , Señor, viendo la brilla pees-
pectiva que presenta tan noble y generoso con-
Fortamieata ? tal restabLcirniente de la ley y de
la moral, la vivilci,cion de la industria ; l a pro-
teccian á la agricultura ; el comercio leváritan-
dose de sus ruinas ; las ciencias y las artes li-
berales reasumiendo todo su lustre ; las ventajas
del pueblo y el nombre de Fernando 7.° pasan-
do á l a posteridad con tanta gloria ? No > o t
tutos obgeto; intresantes para el corazon de V.
M. ¿ Y no :


o, hacen dar los ;mi-el:vicies á vos
Mismo par halen sacu.lido el igrominioso'uso
que I .> liso-:ja v la traici•n os hablan irnoueool


Recibid, Seii r, los sentimientos de la impon-
derable alegría que inunda mi corazon v el co-
rno:, de todos lo, valerosos de la ro'una que
está bajo mi mando, por tan fe l iz mu.i loza. Re-
ci)id sus juramentos de ser entarime , te deci-
didos á servirá 'u Patria y al Reo y e e 'la-
ma su padre : recibid sus grandes voto, por vues-
tra felicidad y grandeza. Todas las fatie


. s se,
rán desprec i adas cuando 1 ss sofrieren e I I ) eje-
Curio ,' de so deber. Toda la sangre de sus
nas se ,


-á gustos-maata derramtda pNr su Patria
y po.- trono Co s


• ifucion 41 qu- 1 .1 cubre con
sus alas tutelares. El mondo nos ha vista mar-
chand 's iempre nor e! camino da la justicia y de
la hora v el mundo nunca verá contradictos
ratOs sentimientos, ni los del mas profundo real..


11291
peto y amor, con que su jefe ruega al Cielo que
preserve largo tiempo la vida de V. M. para
bien de la Monarquía Constitucional.


Rafael de! Riego.
(43) Fernando 7.° entab ló inmediatamente


comunicacio tes secretas con los tiranos de Ru-
sia, Austria, y Francia para que le ayudasen á
recobrar el cetro de hierro. En sus cartas lle-
nas de sonrojan y de ruegos, protestó de con-
tinuo que la fuerza de las circun-tancias y la
coaccion en que se vid , te habian arrancado el
juramento á la Constitucion. De una parte estas
gestiones de Fernando , y de otra e: observar
los tiranos á quieres recurrió el curso rápido de
las ideas de la lile-tad en Europa , les obligó
ti interesarse en la ruina de la Constitucion Es-
pañola, porque observaban que el poder abso-
luto se les escapaba de entre las mano-, y el gri-
to de Riego se habla rep-t ido con entusiasmo en
diferentes reinos Entonces corrierron despavori-
dos á Tropau y empezaron á discurrir los medios
necesarios para llevar adelante su ardua empresa.
De toda !o que se trató en este congreso y en otro
que se formó despues en Verona fué noticioso
Fernando 7.° y de aquí la animosidad con que se
le vid obrar detraradamente contra la ley funda-
mental del Estado que acababa de jurar.


(44) A la cabeza de estos hombres pérfidos
estaba el orgulloso é hipocrita don Agustin Ar-
güe l les, hombre que vino desde el presidio al
ministerio de la gobernacion de la Península,
Riego puso su obra con la mejor buena fé en ma-
no, de estos infames , y ellos se empeñaron en
destruir ti Riego y á la Libertad que habla restau-




[130]
ra,


so brillante acero. Con este designio em.
penó Argiielles á propagar la idea de que la
CoostituJion promulgada en Cádiz en 1811, no
podía ir adellate. resistiéndolo el Monarca corno
de he2ho lo resistia, y que era necesario modifi-
carla y d ar al sistema de Gobierno la forma que SU
tenia ea Francia. Esta idea tuvo la mejor acep-
tacion entre todos los partidarios de Argü-lles,
que estaban como él, llanos de miedo , creian
que orzan ya nuevamente el reinado de las cade-
nas ó' iban á ser sepultad )s e a los antiguos ca-
labozos. Apile troza desde eltónces todas sus fuer-
zas, principiaron de adular al Rey, y á con-
deicender coa sus ideas y caprichos, y -á pro-
pone.rle ea el sistema jurado unís reformas tales;
que ampliase su poder hasta const;ruirle en dés-
pota , coa la máscara de C6nstitucional, las Cá-
maras y el reto absoluto. A3i creyeron ellos que
aseguraban su fortuna , y empezaron á minar la
Constituzion. Ei Rey detestaba todos los medios
que no se dirigiesen á recobrar el cetro absolu-
to; pero por una parte temia el furor del pue-
blo, se habla pronunciado con la mayor de-
eision y entusiasme en fovar del sistema de Li-
bertad y par otra encontraba el plan de Cáma-
ras propaesto , un arbitrio para recobrar ma-
yor as ,endiente sobre los nnistroc, y que astas
le disimulasen sus malos pasas há.:ia el despotis-
mo, disfrazados con la idea de las Cámaras, y
aparentó conformidad con la propuesta que se
hacia por el inicuo y ambicioso Argii elles. Des-


de este momento, el Rey ea su fin de erigirse en
déspota y Argii .,41les y los densas ministros que le
siguieron al propósito de consolidar el plan de


[431]
Cámaras.... todos conspiraron contra las Liber-
tades Patrias y trabajaron de hecho por destruir
el sistema restaurado por el Héroe de las Ca-
bezas.


(45) El Rey pensó en evadirse de hacer el
juramento que debia prestar á la Constitucion
ante el congreso Nacional: y p-ra conseguirlo,
en repetidas juntas ¿e serviles que celebraron en
la casa de Baso ee dispuso la fuga del Rey y
se acordaron los medios necesarios para llevarla
á efecto. Al mismo tiempo que e! Rev empren-
diese su fuga, debla ponerse fuego sí Madrid
por cuatro partas para llamar la ate.lcion
del público y castigar á sus habitantes por
este medio. ¡ Plan herroroso , pero propio
del corazon de Fernando! El general Echabarri,
el canonigo Heroz , el relator del Consejo de ha-
cienda Casquiero , un cura hermano de Baso, Ra-
mírez y otros, salieron anticipadamente de Ma-
drid y se dirigieron á varios pueblos de Casti-
lla , por donde el Rey debia marchar , prepa-
rando la opinion pública en su favor, con las
imposturas de que se atentaba contra su vida, de
que se pretendia establecer el sistema Republica-
no y otras semejantes. Ya estaban los coches lis-
tos y los tiros apostados para la fuga del Rey,
pero el espitan general de Castilla la Nueva Vi-
golet y el general Velasco gobernador de Ma-
drid, descubrieron é inutilizaron tan inicuo plan.
Echabarri, Baso, los denlas que fueron á los pue-
blas de Castilla y otros complicas, fueron pre-
sos y conducidos á la cárcel de Burgos: el he-
cho se justificó hasta la evidencia, pero los reos
quedaron impunes y la causa fué el plan de Cá-


1




t4 2)
matas , porque con ét difrazaba d Rey SUS ln.
tendones y sujetaba á su placer al Ministerio.


(46) El m ismo principio del plan de Cama.
ras pro lujo el mmstruoso at tque que se dió á la
Lib.tritad ea setiembre de 182o , obra tambien
del infame Argüelles, que se atrevió á colum tiar
al héroe Riego buponiendole proyectos de Repu-
blica que jamas , xistiero t , para desacreditarlo,
privado del mitad) y hacerlo salir desterrado de
Madrid con término de veinte y cuatro horas.
Ea este provecto entrarou lo; Ministros, el con-
de de Taren° y muchos diputados á Ciártes. En
la casa llamad i del Patriarc t se formó una jun-
ta y allí se acordó realizarlo, porque dijo el se-
ñor Argüelles que esto era de absoluta necesi-
dad para tranquilizar al Rey , que no podio su-
frir la presencia del héroe, ni los obsequios que
le prodigaba el pueblo M drilefio ¡Hombre vil
é harem)! N) se le oculrab t que el m t vor dato
que se le p tdia causar al sistema era el descrédi-
to del héroe que lo habia restaurado : tampoco
descowei a ni los denlas pailiagu ad ts que en el
hecho mismo de man i festarsele Rey con tanto de-
sagrad ), se demostraba sur


odio á la Constituzioo;
pero todos prescindieron : la libertad de la Pa-
tria en nada la tenian , si ellos logr aban el fin que
se prop>nian de asegurarse una br illante fortuna
en las Cá rt iras y m is que el Rey fuese mas dés-
pota que el gran Turco.


Inutilm ente elevó el héroe sus ql'ejas á las Cór-
tes centra eta


m )nstruosa p ro vi de ida , que le
imfamaba é invonía una pena sin haber delin-
quido itautilmente tanabiel clama ron contra ella
Igunos diputados patriotas: Are iiellas dijo en el


(115)
Congreso con 181 Imprudencia mas escandalosa
cuando se le preguntó sobre los motivos que te-
nis el gobierno F.t ra Froceder centra Riego. que
estos motivos estaban consignados en algunas
páginas secretas que el descub, irlas seria muy
yrjudicial. Los diputados que estaban en la
intriga aroyaron las razones que alegó Argüe-
lles para no descubrir los tales pág i nas y esta dia-
bólica inveucion bastó para que el Congreso le
tranquilizase, y el Héroe calumniado, salió des-
terrado para Oviedo. ¡ Que Eolpe tan terrible
para la Lile, tad ¡ Quitar el prestigio al Héroe
que habla roto las cadenas de la Patria, por me-
dio de las mas negras imposturas y groseras ca-
lumnias, fué el golpe mas fuerte que pudo ima-
ginarte para destruir el edi` do social. Y For-
qué ose; dió este golf el Por complacer á un Tí-
ra y For squelos mismos á quienes Riego
habla quitado el grillete que arrastraban en los
presidios.


En todo el ct rso de la revolucion de Espa-
ha , ne. han tentado todos los serviles juntos un
medio mas inicuo y mas deienahle. En todos los
malos pasi,s que ha dado el Rey , no hay uno
de la magnitud y trascendencia que este, pues
fué el que abrió la Fre-ta al mal, ensefió al Rey
envalentonarte contra los defensores de la Pa-
tria , y dió margen á sus part i darios para obrar
abiertamente contra e' sistema. En este dia vie-
ron ya los horni‘res reflexivos que era seguro el
triunfo del Tirano.


(47) El divino Argüelles , con toda su divi-
nidad , supo di vinameat e percibir del exsusto te-
toro nacional arriata y seis mil duros en el rno.





(I 310
mento que ocupó el Ministerio, disfrazando e3-
te robo con decir q le si hubiera existido el sis-
tema Constitucional desde el alío 18[4, él hubiera


sido ministro y en cónepto de tal habria cobra-
ID esta cantidad al respecto de seis mil duros
cada año. Qué p:ttriotismo ! Qué integridad
y qué pureza ! ¡ Qué consideracion á las apu-
radas c!reunstancias en (fuá eXistia la Nacion!


Y si así obraba tod) un divino , que hablan
de hacer !o> huiri tt101 • ? Lo que hicieron los de-
mas Ministros presidarIo's : si la casa se que-
ma, calentérnonos todos cada uno de ellos hi-
zo la stipJsición metafísica que Argüe:les,
y se embolsaron diVinJrneare los sueldos arrasa-
das y se hicieron ricos en un santi-amen, mien-
tras á los infelices soldados , que habian obra-
do la restauracion, no se les daba para Comer,.
y padecian mil escaseces de todas clases.


(48) El robo que se hizo entónzes á la ha-
cienda pública es incalculable. Para conocerlo
basta observar que á pozos mese> de la restau-
racion, ya giraban millones algunas personas que.
estaban en ruinosa quiebra , cuando dió Riego
en las Cabezas el sacrosanto grito, como por ejem-
plo un Mendizabal. Mas, Canga-Argüelles que
apenas tenia en fines de 1819 un pedazo de pan
que co.ner, , casó una hija . ea 1822 y le dió en
dote mil oazas de oro en metálico. Mis, el di-
choso conde de Torero, que ántes era un pobre
diablo hoy vive en París en grande. ¡ Con es-
tas ventajas es una vida el ser Patriotas!


(49) El divino Argüelles para corresponder
á los obsequios que habia recibido de un patron
en Ceuta , creó de su propia autoridad una je-


(I 35)
fatura Política en Algeciras y Ie agradeció con
ella, no embargante que apenas sabia leer ni es-
cribir : de este modo impuso al Estado un gra-
vámen de cien mil reales. De Capsa-Argriefies
no se diga: á todos sus amigos, parientes y bien
quirientes y á los amigos de estos, de aquellos
y de los demas ella, los acomodó á pedir de bo-
ca: el que ro pretendió 6 por rcejor decir el que
no quiso fié el que entónces se quedó sin empleo.


(50) Este pedrito de hacer cesantes y des-
contentos era parte integrante del plan de Cá-
maras y veto absoluto.


(al ) Tambien fué esto obra del divino Ar-
guelles y no se atribuyera al servil marqués de
las Amarillas que era entonces Ministro de la
Guerra, porque es constante, público y notorio,
que desde la restauracion , todos los asuntos de
entidad se trataron en junta de Ministres. ; y se
llegó á saber de positivo, que en una de estas
juntas hizo Arguelles la proposicion para des-
bandar el ejército de la Isla, y otra division
qu e se hbia formado en Galicia: el ployecto se
recibió ct n aplauso y ,cerno -era consiguiente se
despach oía 1s ordenes para llevarlo á efes=
to por el Ministro de la Guerra.


En vano el e:ercito de la Isla elevó sus que-
j as á las Cbrte= y si Rey, esToniendole les [edili-
cia s que semejante me dile. debla producir ; que-
datoci desatendidas estas quejas.


Para que el lector juicioso pueda conocer lo
infame de esta medida, copiamos el recurso que
/'77p el } jército l:be.ítador al Rey , en x x de
a gosto de i2co, que dice así:


5) Señor desee.mes que los que cercan 11 Y.




[1561
M. conozcan plenamente la sineerldád de nues-
tros sentimientos, y que deseamos con igual bue-
na fé promover la felicidad de España, siguien-
do las veredas que el cielo se dignó abrirnos. De-
seamos que ellos quieran, así como nosotros, que
V. M. viese que su gloria y su prosperidad se
auto mtaba en la línea del comportamiento que
adoptó con tanta nobleza , para el bien de la
Nacion : de esta N tejo') pie ha probado á todo
el ueiverso el arnJr que p•oresa á vuestra Real
Persona.


Pues Señor , si esto es así, sin temer inter-
pretaciones siniestras, vamos á depositar en el
seno de V. M. todos nuestros sentimientos: y
nuestra franqueza hará que ellos sean recibidos
con generosa indulge Una órden real del
t 4 de julio último que desbanda el Ejército de
oOterveciones, nos ha sido comunicada en el 8
del corriente por el capitan general de Anda-
lucía D. J. O Donoú. Esta órden nos hace te-
mer que este recur.o no sea recibido tan favo-
rabl ome ' te como debe ser : recetamos que una
mano hóstil , dirige las operacloees del Minis-
terio y lleva la Nacion á su ruina : recelamos
que compromete á V. M., al ejército y á noso-
tros mismos, que nada deseamos mas que el es-
tablecimiento del sistema Constitucional. Este
sistema, Señor, asegura á V. M. una grandeza
y un poder que no polla gozar en el sistema
contrario ; porque V. M. ha tenido demasiada
triste esperiencia, á costa de la honra Esprit-14a
en aquellos años de triste memoria, en que esta-
bais cercado y eig•iliado por ministros, al mismo
tiempo ignorantes y perverso,.


[137]
Decirnos, Señor, con franqueza que una ma-


no oculta gura á su d.:struccion inevitable; tan-
to á la Nacion, como á V. M. ; porque escita
desconfianzas indignas de V. M. y de nosotros.
Nuestra buena fé se ha irritado por las sospe-
chas que las ordenes ministeriales no pueden dis-
frazar.


En orden Señor á preservar el efecto que
nuestros cuidados nos testifican y la bondad
con que V. M. nos honra, debemos permanecer
fieles á los principios que proclamamos cuando
abrazarnos la causa de nuestra Patria y la de V.
M. La historia nos enseña que muchas veces ha
costado caro el decir la verdad á los reyes, no
porque ellos sean enemigos de la verdad , sino
porque ella contrasta los intereses de sus corte-
sanos.


Las mismas hazañas del Cid que nunca se
ocupó de otra cosa mes que de la gloria de su
príncipe, fueron obgeto de sarcasmos de los va-
lídos de palacio, y castigadas por aque:los que
las debian premiar. Pero nosotros no podemos
ver con indiferencia á nuestro país sumergido
en la confusion , no por la ignorancia, sino per
la perversidad del Ministerio que nos lleva al
borde del precipicio, poniendo en peligro la segu-
ridad del estado , obligándonos á relajar las le-
yes de la disciplina y sorprendiendo á V. M.
para que dé ordenes contrarias á su servicio y
peligrosas á la tranquilidad pública. Nuestro
comportamiento prueba, que no debemos ser ob-
geto de ninguna suerte de desconfianza: las tro-
pas que tenernos la honra de mandar merecen
las bendiciones y el amor de V. M. y de todos




[4 58]
los Españoles. A pasar de la opo ,icion que espe-
rimentamos á cada paso y de las intrigas que in-
cesantemente contrarian nuestros mas inocentes
movimientos, no hay un individuo en el ejér-
cito que corra nigua peligro de sor censado de
enemigo de su Patria y de su Rey. Ya sotnos
esperimentados y ademas daremos pruebas con-
vincentes de nu:stro buen comportamiento para
poder contar de antemeno con la estimacioa de
la po•teridad. Se reunió el Congreso ; pero to-
davía no ha podido realizar las reformas que la
Nacion exige : estas reformas necesariamente las
han de remitir aquellos que están acostumbra-
dos á vivir de las calamidades públicas : aque-
llos no pueden soportar la idea de ver que los
españoles adquieran por medio de las nuevas ins-
titucianes los conocimientos que antes les falta-
ban: aquellos que no pueden ver que se difun-
den las verdades de que la virtud y el trabajo
Ion las mejores genealogías: las verdaderas fuen-
tes de aquella prosperidad que debe ser procu-
rada por el hombre de bien, por el Español dig-
no de este nombre.


El ro da marzo todavía está impune la jus-
ticia nacional todavía no habia alcaozrdo á aque-
llos que en 1814, hicieren traicion á la justicia
d .a su patria y abusaron de su augusta mislon,
en gañando á V. M. y estraviando su razon bas-
ta el estremo de hacerle compensar con tormen-
tos y muertes la generosa inclinacion de los es-
pañoles en favor de V. M. cuando estaba cau-
tivo en manos de sus perversos enemigos; <que-
1! inclinacion cuyo objeto era consolidar la Li-
bertad pública sobre tales bases, que no fuese


1 591
posible destruirla , aunque unque alguno de nuestros
Príncipes fuese víctima de ministros ignorantes
y corrompidos. Mil reglamentos indispensables
tienen todavía que ser sometidos á la primera
discusion : la Ley fundamental del Estado y la
seguridad pública estan amenazadas por asocia-
ciones protegidas por estranjeros, y por inquie-
tudes internas cuyas causas pueden tarnbien atri-
buirse á influencia estranjera.


En estas circunstancias quiere el Ministerio
disolver el Ejército de observacion ; aquella sal-
vaguardia de la repretentacion Nacional, por la
cual nosotros peleamos por V. M. y por las
nuevas instituciones que todavía estan bien léjos
de la perfeccion y solidez necesarias , para dar
una verdadera garantía al sosiego general.


Una vez disuelto este cuerpo del Ejército, Y.
M. ya no tiene defensa alguna contra los ene-
migos de su Persona y de la Nacion. Si aban-
dooarnos esta posicion desde la cual hemos he-
cho temblar á los malos ¿ qué vasto campo se abri-
rá á las culpables esperanzas de aquellos , cuyos
proyectos criminales previene nuestra union ?
Sefiar , la desgracia de la inocencia previene de
la seduccion de los perversos , y V. M. ya fué
seducido por consejeros pérfidos, como V. M.
declaró en su proclamacion de lo de marzo pró-
ximo pasado. ¿ Quién puede asegurar á V. M.,
á sus ministros y á nosotros , de que la disolu-
clon de este cuerpo no procede de una trama cona
tra la Libertad de nuestra Patria, contra la Com.
titucion, de V. M. y el trono ?


Animados , Seflor , por el mas vivo interes
del bien general, que interesa esencialmente á V,




{4 )4 0:1
M. y á su real familia : convencidos de que el
buen concepto que tenemos adquirido entre nues-
tros conciudadanos V ante todo el mundo , debe
ser preservado intacto, y ageno de toda mathla
de traicionó fflaqueza que nuestro silencio seria
no crimen cuando nuestra Patria está á punto de
caer en las manes de sus enemigos que han pro-
nunciado la disolucion del Ejército; rogamos á
Y. M. sea servido atender á esta esposicion , pe-
sando las consecuencias de la órden real comu-
nicada al Ejército por el ministro de la Guerra,
y suspender su efecto, apercibiendo al Ministe-
rio por el pass) que ha dado en esta ocasion que
puede ser origen de incalculables desgracias.
En nuestro nombre y en él del Ejército Ra-
fael del Riego — Lcpez Baños — Arco Agüero.


(sa) En el din que Riego salió de Madrid
desterrado y calumniado, como ya se ha refe-
rido, estaba en mucha efervescencia el pueblo
Madrileño. El Grande Riego solo pudo tran-
quilizarlo. Su enemigo entonces, el pérfido Ar-
güelles hizo poner las tropas sobre las armas, y
sacar los cañones á la Puerta del Sol, para in-
timidar al Pueblo. Este golpe de despotismo pro-
dujo el descrédito de Argilelles entre los ver-
daderos patriotas.


(53) Lo que se recibió con estos empr¿sitss
es incalculable ; al tesorero general don Domin-
go Torres se le desaparecieron de el:tre las ma-
nos, sin saber como ni cuando unos ochenta mi-
llones de reales : por aquello de pifien los ladro-
nes y se descubren los hurtos , el asunto l e hi-
zo público : llega á noticia de las Cortes : se al-
borota el cotarro : levantan el grito hasta el cie-


[4 41
lo algunos diputados : se nombra una Cornision:
ye forma espediente : aparece justificado el ro-
bo : separan de su empleo al señor de Ferrer:
clamen por su castigó algunos periodistas libe-
rales: abogan en su favor los publicistas minis-
teriales que eran los mas... el espedisnte no se
concluyó, y... ¿qué haremos ?... ‘t qué no haré-
mos ? Que din el señor Argüelles que acaba
de recibirse kason. El señor Tones es un Her-
s.eaau muy apreciable, está en el Grande Orien-
te. . . Si este negocio continua el crédito de to-
das sus compañeros va á tierra.,. El reintegro es
imposible; porque se hizo la distribucion a por-
rata, y cada uno llevó como Y. E. la parte que
le correspondió... El señor Argiielies llamó el
espsdiente, se quemó de su orden y asunto con-
cluido. t Y las Cortes que hicieron entonces? Na-
da ya estaba sujeta la mayoría al plan de Cá-
maras y veto absoluto. Y el señor de Ferrer
quedó desde entonces imposibilitado, á lo me-
nos para obtener otro destino ? i Qué disparate!
Su sueldo siempre estuvo corriente, y al fin y
al cabo se le nombró intendente de ejército de
Reserva , para que pudiese repetir sus latroci-
nios,


(64) Despues del ministerio Argüelles entré
el de Feliu , Sanchez S tivador , Cano-Manuel,
Pe legrin, Vallejo , Escudero y Bardsji. Este mi-
nisterio siguió el camino que Argüelles le dejó
marcado: adoptó las mismas ideas y principios
Y antes de entrar en posesion de las poltronas,
'a estaba vendido al plan de Cámaras y veto.
dad15 tiempo de estos ministros se formó la Socie-


- del étenilto que tenia por obgeto el estable-




[142]
cimiento de las Cámaras : se adoptó la idea de
que solo los individuas de esta Sociedad 'pudie-
sen obtener los empleos de Jefes Políticos, Coman-
dantes Generales, Jefes de los cuerpos Militares;
Magistrados , Jueces de primera Instancia, y de-
mas influencia en el reino. Este ministerio de-
claró guerra abierta á los exaltados y proteccion
decidida á los conspiradores : expidió una Cir-
cular con la:iota de reservada, para los Jefes Po-
líticos espendiendo cuanto dinero creye r es nece-
sar:o , y adoptando todas las medidas que es-
tuviesen á su alcance, influyesen en las eleccio-
nes de Diputados á Cortes, para que no tuviesen
Cabida en ellas los exaltados por la Libertad.


En un artículo que escribió Feliu é insertó la
Gaceta del Gobierno se dijo, que era falsa la
doctrina que esparcian algunos oradores de la
Fontana de Oro, de que la soberanía existia en
la Nacioa : los facciosos se multiplicaron en aque-
lla desgraciada época coasiderablemente, : Jefa-
tura Política de Madrid que obtenia el patriota
general Copons, fué conferida por Feliu á don
José Martinez de San Martha ( alias Tintin de
Navarra) con pacto espreso de que destruyese
las tribunas populares, como lo hizo en efecto,
incurriendo en un solo din en una multitud do
crímenes de lesa Naciao, que todos quedaron ¡al'
puoes, y fueros: la deztruccion arbitraria de las
tribunas reducir á pr I sion sin causa ni motivo
alguno á don Juan Antonio Jipini de la Fontana
de Oro : decretar la prkion de cinco oradores Y
poler tambien en prision á dos de ellos : sedo'.
cir á una parte de la Milicia Nacional para (103
hiciese armas contra el pueblo indefenso que lir


[443]
naba en triunfo el retrato del Héroe.


Este ministerio siguiendo tambien la senda
que le trazó Argüelles, volvió á calumniar á Rie-
go de que proyectaba establecer la República y
para ello sirvió de instrumento elJefe Político de
Zaragoza Mareda. Riego fue entonces separado
del mando de comandante general de A ragon que
obtenia y remitido de cuartel á Lérida donde
reinaba entonces una horrorosa epidemia.


Tambien en tiempo de este ministerio le pu-
sieron restricciones al dere„;ho de petician y •:á
la libertad de impronta.


Todos los españoles vieron entonces clara-
mente. quo el ministerio obraba decididamente
á la ruina de la Constitucion, de acuerdo con el
Rey. El disgusto fué general: tuvieron recursos
de todos los pueblos y de todos los cuerpos del
Ejército al Rey, para que separase de sus pues-
tos á estos hombres perversos , pero el Rey se
negó constantemente á la adopcion de esta me-
dida : y á la parte que el Gobierno daba caten-
clon á sus ideas liberticidas, se fue apurando la
paciencia de los amigos de la Libertad.


.Liegóse al caso de que Cádiz y las demás ciu-
dades de Andalucía se declararon abiertamente
contra el Gobierno y le dijc7on al Rey que no le
obedecian si no separaba de sus puestos á los mi-
nistros notoriamente traidores: en Galicia y en
Cataluña sucedió lo mismo : el Rey á pesar de
todo esto insistia en su negativa de separar á
lo s Ministros y estos hombres, sin rastro ni po-
der, continuaban en sus puestos en la opinion
general y haciendo impávidos la guerra á los
defensores de la Libertad mandando á Cádiz el




El
baron de Ánclala para que tomase el mando Io
cual no se verificó porque e: Pueblo se opuso...
y separando al general Mina del mando que ob-
tenia en Galicia y otras cosas por este orden.
Puede decirse en verdad que la autoridad del
Rey y de sus ministros quedó entcnces reduci-
da á Madrid y su rastro. S. M. entonces acudió
á las Cortes buscando un remedio ; pero estas
le manifestaron que no era posible sostener por
mas tiempo á los ministros que habian perdido
toda su fuerza moral.


No habia ya mas remedio que destituirlos de
sus empleos: i Pero como se hizo esto i ganan-
do tiempo para que pudieres entrar á relevar-
los varios dipu:adcs de Corles que estaban en
los mismos planes de Cámaras y veto, y dando
el Rey la última prueba de su iniquidad, cuan-
do al tiempo de despedirlos dijo en su real or-
den , que estaba satisfecho de los buenos servi-
cios que le hablan prestado y que por ellos les
daba las gracias.


Entraron pues á sucederlos los individuos si-
guientes: Martínez de la Rosa, Moscoso de Al-
tamira , Sierra , Pambley , Balanzat y Garelli:
tan malos como los Belios, ó peores si es pc•tible;
fueron icdtidahle:ne ¡te propuestos por estos ,


su nombramiento, presidió el pacto espreso de
trabajar con tosas sus fuerzas , para destruir el
sistema Constitucioaal y establecer las Cámaras
y veto.


Ellos no olvidaron jamas su promesa y entre
los diferentes medios que adoptaron para llevar-
la sí cabo fué el de destruir la milicia Nacional
voluntaria , con pretesto de organizarla ; pero


[145]
la opinion se pronuncio contra esta medida de
una manera bastante imponente y las Córtes la
repelieron. Los editores del Zurriago aplicaron
entonces todas sus fuerzas para hacer conocer á
los pueblos el veneno que envolvia este proyecto
y sus trabajos fueron superabundantemente re-
compensados con la multitud de cartas de gracias,
que recibieron de diferentes pueblos y cuerpos
de la milicia Nacional voluntaria.


En tiempo de este Ministerio hubo conmucio-
nes criminales en Pamplona y en Valencia y las
produjeron los que tenian el mando en las mis-
mas ciudades, en Cataluña tomaron las faccio-
nes liberticidas una fuerza considerable : por to-
das partes habia facciosos impunes : la sociedad
del Anillo llegó á tener inmensa estension y ya
no se dudaba de que el plan de Cámaras iba á
establecerse : solo habia un obstáculo que eran
las Cortes: acababa de instalarse la u. a legisla-
tura y el Gobierno no habia podido todavía ga-
nar la mayoría de sus individuos. Una prueba
de esta verdad se encuentra en la Sesion es-
traordinaria de :lel de mayo, en la cual resolvie-
ron las Cortes hacer al Rey una fuerte esposi-
clon sobre el estado político del reino : En ella
se quejaron las Cortes de la continuacion de los
disturbios , y le manifestaron el orígen que te-
nían : recordaron á V. M. varios pasages de su
vida y el modo con que los Españoles se habian
portado durante el cautiverio en Francia y sus
esfuerzos para restituirlo al trono. Nada basta-
ba para separar al Rey de sus intenciones y ane-
lo por recobrar el mando absoluto, ni para se-
parar á los ministros de su plan de Cámaras.




[4 )16]
($s) Los Zurriaguntas anduvieron por es-


patio de ocho meses de prision en prision ; pero
al lin fu eron absueltos libremente: Nuñez, Mee-
roa todos los patriotas exaltados sufrieron la
misma suerte en Madrid y en las provincias.
La persecucion fue entonces tan cruel que mu-
cine de los exaltados in teniendo valor suficien-
te para resistirla y deseando vengarse de sus
enemigos se pasaron al bando servil. Entre es-
tos se cuenta Bessieres que era uno de los libe-
rales mas exaltados de Cataluña; peso Villacam -
pa, Ruiz de Porras, Manzanares y otros Ani-
Ileros que mand,iban en Cataluña, le persiguie-
ron, le. calumniaron de proyectos de Repúbli-
ca y lo llavero a hasta el pié del patíbulo: indu-
dablemente hubieran consumado el plan inicuo
de destruir su existencia , para aterrar con este
ejemplar el de los demás exaltados : ya estaba
en capilla para ser fusilado , pero el pueblo de
Barcelona clamó á su favor de ua modo impo-
nente y aterrador y entonces los mandarines le
aplicaron un indulto y le pusieron en libertad.


La desesperacion y los deseos de venganza
se apoderaron de Bessiere3, que se puso á la ca
baza de una partida para defender lo que los
ilesos llaman derechos del Ree : no estaba este
en su coraeon , pero es lo cierto, que él obró en
favor del despotismo con toda su fuerza : llegó
á mandar una division de seis mil hombres , y
dió á la Patria muchos dias de luto.


($6) De estos antecedentes y de otras mu-
this ocurreacias que refirió el Zurriago, acae-
cidas todas durante la época fatal de: ministerio
de los Martinez de la Rosa resulté la insurrec-


[1 l í 7 1
don de una parte de la Guardia Real, en Aran-
juez á cuya cabeza estaba el infante Loa Cár-
los ; pero los patriotas destruyeron todas sus in-
tenciones.


El Ministerio, en la idea de los seis batallo-
nes de Guardias, que hablan dado las pruebas
mas positivas de su adhesion á la Constitucion
logró que volviesen las armas contra la Patria;
pribó del mando á los jefes que los conduelan
por el camino de la gloria y del deber, y puso
en su lugar á otros notoriamente serviles , que
hicieron los mayo:es esfuerzos para convertir-
los en defeasores del depotismo, y desgraciada-
mente lo consiguieron.


Llegóse el caso de que los ministros , con-
tando ya los elementos que ellos creian neeesa-
rios para llevar á cabo su triunfo, dijeron al Rey,
que era llegado el tiempo de establecer las C 'á-
meras y se apresuraron á realizarlo ; resultó la
insurreccion de los seis "batallones de Guardias
en el 30 de junio de iliee, y en la noche del 6
al 7 de julio ere? endo ya el Rey seguro su triun-
fo , les dijo á los Ministros que solo quería ser
absoluto y los puso presos en Palacio.


Entran en la misma noche los batallones de
Guardias haciendo fuego á los patriotas y gri-
tando muera la Constitucion y viva el Rey ab-
euluto : ya estaban impresos los manifiestos que
el Rey habla de espedir á la Nación en el mis-
mo dia, los decretos de muerte para los generales
Riego, Ballesteros y Zayas , y para los editores
del Zurriago estaban ya firmados : los caballos
en que el Rey habia de salir á pasear por Ma-
drid solemnizando su triunfo estaban enjaezados,




[1.48]
y en el patio de Palacio ; pero todos estos proa
yectos vinieron á tierra , y se estrellaron en el
valor de los Libres que batieron, desarmaron y
redujeeon á prision á todos los Guardias. ¡ La mi-
fleje de Madrid cobró ea aquel dia una gloria
inmortal 1


Entoaces se pre-entó á los Patriotas la oca-
sioe oportuna para consolidar la Libertad de un
modo indestractibie, se p arando del trono por la
ley á Femeado 7. 0 Ei habla incurrido ea es-
ta pena en el hecho m i smo de sublevar, obse-
quiar, emborrachar y distribuir cuantiosas sumas
de dinero á los Guardias ; para que se pronun-
ciasen contra el sistema.. él se hizo indigno del
cetro de la nacion Espaíí )la cuando dijo al con-
sejo de Estado en uno de los dias en que los Guar-
dias estaban en insurrecc lo /, que estaba entera-
mente roto el pacto... él en fin abdicó la coro-
na, conforme á la Constitucion y á las leyes, cuan-
do se declaró enemigo de la Libertad. Pero,
á quién podia llegar á im 18:liarse que el triun-
fo de los Libres en el memorable 7 dejulio se ha-
bla de convertir en perjuicio y dafio de los mis-
I1313 Libre; ? Quién diría que este triunfo que
debió haber sido la base mas solida para estirpar
todos los conatos del Tiraeo, de sus prosélitos y
de los partidarios de las Cámaras , habla de dar
á todos ellos mis valor y energía y mas consis-
tencia á sus inicuos planes ? Nadie lo esperaba;
pe,o así sucedió por desgracia: todos sus pro-
yectas fueron momentáneamente interrumpidos;
pero lejos de abandonarlos los continuaron con
mas ardor.


Cayó entonces el Ministerio de los Martinez


[4 )19]
de la Rosa y entró x reemplazarlo el de los San
Migueles que trabajó mas decididamente á favor
del plan de Cámaras destructivo de la Libertad.


Don Evaristo San Miguel que conspiró en
Belmez contra la vida del Héroe Riego , cono
ya se ha dicho, y que debió su existencia ulterior
á la generosidad, del mismo Héroe que era un
teniente coronel oscuro, que nunca habla figura-
de en Espafia, ni podia figurar, porque sus prn-
cipios, sus modales groseros, su ninguna litera-
tura, su infundado orgullo y desmedida arribicion,
le echaban fuera del círculo de los filbsofos, del
de los hombres de bien, y del de los enitniesma-
dos For la hidalguía... Este hombre que habla
sido secretario de la Sociedad del Anillo, en la
cual habla hecho ostentacion de sus principios de
viva quien vence.... en los dias que mediaron
desde el primero al 7 de julio, mandó un bata-
llon que se llamó Sagrado el cual era compues-
to de varice oficiales y paisanos. El mismo se ha-
bla erigido en jefe de este batallen, y es noto-
riamente falso cuanto han dicho sus apologistas,
con la idea de convencer, que los individuos de
dicho batallon le erigieron : lo que hay de cier-
to en el caso es , que observando los patriotas
que algunos de los batallones de Guardias sellan
armados de sus cuarteles , corrieron al Parque de
Artillería buscando armas para defenderse: San
Miguel se dirigió entonces al Ayuntamiento y
pidió armas para aquellos patriotas, el Ayunta-
miento dió orden pera que se le franqueasen, y
be ati ni el modo que tuvo San Miguel de adqui-
rir el mando de aquel cuerfo, con la idea de con-
tener el valor y entusiasmo de sus individuos,
orno en e fecto lo logró.




Pi 501
A la cabeza ya de este cuerpo obró de acuer-


do con el general Morillo , que era uno de los
principales corifeos del plan de Cámaras : y
obró dercaradamente contra Riego , y contra
las intenciones de los Patriotas. En la tarde del
4 de julio los Guardias rebeldes que existian en
la plaza de Palacio, hicieron fuego á la partida
de patriotas que mandaba Selles situado en la so-
bida de los Angeles : Riego corrió entonces al
Parque de Artillería, mandó preparar los ca-
ftanes y dió las damas disposiciones necesarias
para atacar al Palacio. Los patriotas llenos de
valor y de entusiasmo con la vista del Héroe,
ansiaban impacientes el momento de atacar al
inmundo alcázar del despotismo : pero llegó en
este momento el general Morillo, que era capi-
tan general de la Provincia y de consiguiente
mandaba las armas , el tuvo la osadia de preve-
nir al general Riego que se retirase, á presen-
cia de San Miguel el batallan Sagrado bramó en-
tonces, corrió hácia Palacio, y hubiera sin duda
en aquel momento acabado con el Tirano y con
todos sus prosélitos , si San Miguel ausiliado de
sus amigos Anilleros que existian en el batallan,
no hubiese ocupado coa les espadas desnudas el
principio de la calle de la Caballeriza : diciendo:
órden , señores , rnoderacicn por Dios que nos
perdemos, al instante se va á atacar, pero ha-
gámoslo en regla. Con estas voces y otras im-
posturas que salieron de la boca de este hom-
bre infame, en elogio da/ general Torillo, y
protestando á su nombre que al momento se iban
á mover todos los cuerpos patriotas , logró con-
tener el ímpetu gigante del batallen qte fué


[4n41
inmediatamente trasladado á la plaza de Santo
Domingo. En esta posicion esperaban ccn ansia
todos sus individuos la señal del combate ; pero
lejos de verificarse esto, vieron con sorpresa que
el sellar San Miguel dió orden á los puestos aban-
zados para que dejasen pasar una partida de Guar-
dias armados de los que existian en Palacio , pa-
ra que estrajesen C01119 asi se verificó en efecto
de su cuartel calle de la Inquisicion, varias ollas de
campaña y otros ausilios que recesitaba para ha-
cer sus ranchos. Esta ocurrencia produjo un dis-
gustó general entre los individuos del batallen,
y muchos considerandose vendidos se retiraron á
sus casas. Esto era justamente lo que deseaba San
Miguel, y para ello no dejó de hacer cuanto es-
tuvo de su parte ya disgustando á unos, y ya
negando las armas é infinitos , y ya despilliendo
á otros como sucedió á Incillas. . al valiente y
patriota. Incil/as que habla sido soldado de la
calima volante que salió de la Isla á dar libertad
á la Espa.lia. Este Incinillas aprendió solo en la
madrugada del 7 de julio con el mayor rie sgo,
á don Mon , uno de los principales jefes de
los Guardias que entraban con mano armada
proclamando al Rey absoluto: San Miguel ha-
bia echado del batallan á este Patriota , por-
que no . gastaba frak, y él que no rodia reposar
tranquilo, considerando amenazada la Libertad,
pues ya se decia de público que en aquella no-
che ataearian los Guardias, se queda con su fu-
sil á la intnediacon de la plaza de Santo Domin-
go: ore los tiros que dispara la partida manda-.
da por e' valiente Miró , y el fuego que se hizo
á los Guardias en el final de la calle de Silva,


n 11




(152.)
calculando que hablan de desfilar los batallones
hácia la Puerta del Sol se dirigió al Postigo de
San Martha. A poco rato ve una coluna de Guar-
dias que venia desfilando por aquella calle, ocul-
ta su fusil en el quicio de una puerta, y existe allí
hasta que acaba de pasar la tropa : detrás da es-
ta evitan venia el brigadier don Luis Mon que
la mandaba , á la distancia de unos veinte pa-
sos y con su espada en mano : Incinillas la sor-
prende , le pone el fusil al pecho y le amenaza
de muerte si habla una palabra : le quita la es-
pada y despreciando las ofertas que Mon 'e hizo
de treinta onzas de oro y un relox magnífico,
le conduce preso , y lo presenta á San Miguel...
al mismo San Miguel que lo habia lanzado en la
tarde anterior del batallon.... al misma San Mi-
guel que en aquella noche - no hizo mas que con-
tener el ardor patriótico del batallan en vez de
entusiasmarlo... el mismo que avisado que los
Guardias marchaban á la Plaza de Santo Do-
mingo por la calle de Apreciados se dirigió á
aquel punto, en los momentos críticos de que el
peloton del batallon que guardaba la entrada de
aquella calle, se dispara á hacerles fuego, lo que
evitó San Miguel previniendo en alta voz á los
invasores que se retirasen, como así lo hicieron...
el mismo San Miguel que al atacar tres compa-
íiías de los Guardias de Palacio á los Patriotas
que existian en los parapetos fronterizos á la pla-
za de Santo Domingo , bajó á reforzar!os con
un peloton del batallon, y lejos de escitarlos al
combate, fue un obstáculo para que no per atra-
sen en aquel mismo instante en la Plaza de Pa-
lacio, y aun en el Palacio mismo: San Miguel


[153]
eolocado en la puerta con su espada desnuda y
proclamando incesantemente el orden, amenazó
de muerte , al mismo tiempo , al que osase tras-
pasar aquel límite.


Este mismo San Miguel obtuvo en seguida el
triunfo de los libres , el encargo de sumariar tí
los Guardias rebeldes , y entonces halló la con-
juntura mas á proposito que pudiera apetecer,
para dar estensioa y consistencia á los planes del
finillo innovadores de la Coustitucion. En este
proposito y para dar el salto asombroso á la silla
del ministerio de Estado , incurrió en la super-
chería de engasar á los patriotas vendiendo la
confianza que les habla merecido, haciendo in-
juria á la vindicta pública , dejando impune la
sangre vertida, y bur!áudose, unido coi. el Rey
y con los Anilleros , de la razon y de las leyes.
Hizo una conmuta al ministerio ( todavia conti-
nuaba el de Martine.z de la Roca descaradamen-
te en las poltronas con asombro del universo) en
la que manifestó que el procedimiento se dirigia
á justificar los delitos , a.° el de una insurrec-
cion militar qne estaba muy clara y 2.° el de a-
taque al sistema que no estaba tan claro , y le
parada que debia procederse con separado!' á
la justificacicn de estos crímenes. En la idea de
dar á la rebelion de los Guardias el caracter de
t. (19 iasurreccion militar, olvidar el delito de
¡esa Patria en que hablan incurrido á comple-
tar !a iniquidad dejándolos á todos impunes. El
ministerio espirante no quiso concluir su sistema
con la infamia de poner e: conforme á esta con-
sulta , y 13 dejó sin resoluciou; pero San Miguel
no la consideró necesaria y de su propia autori-


41




Wri
dad desde el momento en que la hizo , del deli-
to de ataque al sistema. ¡Hombre perverso! ¡He
aquí, esparoles , una de las causas principales
de la esclavitud de la Patria! No estaba claro
el delito de ataque a/ sistema, habiendo pene-
trec'o los Guardias á la capital con mano armada
haciendo fuego rí los libres y atacando los pues-
tos que ocupaban con la ma yor firmeza , á la
voz de viva el Rey absoluto? ¿ No estaba claro
ese mismo delito , cuando el


-Rey le habia dicho
decididamente al Consejo de Estado y á los mi-
nist: os que no quería la Conititucion , y que sa-
lo aspiraba al mando absoluto ? Lo que no está
claro para la multitud, era el motivo porque ha-
cia hecho San Miguel este amasijo; y en vano lo
dijo el Zurriago mil y mil veces, pues nunca
fué creído y por ello sufrimos cuantas amargu-
ras pudieron proporcionarles los infinitos que
hablan tomado parte en el plan de Cámaras y
les obsecados... los brutos que tributaban concep-
to de patriotas á unos hombres tau malvados.


lié aquí en resumen el motivo que hubo pa-
ra conferir á San Miguel el ministerio de Estado,
con pacto espreso con los Anilleros , de trabajar
con teclas sus fuerzas para la consolidacion del
proyecto de las Cámaras y coa pacto espreso con
el Rey de que quedarian impunes los asesinos
del 7 de julio , con lo cual dijo el Rey varias ve-
ces á les Ministros , al consejo de Estado, á di-
ferentes diputaciones del Ayuntamiento de Ma-
drid , y á algunos diputados á Corres que aban-
donaria sus conatos al ab.s...,lutismo y se con-
formaria con el plan de Cámaras.


Desde entonces los tres poderes conspiraron


III 55]
de hecho y cm la mayor imprudencia contra las
Libertades pátri . as. El legislativo, eoa la epa tia
y criminal indiferente que observó despees de
h,ber visto cl-ramente que la Ley fundamental
eseaba Lo 1 .1 y no hizo uso de su p der para
castigar á los inicuos que se hablan sobrepuesto
á , empezando par el Rey, de cuyas sienes
debieron arrancar la corona tan luego como vie-
ron sus esfuerzos para volver á erigirse un tira-
na. El Ejecutivo dirigiendo las ficciones, man-
teniendo relaciones con la santa Alianza , por-
que neciamente llegó á pensar que desarmarla á
los déspotas con el plan de Cámaras; descuidan-
do con los medios de defensa; disgustando á la
Nacion y haciendo odiosa á la Constitucion. Y
el poder Juicial, prostituyendo su deber para que
los facciosos quedasen impunes y encarnizándo-
se con los exaltados por la Libertad.


(57) Entre notas los diplomáticos que con
este motivo se pasaron al embajador Ingles, ha-
vo una tan grosera y tan torpemente concebida,
que los mas íntimos amigos de San Miguel se em-
peñaron en hacerle conocer que aquel documento
sellarla su eterna infamia , pues que él compro-
metia al gobierno Ingles á que declarase la guer-
ra á España, y ademas presentaba un conven-
cimiento de la nulidad de su autor. Entonces San
Miguel se apresuró á recogerlo. El Zurriago re-
firió esta ocurrencia ea Madrid cuando San Mi-
guel era todavia ministro de Estado y ni él ni sus
apasionados se atrevieron á contradecirle.


(58) Estaba sancionado por la costumbre y
por la etiqueta , que cuando se llegaba al caso
de nombrar un Embajador por la córte de Es-




56)
paha en Roma, antes de publicar este nombra-
miento, se daba aviso al Santo Padre de la per-
sama elegida para desempeñar este encargo y
se rogaba á su santidad qi:e rubiese á bien reci-
birlo... Hasta que llegaba á Madrid la respues-
ta del Sumo Pontífice accidiendo á la admision
del nuevamente nombrado, no se hacia pública
su eleccion , ni emprendia su marcha : de este
modo se evitaba un desaire y un rompimiento
y se tributaban las consideraciones debidas al sa-
cerdote grande, vicario de Jesucristo en la tier-
ra : San Miguel fué advertido de esta costumbre
y de esta etiqueta ; pero se empeñó en presciodir
de ella cuando fué nbmhredo, el señor Villanue-
va ministro extraordinario de Espaiia en Roma.
Mas el encargado de negoc:os en Roma, al sa-
ber el nombramiento del señor Villanueva avisó
que no emprediese su viaje, porque estaba cier-
to de que no seria recibido. De todo prescindió
San Miguel; marchó el señor Villanueva, fué
desairado y he aqui la causa del rompimiento de
la Corte de Espafía con la de Roma , producido
por un capricho bárbaro de un ministro irepto
y pícaro : rompimiento que hizo mas daño á la
causa de la libertad de España que los ejércitos
Franceses que nos invadieron ; porque de aquí
tomaron motivo los enemigos del sistema, para
acabar de fanatizar al vulgo persuadién-
dolo que los Liberales aspiraban á destruir la re-
ligion cristiana: y en seguida corrieron infini-
tos hombres seducidos, á defulder la causa del
despotismo , persuadidos que defendían la causa
de Dios.


(59) Las Córtes eu sesion de 22 de marzo


r• 57 ]
de 18a.t , habiendo ex minado el info-me de
una comision especial acerca de las relaciones
políticas de España con otras naciones, adop-
taron la opinia.n de la Comision y reconocieron
el principio de que la Constiturion Españo-
la estaba atacada por los movimientos hóstiles
del Austria contra las Dos-Sicilias. Despues de
haber reconocido las Córtes este principio, si
los ministros todos que hubo en España no quie-
ren que se les llame traidores á la Patria , res-
pondan á estas preguntas de una manera que les
haga honor : 1 porque entubo abandonado el re-
emplazo y el aumento del Ejército despees de
esta declaracion de las Cortes por qué no opu-
sieron una fuerza respetable al ejército Frances
que existia en nuestra frontera amenazandonos
de invasion 7 infames ! cuando ya disponian la
marcha del Gobierno en fuga para Sevilla....
cuando no se dudaba de la invasion francesa....
cuando el fanatismo habia hecho estragos en la
cpinion de los incauto..,. cuando las hordas fac-
ciosas se hablan multiplicado horrorosamente por
la impunidad en que el Gobierno les permitia
vivir.... cuando el Grande Riego y los liberales
exaltadas por la Libertad , estaban vilmente ca-
lumniados por el mismo gobierno y su voz careció
va de poderío para destruir las impresiones que
habían grabado los enemigos de 'a Constitucion
en la opinion de los hombres sencillos.... entonces
fué cuando se declaró la quinta. Los efectos de
esta medida fueron á aumentar los males de la
Nacion, porqué los jóvenes seducidos corrieron
á engrosar el bando llberticida.


(6o) El ministro Portugués, pasó una note




['1581
ecrotario de Estado proponiéndole de entrar


en ne,o:iaciones para una alianza ofensiva y de-
fensiva, e Itre Portugal y Espada ; pero como
esto //o era conforme con las ideas del Gobier-
no que dese iba que la Libertad pereciese , se
devolvió la nota al ajente Portugués, pretestan-
do que tenia ciertas e:presiones relativas á Mon-
tevideo. Así lo dijo la Gaceta de Madrid de 4
de setiembre de 1822. ¡ Que imprudencia !


(61) Despues que San Miguel dejó embrolla-
da esta causa y ascendió con asornaro universal,
al ministerio de Estado, fué nombrado para con-
tinuarla el e:ninente patriota Paredes, quien
ausiiizda de hombres sabios y Patriotas, preten-
dió restituir el procedimiento al carácter de jus
ticia que le correspondía : desde luego encontró
en los autos sobrados motivos para proceder con-
tra el general Morillo y contra el jefe. político
Martinez de San Martin ; pero luego que obser-
vó el Gobierno esta marcha del fiscal Paredes;
que habia reducido á prision á San Martín y
practicando diligencias para la aprehension de
Morillo que se habia fugado de Madrid y fué
detenido y puesto en prision cerca de Badajoz,
arrancó la causa de las manos de dicho fiscal y
para acallar los gritas de los Liberales por ésta
ifif , empezaron á ca!urnaiarlo y á denigrar
su conducta los mismos Periodistas consagrados S
calumniar y deprimir nuestra opinion. En segui-
da fueron puestos en libertad San Martín y Mo-
rillo : y la causa se sepultó. Paredes firme siem-
pre en sus principios liberales combatió con las
ar.nas ea la mano, con los enemigos de la Pa-
tria, hasta que acabó su brillante carrera en Un


[459]
patíbulo en la Plaza Mayor de Madrid. El nom-
bre de este mártir de la Libertad será tan apre-
ciado y respetado en las generaciones futuras,
como odiado y maldecido el de San Miguel.


(62) Este hecho escandaloso , suficiente pa-
ra concitar un odio eterno en el corazon de to-
dos los Patriotas contra San Miguel y demos
Anilleros, lo hizo público el Zurriago, sin te-
mor de que lo desmintiesen : el estar consignzdo
en las actas de las sesiones del congreso y ha-
bla muchos diputados verdadert- mente Patriotas,
que estaban prontos á testificarlo : pero ya era
imposible reparar la triste SitU2Ci011 en que apa-
recia la Patria : era ya infinito el nímero de
los A nilleros y los serviles hicieron paces con
ellos , para llegar á su fin de destruir á su tiem-
po á los exaltados y á los Pasteleros.


(63) Si San Miguel hubiera sido un político
y un Patriota


si no hubiera estado c-rno !os
chinas Ministros , ligedos al plan de Cámaras.—
á las notas altareres de estos Gabinetes hubiera
contestado de un modo tal, que proporcionase
tiempo para acioptar medios de defensa , pero
echó bravatas y emprendió la fuga. ¡ Hé aqui
el Enano de la venta!


(64) Este hecho exige detenidas esplicacioner.
Cuando, como ya se ha dicho, marchaba el Mi-
nister . ° con la ma3or decision y entusiasmo á
la consolidacion del inicuo plan de Cámaras y
veto absoluto.... Cuando ya tenia este plan ra-
mificaciones inmensas é inumerables prosélitos...
cuando todos contaban con la conformidad de
la Santa Alianza y del Rey para llevarlo á ca-
bo.., el Rey y la Santa Alianza conspiraban so-


4




60]
lamente á entronizar al despotismo , ocultando
este designio, y contemporizando coa los Alti-
lleros y engañándolos. Entonces fué justamente
cuando San Miguel contestó á las notas altane-
ras de la Francia, Rusia, etc. en los término que
se ha referido. Esta contestacion deslumbró a •.s
:1:)mbres poco reflexivos, y poco políticos, qce


le tributaron el concepto de un gran patriota :
y aunque dicha contestacion fué realme :te bur-
larse ce /os Liberales y del estado de la Nacion,
el Re, sin embargo no pudo sufrirla y llebó á
temer que la Nacion recobrase una aptitud impo-
nente : por otra parte desconfió de sus ministr
por otra el embajador de Francia le daba e,pe-
ranzes projimas de su triunfo y nflexionadas
todas estas circunstancias ea junta de serviles,
se resolvió que el Rey mudase el Ministerio. El
Rey lo hizo asi, usando de la facultad que la
concedía el Código y aqui fue Troya. Entoaees
conoció San Miguel y sus compañeros que el Re e
los engañaba y recibieron la novedad con el
disgusto que era consiguiente. ¿ Qué remedio
aplicaremos á tanto desastre ? ¿ Como reducir al
Rey á que no se aparte del plan propuesto ? In-
timándolo 6 acabando con su existencia si no os-
ce le á que los San Migue/es continuen en sus
poltronas, hasta perfeccionar el plan. Tales fue-
ron las cuestiones que los mini4ros caidos, uni-
dos á Argüelles, á Galiano, á Canga, á Campos,
á Morillo, y á otros pasteleros , agiulron y tal
fué la desesperada resolucion que se adoptó. Pa-
ra llevarla á cabo, contaron los infinitos par-
tidarios del mismo Ministerio , ya por su l ' icor-
poracion en el Anillo, y ya por la que habla


[464}
seducido la anti-política la contestacion sí las an-
tas: todos bramaban de ira ; Galiano que era el
que menos tenia que perder, y el mas propor-
cionado para una jarana , se dispone para el
combate con cuatro ó cinco botellas y seguido de
Campos, marcha tí la Puerta del Sol : allí pero-
ra á la multitud: le dice que la Libertad y la
Patria se pierden sin remedio : que los Ministros
iban á salvarla que por eso los despoja el Rey
de sus puestos: inculca la contestacion á las No.,
tas ; habla de medidas de defensa que se pro-
yectaban; dice Cambien que los autores del Zur-
riago vendidos á la santa Alianza, pagados por
el Rey, y propuestos por el embajador Frances
iban á reemplazar á los Ministros depuestos,
para abrir la puerta á los franceses y entroni-
zar el despotismo : aparece allí San Miguel y loe
dem:is compañeros escepto el ministro de Hacien-
da que se fué á Palacio á decirle al Rey que era
llegada su última hora, sino rebocaba su decre-
to de deposicion del Ministerio : no se olvida Ga.
llano ni los deltas de la pandilla de hacer ab-
sorver al Pueblo, que las Cortes iban á empezar
sus sesiones dentro de diez dias, y que el cam-
bio de Ministerio tenia por obgeto el evitar que
aquellos Ministros tan patriotas diesen cuenta á
la representacion Nacional del estado de la Na-
clon, y con todas estas arterías é infamias con-
siguieron arrastrar el pueblo hasta Palacio
tanda: muera el Rey y muera Megía.


Los amotinados llegaron hasta la esca lera dé
Palacio, y habrian indudablemente penetra do
hasta la estancia del Rey , si la guardia de la
milicia Nacional de infanteria mandada por ei


12




[162]
comunero Mate ) Casado, no hubiera defendido,
el 1.)tj'e-,t•) con la mayor resolucion.


Tiembla edtónces el cobarde Tirano : cavia
al ge.neral Zayas , á contener al pueblo , y que-
da solo con el miaisterio de Hacienda: este re-
dobla entonces sus esfuerzos para persuardirle
de! grande ries en que existia , le hace firmar
un decreto para qué los DIttistros conth:uasen en
sus puestos interinamente y hasta que lean en
las Cortes sus respectivas memorias: baja ufana
con este decreto á darte la noticia á San Miguel
que esperaba embozado en su capa, en el umbral
de Palacio: y consolados ya con esta novedad,
tratan de separar al Pueblo de aquel sitio , y lo
consiguen en efecto, pero la ag:tacion pnaular
no se calma con esta medida; y el.Rey y los Mi-
nistros no aciertan á tornar un partido seguro. El
Rey que h;-.bia pensado en elegir por Ministros
á sus mas distinguidos favoritos... á los mas acre-
ditados serviles , cono&ó la imposibilidad de lle-
var adelante este designio, y obligado por la
r ecesided , te puso ea manos de los Comuneros,
única fuerza respetable que podia garantir su
existencia ; consultó con algunos individuos de la
suprema asamblea sobre la nueva e l eccion de Mi-
nistros : envió á Guseme para que Megía le indi-
case las personas á proposito para desempeñar
este encargo; á cuyo acto estuvo presente el Pa-
triota Juan Espino, y Megía buscando el acierto
el bien de la Patria le indicó que nadie podria
darle un dictamen mas acertado sobre el parti-
cular que el Patriota Juan Romero A 'puente. Es-
1•-t designó en seguida Florez Estrada, Calbo de
Rozas , Torrijos, Mcloz y otros individuos co-


[463]
nocidoa lados por eta adhesion al sistema, y en el
mismo dia expidió el Rey un decreto nombrando-
los por sucesores de los San Migueles.


Todo esto fué efecto de las circunstancias de
apuro que mediaban: en otro caro jamas se hubiera
podido recabar del Rey la eleccion de unas per-
sonas tan aproposito para salvar la Patria. Los
Comuneros entonces tenias una fuerza irresistible:
mas de sesenta mil valientes habían jurado en las
fórtalezas de la coafederacion defender las liber-
tades patrias, sobre los restos del héroe Padilla; y
estos mismos valientes hubieran contraído sus es-
fuerzos á sostener á los ministros nuevamente
electos como los mas á proposito para hacer el
bien del Estado ; pero la intriga de los Anille-
ros puso en estado de no poder obrar ccn la fir-
meza y energía que era entonces tan necesaria.
Voy á esponer los medios inicuos que se adopta-
ron para que este nombramiento quedase sin
efecto.


Al Rey le pesó de haber hecho este nombra-
miento tan luego como reflexionó que los elegi-
dos no eran personas que se adherirían á sus ideas
liberricidas , pero ni se atrevia á revocarlo , ni
le pa recia decoroso confirmar á los San Migue-
les en sus puestos, y por otra parte esto no le
acomodaba, porque va los miraba con odio. Los
Anilleros atolondrados con este golpe mortal, no
hallaban el modo de repararlo : redoblaban sus
juntas, se hacen en ellas diferentes proposicio-
nes, y se adoptan planes y medios indignos al
propo;ito de conservar el mando 6 continuar el
ministerio de los San Migueles, 6 entrar á reem-
plazarlos otros Anillerus. Tal fué el fin que se
propusieron.




F 4 15)1]
Ambos estremos eran bien difíciles, pero erg


preciso aventurarlo todo y no reparar en los me-
díos, para conseguir cualquiera de ellos. Con es-
ta idea se trató de destruir la suciedad de los Co-
muneros, 6 al menos ponerla en desorden y con-
fusien por algun tiempo ; y desgraciadamente lo
lograron. ;I-kmbres perversos! Ella era el ante-
mural—. la égida impenetrable que defendia las
Libertades del pueblo Español , y trataron de
destruir los esfuerzos de aquellos Patriotas por
medio de la mas detestable intriga. El brigadier
Pelares, hombre venal, que había sido individuo
de la sociedad del Anillo, en su institucion, fué
el lazo traidor en:e pretestando desertar del Ani-
llo, se introdujo en la confederacion de Comune-
ro, para espiarlos y procurar su ruina. Era en-
tonces Jefe Politico de Madrid y Comendador de
la suprema asamblea de los Comuneros : el Ani-
llo le llamó á su seno : alli le ofrecieron los Mi-
nistros la foja de Mariscal de Campo; y alucina-
da su alma baja con este oropel , oftecíó cumplir
cuantas ordenes so le diesen. En sus resultas el
mismo Palatea y otros diez individuos de la
asamblea, que por sus sulestiones tomaron tem-
bien parte en el Anillo, se se pararon de los Co-
muneros, acusaron de republicanos y anarquis-
tas, á los mas distinguidos Patriotas: quisieron
formar otra Comursería: expidieron reglamentos
para ella, y usaron en fin cuantas supercherias,
iniquidades é infamias pudieron pensar unos hom-
bres resueltos á no hacer caso de la honra á cam-
bio de medrar, para destruir la asociacion, No
lo consiguieron porque las merindades á que per-
tenecían estos Procuradores traidores y perjue


[4651
gag cine se unieron á Palarea, nombraron inme-
diatamente otros procuradores Patriotas para
que los reemplazaran; pero en el tiempo que me-
dió hasta que vinieron á la asamblea los nuevos
elegidos.... mientras la asamblea se ocupó en dis-
cernir las calumnias é imputaciones de estos trai-
dores.. hasta que se desengañaron muchos buenos
Comuneros alucinados por los mismos traidores...
la confederacion estuvo en bastante desorden é
imposibilitada de poder obrar con la energía que
lo hubiera hecho sino hubiese ocurrido este desa-
gradable incidente. El separó de las juntas de loe
Anilleros todos los obstáculos y los puso en ap-
titud de obrar con ventajas para perfeccionar
sus deprabados designios. En primer lugar inti-
midaron al Rey, le hicieron creer que su ruina
era indudable si se separaba del plan de Cáma-
ras, y el Rey, sin perder jamás de vista su idea
de engañarlos, les prometió de nuevo seguirlo.
Le oyeron con desconfianza; pero no tuvieron el
valor que era necesario para apartarse de sus
intenciones aunque ya consideraban difícil llevar-
las á efecto.


Entonces fue cuando el Ministerio espirante
de acuerdo con el Anillo, y con la doble idea de
sujetar a! Rey á sus planes 7 delostenerse Fla las
poltronas, se resolvió la salida del Rey y del
Gobierno para Sevilla. Los franceses no bebiera
pisado todavía el suelo Español, ni lo pisaron has-
ta un mes despues; pero la inicua disposicion de
desamparar la Corte , ( que se disfrazó diciendo
que se quería dejar espédito el paso al enemigo
para que se internase, pues habia planes come
binados parg cortar su retirada ) sirvió para Vi-


ova




[1H]
gorizar los planes de los serviles , para aumen-
tar las hordas de los faccioso:, para separar al
Gobierno por especio de un mes de las intere-
santes tareas que reclamaba con urgencia la si-
tuecion de la Patria, para invertir iumensas su-
mas , sin consideracion á la penuria del tesoro
Nacional, para ocupar mas de veinte mil hombres
en la escolta del Gobierno , y para dejar espé-
dilo el peso á los enemigos.


Las Córtes, cuya mayoria habla ya tomado
parte en el Almilla, combinieron en todo lo que
propuso el Ministerio; é hicieron mas : crebran-
taren su reglamento interior, para prolongar la
permanencia de. los San Migue'


les en sus puestos
cuyo fin estaba circunscripto tija


• lectura de sus
respectivas mem, rías ee el Congreso. Esta lectu-
ra debia verificarse, segun lo dispuesto en si re-
glamento , á los tres dias siguientes al de la aber-
tura de las Cortes; pero estas abusando de su
anteridad y de su peder, acordaron que 'as me-
morias de los Ministros no .se le seseo hasta que el
Congreso se.. instalase en Sevilla.•En esta oJaeiort
feé cuando el eminente patriota Romero Alpuente
publicó un panel que tituló St,bre la probable
disolucion del Estado, ca el cual p!obó que los
tres federes conspiraban de hecho contra la Li-
bertad , pero ,ate clamer, s fueron il•útiles: es:a-
bao lodacics Con la cera de Tiliees los °idos de:
los Españale y desoyeron este grito de uno de


mejores pan-idos , así como desoyeron tem-•
bien lea que di:nos ee el Zurriago, despreciao-
do la muerte y,los peligros que por todas partes
cros amenazaban de cerca.


Nada les quedó por hacer á los Artilleros para


[167]
qué continuase el mi/temerlo de los San. Migueles.
A la llegada del Rey á Córdova trataron de que
el pueblo y las tropas clamasen por la continua-
cío/1 de los Ministros; pero los Cemuueros frus-
t •rou su inte.no. La misma tram estaba urdi-
da en Sevilla para el dia en que llegase el Ren ;
pero tambien fué destruida. El Congreso iba á
empezar sus se:ioues y los Ministros interinos
tenias que cesar sin remedio , á la par que con-
cluyesen la lectura de sus memorias y los Patrio-
tas electos debian reemplazarle. Por consecuen-
cia los Anilleros velan prójima la destruccion de
sus planes; y el Rey tambien vela perjudicados sus
cona:os á destruir la Libertad: y en este coaílicto
reciproco cada un) procuraba buscar el medio de
evitar el golpe fatal que los amenazaba. Para en-
contrarlo se reunieron en la casa del ex-Diputa-
do Cabaleri, los siete ministros San Migueles,
Canoa, Argilelles, Calatraba, Adan, Rico y otros
varios diputados, y allí re acordó : que los Mi-
nistros intimidasen al Rey y le dijesen que los
electos no tenian la ophtion pública y era fuerza
que nombrase á Calatraba y á Zorraquin , y es-
tos de3pues de ocupar sus puestos le dirian á S.
M. los demas sugetos que debla e t egir para los
demas Ministros : y se acordó tambee que Adan
y Rica fuesen comisionados á decirlo á Flores Es-
trada y á Calbo de Rez te que renunciaron sus
empleos. i Podria atacarse la Constitucion de un
modo mes espreso y terminante, obstruyendo
al Rey la voluntad de separar á los Secretarios
de Estado y del Despacho ! Los comisionados
cumplieron exactamente sus encargos y aun que
Flores Estrada y Calbo de Rozas respondieron á




[4 681
la intimacion que se les hizo, que estaban distan-
tes de hacer semejante renuncia, corno de cono-
cer autoridad en una junta tan clandestina é ile-
gal ; l os Ministros recabaron del Rey , sin vio-
lencia, porque justamente era lo que deseaba,
que se revocase el nombramiento de los minis-
tros Patriotas y que nombrase á los Anilleros
propuestos, que eran tan malos ó peores que los
San Mieueles , para que acabasen de perder la
Patria. Calatraba, ese bribon que no se avergon-
zó de poner en ice diarios de Madrid varios ar-
tículos que firmó, blasonando de Anillero y de-
fendiendo una institucion tan criminal y detes-
table... que se habia distinguido en las Cortes por
sus trabajos é intrigas, que comentó y sostuvo,
para que desapareciesen la libertad de Imprenta,
el de-echo de peticion y las tribunas populares
en el autor de un Codigo penal indigno de un
pueblo libre.... un adulador bajo y ratero de Ar -
gilelles y del conde de Toren° , que siempre lo
trataron á la baqueta... un miserable leguleyo que
jamás habia saludad, la Política... tal fué el hom-
bre que en las circunstancias mas criticas y mas
dificiles de la Nacion, fué preferido por una in-
triga detestable á un Florez Estrada y á sus dig-
nos y sabios compafieros.


á Y quienes fueron 1 ei.egielos por el tal Ca-
latraba para sus sócios ? Manzanares, capiten sin
talentos y sin probidad, que por haber fdtido
en el orden Masónico, al secreta y á la confian-
za que de él se hizo, fué puesto entre columnas
y reprendido, agriamente y obligado á pedir per-
don de sus faltas á todos los Hermanos, lo que
ejecutó de rodillas y llorando á lágrima viva




P 69]
sin bruto que porque no rebuznase mas en le
tribuna de Lorencini y Fontana de O ro , donde
predicaba todas las noches, que era necesario
acabar á pufialadas con el Ministerio de los Ar-
güelles , le compró el mismo Ministerio con la
Tesorería de Barcelona, al mismo tiempo que com-
pró á Alcalá Gdiano, con la intendencia de Cór-
dova, y convirtió á los dos en panegiristas de sus
operaciones.... el hombre inrorsecuente y Isa:ta
que empezó á adular á Argüelles desde aquel
!elemento y lo hizo Mason... el pícaro que ven-
dió á Barcelona á los mas distinguidos Patriotas
y les hizo la guerra tan luego como se incorpo-
ró en la sociedad del Anillo.. el que ascendió
por estos medios á la Jefatura Política de Valen-
cia , introdujo el desorden, la desunion y el dis-
gusto en aquella Ciudad, y se consagró á perse-
guir la exaltacion, á canonizar el sistema de mo-
deracion y apatía que nos ha perdido ; producien-
do su mal porte en este destino que el pueblo se
amotinase contra él en dos ocasiones... este fué
el hombre elegido con asombro de toda la Na-
cion , de la Gobernacion de la Península... San-
chez Salvador, que fué uno de los generales á
quienes Riego prendió en el cuartel general de
Arcos en el dia t.° de enero de t Bao, que ha-
bia sido Ministro con Feliu y persiguió y calum-
nió á Riego y dejó su puesto á la fuerza cuando
como ya se ha dicho , se llegó ya el caso de que
la mayor parte le negó la obediencia al Gobier-
no.... este fué otro de los propuestos por Calasra-
ba y elegido para ministro de la Guerra. Este
Anillero se comprometió con el Rey ea el viaje
desde Sevilla á Cádiz ea tales términos que S. M.




[470]
le amenazó de muerte y le dijo 6 qué habla de
in andar en absoluto ó que dejarla de existir : y
considerando entonces el misma Salvador que era
imposible llevar adelante el pial de Cámaras,
oponiendose el Rey, y agobiado de los remordi-
mientos por el mal que habla causada al Estado;
se degolló en Cádiz, y dejó una carta para Ca-
latraba y damas compañeros, en que les decia,
que habla tomado aquel partido porque no podía
sufrir ya la infamia de que estaba cubierto y les
persuadia que adjurasen sus errores y que tra-
bajasen en favor de la Patria, parque ya era vis-
to que el tirano Fernando pretendia decidida-
mente esclavizarla. Y quién fué el sucesor de
este Ministro ! ¡ esto es asombroso


. ! el coronel
de artillería Puesta ,hijo político del general Cam-
pana, asesino del pueblo de Cádiz ea so de mar-
zo de 582.0.


Yandiola tambien tuvo la desgracia de ha-
ber hecho parte de este Ministerio ; para eclip-
sar el bien merecido concepto de Patriota que
le hablan adquirido sus padecimientos en la cau-
sa de Richars, y otros importantes servicios que
habla prestado á la Patria : él fué seducido por
Argüelles y demas Anilleros y tomó parte en es-
ta sociedad ; pero no manchó su honra declaráct-
dase como sus compañeros mencionados amigas
del gobiérao tiránico.


á Si estos ministros ( se dirá ) eran tan infa-
mas y perjudiciales, como no hicieron los Patrio-
tas una vigorosa opasicion á que ocupasen las si-
llas ministeriales? Mas : si se les suponía de
acuerdo con el Rey desde su ingreso al Minia-
cerio, para derrocar el sistema constitucional, ea-


[114
mo ellos influyeron en Sevilla para que las Cor-
tes privasen al Rey del mando absoluto y le pu-
siesen una regencia ? Voy á contestarles. Los úni-
cos que pudieran haber hecho tan esfuerzo con-
tra estos nombrarnienios , eran los Comureros,
pero estos no hablan podido reparar todavía el
daño que les causó Palarea : el Anillo por el con-
trario tomaba cada dia mas incremento , porque
era el distribuid. r de las gracias y de los empleos:
Riego estaba despreciado y proscrito por los mis-
mos Anilleros : la benemérita milicia Nacional de
Madrid procedia engañada por los San Migueles,
y la mayor parte de sus oficiales eran tambien
del Anillo : las tribunas populares hablan calla-
do : los ejércitos franceses avanzaban hácia Se-
villa, sin encontrar obstáculos , no habia pues
elementos que combatir la masa de pícaros que
arrastraron á su partido á una multitud de ob-
cecados, de tontos y de mentecatos


Y en cuanto á la segunda pregunta: ya se ha
dicho diferentes veces que el Rey trabajaba de
hecho constantemente, al proposito de erigirse en
Tirano : que engañaba á los ministros aparen-
tando conformarse con el plan de Cámaras ; y
para esto se trajo el ejército Francés y se dicta-
ron las inicuas providencias que se han indicado,
pero el Rey se le hacia un siglo rada momento
de los que trascurrian, que pucrese desplegar la
rabia y furor de que su corazon estaba posehido:
llega á Sevilla : recibe allí el bando servil un re-
fi eran considerable con los canónigos y frailes
que se unieron : se creen ya con fuerza suficien-
te para proclamar el despotismo derraman su
oro á manes 1:enas : y se prepara nada manos




ase


r 4


X21
ou's una canmusion popular que tenla por obgea
tu acabar ea una sola noche con las Cortes, con
Riego y con los Ministros. La trama se descu-
brió pozo antes de la hora designadl por el Rey
para el rompimiento, y entonces viéndose com-
prometidas tos as tn itrines, denuncian el proyec-
to, corre á las aria te la Tropa y la Milicia para
sostenerlos, se llenan depabura los serviles, y
tiembla el Rey; y lis Cortes para acabarse de cu-
brir de oprobio.... para acabar de peder la hon-
ra, declaran al Rev inepto para regir hasta que
llegue á Cadiz. Este fué un pastel da af,5Ifo : inep-
to en Sevilla, apto en Cádiz para mandar , es
cuanto desatino podia ocurrir á unos hombres de
talentos va agobiad as con el peso del enorme cri-
men de lesa Patria qiie g r avitaba sobre eilos.


(65) El conde del Abisbal que ea t8ra ha-
bil publicad co 1 entusias II) la C9nstitucion Po-
lítica, en la Isla da L o 1, y d 6 púdicas demes-
tra 3ioaes de patriotismo




que proclamó en Lo-
grafía en (81 4 el peder absoluto siendo entonces
general del E é ec,ito que se habia confiado para
sostener la Canstitucio 1


que ea r 819 formó
la determinaciou de iitsurreccioear el Ejército es-
pedicionario, que mandaba en Jefe, pare que pro-
clamase la Constitucioa, que en 8 de julio del mis-
mo A) prendió á los m se decididosJefes que es-
taban coa él en el plan y los dejó espuestos al
furor tiránico, que después engañó al Rey y á la
frente del regimiento Imperial Ale'endre


pro la-
mó la Constitución en la Mancha en marzo da
Up a.. que luego adaptó la resolucion de asis-


tir pasivo ea la oscuridad hasta que la Nacion
yermase erecta idea de estas inconsecuencias, y


t 4 751
trabajando para que los generales Quiroga , Rie-
go y Arco-A rgiiero, lo restituyesen á su estima-
cion y aprecio este fué el hombre digno do
la confianza de los A; illeros para mandar el
Ejército de reserva, que no entregó á los fi ante-
ses, porque se interceptó su correspondencia, y
una Junta de los generales del mismo Ejército le
privó del mando.


(66) De cclienta mil hambres miserables cons-
criptos se componia el ejército Frances, destina-
do á invadir á una Mei( n en cuy os cera' os se
presentaban cada momento promontorios de ca-
dáveres de los vencedores de Merengo acaudi-
llados for N'apoleon , que da minaba el mundo y
destruidos r or los brahos lbs ros : y estos ochen-
ta mil h< ml res Pegaron desde los Pirineo s , hasta
las colonias de Hércules sin dar uta batalla. ¿Cual
ftié la causa? ¿No hebia en España tropas para
oponérseles? La causa fué el ministerio del Ani-
llo. En España beba entonces sobre tre s cientos
cincuenta mil hombres armados y deseando lle-
gar á las manes con los satélites de! Tirar o. y
no se crea que es paradoja. La Tic pa de línea,
la Milicia arreglada, y la milicia Nacional que
estaba con les armas in la mano escedia al nú-
mero indicado ; pero los Jefes eran Anilleros y
lejos de fomentar el entusiasmo y de engrosar el
número de combatientes, trataron solo de que
uno y otro se disminuyese y de dejar espédito el
paso.


(67) Los ministros Anilleros vieron ya en
Cádiz frustrados todos sus planes, y considerán-
dose perdidos pensaron unicamsnte en complacer
al Rey y ganar su amistad á costa de infamias




[4 74]
y de bajezas, y desde entdnces contribuyeron con
toda su fuerza á la ruina de la Patria.


Las Cortes les ayudaron á perfeccionar la
obra, y accediendo á todo cuanto los Ministros
pidieron, ya dejando de cumplir su deber, cuan.:.
do e n repetidas ocasiones pudieron y debieran
haber separado del trono al infame Fernando 7.0


Dos Diputados (patriotas y como ellos hu-
yo pisos) Ruiz de la Vega y Oliver hicieron en
Lóndres una declaracion que insertó el Times
en 6 de noviembre del año de 1823 y la acom-
pañaron diferentes documentos y con ellos pro-
baron que el Ministerio habla sido traidor : mil
veces lo habla dicho el Zurriago y nunca fué
creido.


{175]
EL GRITO NACIONAL.


Himno patriótico que compuse para la espedicion á
esta ciudad de Almeria donde quedé prisionero y hallé
mi sepulcro.


Libertad y union : alzad,
Venid, guerreros de Espada,
Las cadenas arrojad:


Viva la libertad!


Esos son huesos esparcidos
De los valientes de Auster-


liz :
Sus filas formidables


Supimos destrozar
Conscriptos miserables,


Qué pochas esperar?
Libertad etc.


Esa falange aborrecían
Que al Gran Riego muertedio ,
En breve en humo conver-


tida
Pagará el crimen tan atroz:


A la campana, Iberos,
Al mina, hijos del Cid,
Venguen nuestros aceros
A tan noble adalid.


Libertad etc.
¡Alma sublime del gran


Riego,
Oye la voz de tulNacion
Guerra sin fin á sangre y


fuego
A la tiránica opresion:


Abajo el despotismo


CORO.


Ya llegó el dia de la glo-
ria,


Y de mostrar nuestro valor:
Ahora marchando la victo-


ria
Recobrarémos nuestro ho-


nor:
Una traición imnia


Nos hizo sucumbir:
Mas ya nuestra osdía


Quien puede resistir ?
Libertad etc.


Tiemblen las hordas del
tirano,


Tiemblen lossiervos de LuisQue el Leon terrible Cas-
tellano


Destrozará la Flor de Lis:
J Huid! huid : franceses!
Dejad esta region


Donde os venció mil veces
La Española iNacionl


Libertad etc.
¿Veis esos huesos carco-


midos
De que está lleno este pai,,?




E4 cal
'Y el cetro de maldad, Venid, guerreros dirspafile
Nuestro esfuerzo al abismo Las cadenas arrojad:
Lánzelu sin piedad. Viva id libertad.
Libertad y union: alzad ,


Nombres de los individuos que fiteron fusilados en M'it-
rio con Benigno Morales en 24 de Agosto 1824.


Carlos Hoyo& y Mier teniente coronel.
Juan Lux teniente coronel.
José Bebes subteniente.
Juan Bautista Peehu viajante de la Isla de Cuba.
Antonio Guerrero.
José Garverino.
Bernadino Bustamente oficial retirado.
José de Rojas.
José Gamba.
Luis de Rute capitan de Voluntarios de Aragon.
Juan Francisco Carrera, comerciante..
Ramos Manzano sargento.
Carlos Masoff, pintor.
Francisco Rosas.
Francisco Palan.
Tomas Reis de Irlanda.
Guillermo Huiti de Dublin.
Francis o Yavarrete.
Miguel Ximenez.
José Rodr:guez.
Evaristo Fernandez.
José Ferre vi.
Francisco Antonio *levan:
Monta lot.
Angel Garay,
Nicolas Gonzalez.
José Lopez.
Francisco Gonzalez.
Juan Gonzalez.
Juan Perez.
Jorge Navarrete.